Alisson veía a su hijo, no podía evitar sentir culpa, el siempre había sido un niño que para ellos sólo era distraído, y la realidad era que no siquiera era dueño de sus pensamientos.

- Mi pequeño sol, lamentó que tu madre no haya sabido ver que sufrías.

Jake despertó algunas horas después, el vio a su madre y la abrazo, ella a el, Jake fue el hijo más pequeño de Alisson, cuando nació creía que no sobrevivirá pero August sano su cuerpo, ella siempre lo veía tan frágil, le daba gusto que ahora el podría ser normal, podría jugar con los demás, sin alejarse por no comprender algunas cosas.

- Mi pancita tiene hambre madre.

- Bien, vamos para que comas algo delicioso mi pequeño solecito.

-Te quiero madre.

-Y yo a ti mi pequeño.

Alisson lo llevo a comer algo, y después a jugar con los demás, Conforme pasaban los días, Jake, entrenaba con su abuelo, y se hacía cada vez mejor con su poder, el podía abrir y cerrar su mente a los pensamientos de los demás, Jason que iba casi todos los días a ve