Regreso a la villa de los Li, a mi casa, con una sensación que me perturba. Estoy decepcionado de mí, sobre todo porque sé que Ala está confundida y aun su mente no corresponde a su edad. Sin embargo, fue como tener a Kiara de nuevo frente a mí. Aunque una mucho más joven y atrevida. Aun así, debo mantenerme lejos de ella. Por lo que acepto la invitación a varias fiestas en el extranjero donde estaré haciendo negocios.Lucio viene conmigo, no dejaré al pequeño solo con Tania. Ella necesita ocuparse de su vida, me ha ayudado demasiado durante este tiempo. Nunca pensé que la falta de mi padre la afectara tanto, ya que aún es joven y podría estar con alguien más si lo deseara. Muchos hombres en la organización la pretenden en secreto, porque por respeto a mi padre ninguno se atrevería a acercarse demasiado a ella sin su consentimiento y mi autorización.—Me alegro de que al fin vayas a ocupar tu sitio en la organización —me dice mi cuñado.—Quería hablarte sobre algo —digo mientras recoj
—Señor Li, sé que podría asesinarme si lo deseara, incluso hacer que desaparezca. Aun así, es una de las cosas que me gustan de usted. Aunque me grite como recién, mi cuerpo me obliga a estar cerca de usted —dice y se cuelga de mí.Estoy por apartarle los brazos cuando me besa y siento cómo me estremezco. Maldición, ella es capaz de doblegarme. Su lengua y la mía se masajean, quiero devorarla, quiero hacerla mía…—Apártate —pido con la poca fuerza de voluntad que tengo.Ella no es Kiara…No lo es…Nunca lo será…Debo repetirme eso una y otra vez para poder controlarme.—Usted también lo siente… —me reclama ella.—Solo porque te pareces a ella —espeto.—No me importa, úseme si lo desea —dice y vuelve a besarme.Mientras nuestros labios se encuentran, una oleada de confusión me envuelve. Cada fibra de mi ser reconoce la textura, el sabor y el calor familiar de esos besos; mi mente se aferra desesperadamente a la idea de que es Kiara quien está en mis brazos. Sin embargo, una punzada en
Después de una semana recorriendo el mundo con Lucio a mi lado, Tania me llama. Quiere que lo lleve de vuelta, lo extraña mucho. Sonrío al escucharla. Sé que es así, por lo que tras dejar la última reunión llevo a mi hijo nuevamente a la villa de los Li. Ella nos recibe en la puerta y abraza a mi hijo con fuerza. —Al fin volviste, la abuela te extrañaba —le dice y mi pequeño le asegura que pasará la próxima semana con ella. Es muy dulce y todos lo notamos. —Debo irme, no quise mandar a Lucio con otra persona, pero tengo un compromiso en Alemania —indico y ella me da las gracias por haber traído al pequeño—. ¿Cómo están los demás? —Están en exámenes, así que solo vienen para descansar. ¿Recuerdas cuando tú hacías eso? Ha pasado mucho tiempo —dice sonriendo mientras arrugas suaves, se marcan en su rostro. —Debo irme, avísame si encuentras una candidata —le indico antes de subir al coche. —¿Estás seguro de que no quieres…? —dice sin acabar la pregunta. —Cualquiera menos ella —
Estoy molesto con Ala, ella no quiere decirme porque está haciendo esta estupidez, y se ha puesto en riesgo. Por lo que vuelvo a insistir, incluso la amenazo con llamar a su padre como si fuera una adolescente,—No puede decirle a nadie —me dice casi ordenándome—. Tengo un amigo en problemas y necesita una cirugía.—¿Por qué ocultas la razón a tu familia? —le pregunto confundido.—No todos los que estuvimos dentro de esa máquina somos hijos de grandes empresarios —espeta, se parece más a Kiara cuando habla así—. Él no tiene a nadie y está muy enfermo. Si le pedía dinero a mi padre lo buscarían y lo lastimarían y no tiene la culpa de que Sergey lo usara para sus perturbadores planes. Es demasiado joven para saber en lo que se metía.—No comprendo nada de lo que me dices —reclamo con gesto de impaciencia.—Sergey a veces nos sacaba de las máquinas. Algunos solo podíamos ver lo que hacía, mientras que otros debían ayudarlo. Mi amigo, desde que es pequeño, ayuda a Sergey. Cuando la explos
Regreso a la villa de los Li, y le pido a Hanna que venga cuando pueda. Mientras reviso los documentos que tenemos sobre las investigaciones de ese maldito de Sergey. Creo que ya sé por qué le gusto a Ala, ella en realidad no estuvo tanto tiempo dormida.—Parece que sí, algo de la conciencia de Kiara se transfirió a la de Ala —me dice Hanna y maldigo—. ¿Cómo te diste cuenta?—Ella me besó de la misma manera en la que lo hacía Kiara —digo de pie, molesto y preocupado.—Pero revisamos su mente, no había nada ahí —indica Emma.—Él encontró la manera de esconder los recuerdos, tal vez no los implanta por completo, sino que da una sensación o una necesidad —explica Nino—. No recuerdo todo lo de mi vida pasada, pero algunas cosas en mi cabeza se sentían más fuertes, no sé bien cómo explicarlo. Debió hacerle algo así a Ala.—Maldición, ¿cuándo dejará de jodernos la vida ese maldito? —reclamo enojado.—Li, lo importante es asegurarnos de que Ala esté bien, si Sergey implantó un recuerdo que n
—¿Qué es lo que ocurre? —pregunto al ver al hombre frente a mí, es idéntico a mi padre cuando era joven.Necesito tomarme un momento para pensar con calma. Todo lo que está ocurriendo me desborda. Mi padre está muerto, no tiene treinta años. Sin embargo, no soy el único que se sorprende. Tania comienza a llorar cuando lo ve. Fernando la abraza y la sostiene, mientras que todos los presentes se van dando vuelta para ver a Ala y a su amigo.—No lo sabía —dice ella avergonzada—. No hasta que vi fotografías de su padre. Lo siento, Señor Li, por no comprenderlo antes.Es cierto, Sergey jugó con todos nosotros. ¿Por qué no lo haría con mi padre? Esperó a que él estuviera vulnerable para hacerlo. Sin embargo, esto ha llegado a su fin. Ya no más, no soportaré que Sergey siga delante nuestro por más tiempo.—¿Qué tanto recuerdas? —le pregunto al hombre frente a mí, sin dar vueltas.—No mucho… —dice, y mira a Tania que sigue en brazos de Fernando—. Ala me explicó que hay posibilidades de que yo
—Señor Stephen Son, puede asegurarle a su esposa y su cuñada que todos estarán bien —le digo al teléfono a George—. Por supuesto, Ala está aquí con los demás. Sí, señor. Cuidaré de ella como si fuera mi propia familia.—Li, escúchame bien —dice Andrew, el padre de Ala—. Si le pasa algo a mi hija te haré responsable.—Lo comprendo, ella está con sus hermanos en este momento. Pero tengo a todo mi personal a cargo de su seguridad. Pueden ir al cuarto de control y ver las cámaras por usted mismo si lo desea —le aseguro y el hombre suspira.—Confiamos en ti —me dice luego de eso.Es entendible que esté preocupado por su hija. Ellos querían mantener a Ala fuera de todo esto, pero ella insistió en venir hoy. No sé qué sería de mí, si perdiera a una de mis hijas por más de treinta años. Así que trato de ser comprensivo con Andrew y su esposa.—Gracias por todo… —Se escucha de fondo. Es la voz de Nick Stephen Son.Siempre ha sido el más relajado, de los cuatro dueños de empresas Stephen Son, N
«Búsqueda de la Inmortalidad»Sergey podría estar buscando la inmortalidad, pero no solo en el sentido físico de vivir para siempre. Al replicar su ADN y crear clones con fragmentos de sus recuerdos y habilidades, podría estar intentando perpetuar su conciencia y habilidades a lo largo del tiempo. De esta manera, aunque su cuerpo original eventualmente muera, su esencia, conocimientos y capacidades seguirían existiendo a través de sus clones…Durante la segunda guerra mundial la familia de Sergey debió emigrar, él junto con su hermano menor terminaron viviendo en una casa muy pequeña con uno de sus tíos, mientras que sus hermanos fueron a parar con otros parientes. El vínculo entre él y su hermano terminó volviéndolo dos seres despiadados, desde jóvenes abusaban de los animales y experimentaban con ellos a escondidas de las personas de su pueblo. Cuando ambos llegaron a cierta edad se les ocurrió que querían vivir para siempre…—¿Qué tiene que ver su infancia con nosotros? —pregunta S