El sol arremete contra mí, cuando abro los ojos, puedo observar a Klaus en la puerta. Me levantó de golpe sin recordar haber llegado a la habitación anoche. Miró mi ropa, tengo puesta la pijama, a mi lado, Jamie también está vestido, así que dejo salir un gran suspiro.— Buen día, Klaus —saludo con demasiada felicidad.— ¿Dónde estuviste ayer, mamá? —Klaus se acerca caminando a mi— Quería que me contaras un cuento por la noche, pero no llegaste…— Ven aquí —lo abracé muy a la fuerza y lo subí a la cama, entre nosotros.— Alguien se ha subido a la cama —murmuró Jamie, Klaus comenzó a reírse cuando Jamie le empezó a hacer cosquillas en el vientre. Pasé la mejor noche, tengo ese sentimiento, porque parte de ella es un obscuro recuerdo, creo que hemos tomado demasiado. No sé como es que llegamos de nuevo al hotel.…Las mañanas son tranquilas, nos hemos tenido ningún inconveniente desde que llegamos a este nuevo país. Aunque no queríamos casarnos tan a la prisa, básicamente fuimos oblig
NARRADOREl enorme edificio que pertenece a Assim Bashar, luce espectacular con sus decoraciones. Inclusive sus empleados lucen pulcros. Entre los empleados, se murmura que el jefe viene de visita, por lo que están demasiados nerviosos.Assim Bashar como jefe, es estricto, cero comprensivo y exigente. Assim Bashar como esposo es celoso, estricto y muy complaciente. Su segunda esposa, salió de la empresa, todos murmuran a voces que fue un matrimonio por contrato.Assim Bashar baja de su camioneta, los empleados abren las puertas no para ser complaciente, si no porque no quieren que se detenga en su paso a su oficina, todos conocen como es Assim cuando se detiene en cualquier campo.— ¿Cancelaremos la reservación de hoy en la suite? —pregunta su asistente quien le sigue el paso.— No.— Pensé que había sido un error, disculpé —dijo el tonto asistente, pues es muy joven y no tiene experiencia.— Quiero que cancelen los vuelos a París —le comenta Assim a su asistente— No quiero que ningún
La hermosa mujer morena que está sentada a lado de Assim, es espectacular. Tiene un aura muy diferente a muchas mujeres.— Estás hermosa —me dice Jamie para que escuche solo yo— Eres hermosa.Desde que estoy con él, claramente he podido diferenciar un estas hermosa con un eres hermosa. Así que sonrió con una pizca de victoria.— Gracias, Jamie —le respondo con un beso demasiado fugaz.— Assim —dice Jamie— Ella es mi esposa, Claire Walton. Claire, el es Assim Bashar.— Un placer —respondo bajando un poco mi cabeza, como es costumbre de aquí, pero no demasiado, pues, aunque haya costumbres, también tengo mis propias creencias.— Una hermosa mujer, James —Assim jamás se dirige a mi— Puedo entender que solo tengas una esposa.— No quiero otra más, AssimJames me ayuda a tomar asiento, desde ya que Assim no me está hablando a mí. Solo me miró unos segundos, después de todo lo que dijo fue para James. Este tipo es un odioso egocéntrico de primera. — Hola —la voz y el acento de la esposa d
Narrador Maya está por las calles de la ciudad. A pesar de lo que le ha dicho su amiga, está por demás decir que ella no piensa rendirse ante un hombre como Assim. El aeropuerto queda demasiado cerca, así que en cuanto despertó, salió del hotel para ir. Justo cuando cruza la calle, un árabe de le pone en frente, impidiendo su paso. — Con permiso —dice Maya al ver que no se mueve, Maya lo rodea pero el se vuelve a mover— ¿Qué pasa? El hombre saca un fajo de billetes, mostrándoselos a Maya. — ¿Qué? ¿Piensas que soy de ese tipo de mujer? El hombre no entiende el ingles de Maya, pero le sigue mostrando los billetes, al ver que Maya pone mala cara, saca más. Piensa que quizá sea alguien muy cara, pero no piensa desistir. — Por favor, no me interesa. Me están haciendo que odie todo el país, en serio —murmura molesta. Maya al pasar por el lado del hombre, le jala el pelo. El jalón fue tan fuerte que Maya está por caer al suelo, ha perdido el equilibro. Maya termina en el suelo, cayend
Flaskback Después de que Claire se fue a París [Perspectiva de James] — ¿Sabes quién lo ayudó? —pregunté en general— Esto se nos está saliendo de las manos. — ¡La policía ha llegado, señor Walton! Me levanté para ir hablar con los oficiales en un lugar mas privado, después de todo ahora si tenía que involucrarlos. Aldo ha cruzado una línea demasiado fina entre nosotros. — Buenas tardes, señor Walton —me dice el primer hombre— Mi nombre es Samael Smith y el es mi compañero Kiam. Nos informó nuestro jefe que tiene un asunto demasiado privado, así que aquí estamos para escucharlo, señor Walton. — Tomen asiento, por favor —pedí— El asunto aquí es fraude en primer lugar —les muestro una carpeta donde evidencio todo lo que tengo hasta ahora de mi hermano— Aldo Walton es mi hermano, murió hace unos años, creo que todos recuerdan aún ese accidente. — Claro, usted fue el sobreviviente, señor Walton —responde Samael— Hubo una investigación en aquel entonces buscando un responsable, pero
Narrador— ¿árabes? Yo jamás he tenido algo que ver con un árabe— Si, en esa fiesta estuviste envuelta con uno, lo recuerdo bien. A lo mejor no te acuerdas, pero yo sí. Ambos estaban hasta el tope de alcohol, me impresiona que no se hayan enfermado de tanto que tomaron esa noche —siguió RebecaMaya intentó recordar, pero no pudo. Los recuerdos de esa noche son como un gran vacío. Los recuerdos de la mañana siguiente son como un borrador.— Eso ni yo lo sabía —informó Claire.— Es que te juro que no tengo ningún tipo de recuerdo de esa noche —comienza a reír— Si es verdad, fue la única noche que estuve con uno así.— Por cierto, Claire, quiero salir para ir a una plaza comercial. Quiero comprarme algunas cosas y otras de un regalo que estoy preparando —dijo Rebeca— Está bien, vayan juntas. Me quedo con Gina, tú no has salido, Rebeca. Y así te distraes de toda esta situación, Maya. Así que vayan las dos.Las chicas aceptaron, así que solo tardaron una hora en estar listas. Cuando sali
Punto de vista de Maya — ¿Qué es lo que buscas? ¿Qué es lo que quieres? —digo, estoy harta de este tipo. Además de que estoy harta de tener que controlarme porque muero por él.— A ti, Maya —me responde— ¿Vamos a tomar algo? Te vas a ir pronto, de todas formas. Puedo controlarte a ti, pero no puedo controlar a James. Supongo que esa noticia ya te ha llegado.— Deberían hablar —nos dijo Rebeca. La miré con una mirada de “¿Estás loca, amiga?” — Puede que sea la última vez que se vean, ambos se atraen. Es bastante obvio, es como si estuviera viendo a James y Claire cuando se conocieron, ustedes lucen igual.— ¿Estás loca, Rebeca? ¿Qué te pasa? Nuestro James era un hombre soltero, no puedes compararlo con este hombre que está casado con dos mujeres ahora.— Solo van a hablar, Maya. No exageres —responde Rebeca— Decide, si no para seguir haciendo compras.Mire de nuevo a Assim, que, por su sonrisa, sé que la actitud de Rebeca ha sido de su agrado. Por un momento pienso que también la va a
Narrador. — Tenemos que irnos ahora —Maya tomó la mano de Rebeca.Rebeca se sorprendió, pues ella estaba parada en una tienda viendo algunas prendas. Maya comenzó a caminar llevando a su amiga casi a la fuerza. Eso atrajo la atención de algunas cuantas personas.— ¿Qué te pasa? —pregunta Rebeca queriendo entender todo — ¿Te hizo algo? Dímelo y regreso a partirle por lo menos un dedo de la mano que mas use.— Por dios, Rebeca, no —Maya se detiene en seco — Te cuento en el hotel, pero ahora vámonos por favor. Quiero estar con Claire y contigo, las necesito a las dos.Rebeca entendió que debían irse de inmediato, así que solo siguió a su amiga. Maya se notaba diferente, pero su cabeza está dando mil vueltas.En el hotel, James justo cuando había llegado, tuvo que irse. Estos días estará tan ocupado, por todos los contratos que debe terminar antes de tiempo. Así que, en la suite principal, solo está Gina, Claire, Klaus y sus hermanos.Cuando se escucha un sonido, Claire piensa que James