— Si quieres podrías venir a mi casa... — Tae se había puesto un poco rojo y había desviado la mirada al suelo, esta noto lo nervioso que se había puesto, esta lo pensó bien, las cosas estaban difíciles y Ares sabia de la existencia de Tae, había mentido diciendo que era un compañero, si se enteraba que era policía iba a meterlos a los dos en problemas, debía negarse, pero su subconsciente la engaño. — Si, no suena nada mal. — Penelope se maldijo así misma, Tae la miro de nuevo con una gran sonrisa cuadrada que hizo sonreír a Penelope también, este la acaricio por instinto, Penelope busco más del contacto de Tae.
Tae se separó de ella primero ayudándola a levantarse del banco donde habían estado segundos antes, salieron de los vestuarios para ir a por sus cosas, cogieron también un poco de trabajo para poder revisarlo y n
El taxi paro en la gran verja de metal negra que no lo dejaba continuar, esta le pago y se marchó, miro hacia dentro viendo que había coches y las luces encendidas, llamo al portero automático esperando que le abrieran, tardo un poco más de lo normal, comenzaba a tener frio. La verja comenzó a abrirse, comenzó a entrar en la propiedad y un Ares serio y agitado salió de la casa en busca de Penelope, esta iba a sonreír, pero la cara de Ares le indicaba que no estaba contento de verla. — ¿Qué haces aquí? — Penelope paro en seco. — Pensaba que podia venir a verte. — Penelope le dijo con hostilidad, Ares comenzaba a darse cuenta que ella comenzaba a sospechar de su actitud, estaba siendo muy brusco pero que viniera sin avisar estando todos sus socios dentro no era una buena mezcla. — Si claro que puedes, pero... no me has contestado en todo el día a mis mensajes y llamadas apareces aquí como si nada. — Ares fingía enfado para ver si podia salir de esta. — Hoy no he tenido un día bueno y no
Penelope se sentó despacio en la cama de Ares despacio, analizando e intentando calmarse ¿Como lo avisaba? Ese hombre era muy peligroso y si él también sabía quién era ella y la estaba delatando... Penelope rebusco en su mochila y preparo su arma, por si acaso tendría que usarla, eran siete contra ella, pero al menos podia herir a uno, las manos comenzaron a temblarle, no podia actuar impulsivamente, estaba en la casa de unos mafiosos, todas las personas de abajo lo eran, la casa estaba repleta de guardias que en realidad trabajaban para el cómo mafia. Permaneció alerta mirando la puerta de la habitación, no escuchaba nada, así estuvo durante un buen rato, hasta que se escucharon gritos, esto hizo que se levantara de golpe, no saco el arma, la que chillaba era Cat... —No puedes seguir con esto, está viendo demasiado, ella es una jodida policía, el hermano no la está controlando ni obligando a nada, ella lo hace porque quiere, debes confiar en mí siempre lo has hecho así, sabes que ten
Habían esperado a la mañana siguiente para hablar bien del tema, lo que le venía bien para Penelope, tenía que organizar una estrategia para poder contarle a Ares lo que sucedía sin involucrar todo lo que escondía, debía estar bajo su sombra y su protección, debía tenerlo en la palma de su mano si quería sobrevivir en el caos que había a su alrededor.— ¿Estas segura que quieres esto? Hace unas semanas dijiste que no, puedo protegerte igualmente, siento que esto es mi culpa y quiero solucionarlo. — Penelope decidió aprovechar su culpa. — No... no es eso, no pienses que solo es por eso... Sabes que no me llevo bien con mis padres, él no ha sido bueno con nosotros, conmigo fue peor, él quiere que me vaya de casa cuanto antes, no consigo encontrar nada y mi hermano esta tan metido en su trabajo que ni siquiera lo veo, me siento sola, eres lo único que tengo, creo que hemos avanzado igual que nuestros sentimientos y... Si no quieres no pasa nada. — Penelope no tuvo que fingir mucho para q
— Pero sé que sientes algo por mi... Lo que paso en mi casa y lo que me estás diciendo hoy es muy repentino, me estas alejando de nuevo, sé que algo grave ha pasado y si no me lo cuentas tú lo averiguare por mi cuenta, tengo muchas sospechas de que ocultas cosas y es justo que me las cuentes, si de todas formas es la última vez que nos vamos a ver. — Penelope dudo un poco pero no podia decir nada y menos ahora, estaba escogiendo el lado de Ares y aunque antes ya lo había traicionado decidió no hacerlo de nuevo. — No dire nada, es suficiente con que sepas que voy a vivir con esa persona y no estuvo bien lo que casi pasa...Ya he dicho todo lo que quería decir, sera mejor que me vaya. — Penelope se puso de pie, y se dispuso a marcharse ya que se había dejado la mochila en el coche, Tae se levantó igual de rápido que ella, el la sujeto del brazo con fuerza y la hizo darse la vuelta quedando sus cuerpos pegados, Penelope lo miro sorprendida, Tae acorto la distancia y la beso, fue un beso ru
Ares termino el beso y miro a Penelope, no sabía que pensar de ella, pero se estaba arriesgando mucho...—Es un regalo muy bonito, gracias... — Penelope sonrió al ver las pulseras en su respectiva muñeca, estaba feliz de estar aquí con él, lo quería de verdad, ahora que iba a estar lejos de la comisaria, de la unidad, de Carlo, de Tae... Todo sería más fácil con Ares, ella estaría protegida por si Rock decidía hablar, Ares estaría a salvo si Carlo ya no obtenía información de su parte y le impedía conseguir más, sabía que Carlo quería destruir a Marcos, pero eso significaba que hundiría también a Ares y no podia permitirlo ahora que había dejado dejar todo esto a un lado, iba a ayudarlo.— Creo que sería conveniente que conocieras a mis socios, tengo un local a las afueras, tranquilo, se puede arreglar y podemos hacer una fiesta, una cena, si quieres podrás organizarla tu. — Ares la abrazo y beso su frente, Penelope se sorprendió al escuchar que quería presentarle a sus socios, el de
Penelope había quedado con su hermano en la cafeteria donde siempre iban juntos, está ya estaba sentada en la mesa esperándolo, el frio comenzaba a ser fuerte, así que pidió un cafe largo bien caliente, Carlo llego a los pocos minutos viendo a su hermana sentada en la terraza esperándolo, estaba nervioso... Salio a la terraza y se sentó frente a ella, esta lo observaba sin ninguna expresión, este puso sobre la mesa una carpeta bastante gruesa, Penelope le dedicó una corta mirada, conocía a su hermano sabía lo que iba a intentar hacer, esta se cruzó de brazos reacia, Carlo comenzó a hablar. — Se lo que hice, pero tenía mis motivos, he cometido un error, pero son demasiadas cosas para llevar adelante y la presión de Marcos estaba ahi. — Se suponía que yo me metí en esto contigo por eso, para ayudarte y no te comiera la presión, pero no me dejaste hacer nada, te dije que mis sentimientos estaban a raya podia haberlo hecho de otra manera, esto podría haber tomado otro camino, pero tú no
Penelope volvió a la que ahora era su casa, había cambiado las clases por la tarde ais sería más fácil que Tae ya no fuera su compañero y así fingir que no lo vería más, las mañanas podría estar en la mansion incluso buscar un trabajo mientras, Ares no estaría en las mañanas o eso pensaba ella, cerca del mediodía Ares estaba en casa parecía más relajado, entro rápidamente en la casa encontrándose a Penelope estudiando cosas de la universidad, este sonrió ante el hecho de que parecían una pareja normal sin problemas ni peligro, esta se percató de que estaba ahi y sonrió, se acercó a ella y la beso sin interrumpir mucho su estudio se sentó en el sofa frente a ella quitándose su chaqueta y poniéndose comodo.—¿Como te va? —Pregunto Ares sonriéndole. — Bien estudiando un poco antes de clases, no te esperaba aquí tan pronto. — Dijo con la misma felicidad. — Bueno antes no tenía nada bonito, sexy y especial esperándome en casa así que trabajo más eficiente para poder volver cuanto antes. —
Carlo se había levantado temprano ya que casi no había dormido nada, había sido una semana muy dura, había dado luz verde para entrar a ese lugar, seguía pensando quien podia haber conseguido su número para mandarle aquella información, su hermana podría estar allí también y podría desatarse un caos porque Tae y Tommy la reconocerían y podían pasar muchas cosas, quizá su hermana tenía razón y el poder había comido su cerebro pero había conseguido en pocos meses muchos logros y eso lo había llevado a tener a Marcos al borde del precipicio, había elegido también así que era el momento de actuar, no sabía la hora de la reunion, no sabía si esa persona le mandaría la hora de la reunion o ya no diría nada, había intentado rastrear la llamada pero había sido imposible, sospechaba de Cat, aunque Penelope había dicho que ese hombre la había amenazado cara a cara y había sacado fotos, era el informante de Marcos así que debía quitárselo de en medio el primero para dejar a Marcos sin información