El hombre se acerca a mi y me toma del antebrazo, luego me hace levantar del asiento con un brusco jalón.-¡Oye que te pasa!-Le grité confusa.El parecía no entender lo que yo le estaba diciendo por ello intensificó más su agarre hasta hacerme salir de la lujosa mansión.De un brusco empujón me tiró y caigo contra el pavimento, luego me tira las rejas en la cara cerrando de estas.Que gente tan maleducada, me imagino que eso fue lo que ordenó aquella mujer.–Desgraciados–Masculle.Me las van a pagar, ya verán, de mí nadie se burla, me levanté del piso apoyando las palmas de mis manos contra el sucio pavimento, luego sacudí mi trasero ya que quedaba arena encima de éste.Salí de la villa casi que volando, no aguanté ni un minuto más en ese apestoso lugar.Por un momento tenía ganas de gritarle sus verdades, y por otro lado me sentí abusada verbalmente, creo que las preguntas de esa mujer, eran más como prestigio. Pero bueno, lo importante es que salí sana de ese lugar.No quise llegar
Elisa se levantó de la cama y con una mirada furiosa me reta.-¿Qué es lo que quieres?-Jamás la había visto así, era otra Elisa. Se aventó a mi, mientras me reclamaba con enojo.-Sabes algo, ¡Lárgate!. ¡Lárgate de la casa!-Sus ojos se agrandaron tras escuchar mi pronta e inesperada respuesta. Si, jamás la había corrido de casa, pero creo que ya fue suficiente, no la quiero ver.-¿Y para donde me voy a ir?, ¿vas a dejar en la calle a tu hermana?– Se excusó de una manera tan deprimente.-No me importa, solo quiero que te largues de mi casa-hice énfasis en casa.Ella me miró por unos pequeños segundos y luego salió de la habitación. Sus ojos denotaban irá, y su mandíbula estaba temblorosa, creo que será lo mejor, voy a llamar a papá y le diré que Elisa ya no vivirá más conmigo.Coral.-Si no te gusta la isla, entonces cancelaré la compra y elegimos otra-Me encontraba hablando con mi hermano a las afueras de la villa, estábamos tomando aire puro mientras bebía un batido de fresa.-No es q
?Dale click para al corazón y agrega la historia para más capítulos tentadores.-Me gustas mucho nena-masculla por encima de mi cuello. Puse mis manos por encima de sus hombros y con rudeza lo empuje a la cama, con sensualidad me subi a su regazo, sentí que sus manos acarician mi trasero y luego eleve mi mirada encontrándome con esos apoteósicos ojos negros los cuales votaban chispas de lujuria.-¿Qué tanto te puede gustar una simple mujer como yo?-le preguntó al mismo tiempo que llevó mis manos hacia su cabeza.-Lo suficiente como para tenerme como un pendejo ante tus pies.Solté una risa coqueta tras escuchar su respuesta, en un principio no le creía ya que con todo lo que me contó su hermana de que a él le gustaban las mujeres de buen cuerpo y que sean actrices, por eso no le creí, pero luego de escuchar cómo su corazón latía rápidamente, ese gesto hizo despejar mis dudas, al parecer le gustó.Llevo sus manos adentro de mi cabello y me dio un breve masaje, mientras que con su boca
-Ponte en cuatro-ordenó con voz demandante.Hice caso a su petición y de inmediato me coloque en cuatro, tomé un suspiro en cuanto sentí su penetración, la cual iba entrando sin previo aviso. mis ojos se echaron para arriba y mi boca se abrió, era tan inmenso el placer que no podía describir esta sensación. Sus robustas estocadas eran tan salvajes que me aferré a las sábanas mientras mi cuerpo se balanceaba hacia adelante y atrás.-¡Ah!-Exclamó como toda una perra en calor.-Te gusta?-Cuestionó con voz entrecortada.-¡Si! ¡Me encanta!-Mis palabras hacen que sus movimientos se aceleren a tal punto de dejarme sin aliento y un pequeño dolor en mi vientre indicaba que me estaba excediendo.Descanse en cuanto Deivis se detuvo.-¡Nena, eso estuvo genial!-ruge al mismo tiempo que se derrumba en la cama, tomé la sábana y la coloque encima de mi cuerpo.Mire a Deivis quien sonreía como tonto mientras miraba para el techo.-Eres una delicia, ¡Joder!-Dijo esta vez soltando una risa.Al principi
-Me emociona el hecho de que tu hijo esté bien.-Ven aquí cariño-me hace levantar de un jalón y luego me regala un beso en la mejilla-A este paso te ganarás todo mi corazón- anuncio. Sentí que sus palabras eran verdaderas.-Y tú, te ganarás toda mi confianza-Exactamente no sé de lo que estoy hablando, cuando la palabra confianza no está en mi inepto diccionario. Yo soy mas del tipo de personas que traicionan fácilmente a otro.-Quédate conmigo esta noche, porfavor-me pide mientras me mira a los ojos.No sabía qué responder, la verdad, tendría que echar una buena mentira a mi hermano. Odio mentir, pero creo que ya eso hace parte de mi vida, sin ellas no sería quien soy y hasta donde he llegado.-Esta bien, nos quedaremos juntos por hoy-Su rostro cambió, y su sonrisa se tornó a una inmensa felicidad.Me sentía segura al lado de Deivis, lo trato como si fuéramos pareja de hace un montón de años, creo que lo amo, si, se que es demasiado pronto para decir eso.Pero él…Es el hombre más fel
-Me imagino que has vivido una vida muy dura-dijo él al mismo tiempo que servía otra copa de vino.-He sido muy valiente, sabes.-Eres una buena hermana-Mis vellos se erizaron.Tomamos como dos viejos amigos, no sé si esto sea bueno, pero vamos muy rápido.Me eché a reír y él dejó de hablar.-¿Por qué ríes?.-No, solo me acordaba de un viejo chiste-Mentí.-Eso suena bien, a ver cuéntame el chiste-Esta bien. El día de las madres un borracho mira un letrero que decía:«Se vende madre sin sentimiento».El borracho entra y dice:- ¿Cómo así que venden madres sin sentimiento? A lo que le responden: – no señor, aquí vendemos «madera sin cemento»-¿Ese es el chiste?-su rostro no expresó ni una sonrisa. Mientras yo moría a carcajadas.-Si, ¿No te gusto?.-No me gustó, me encantó-De inmediato empezó a reír sin parar.Mientras reíamos él me miró. Su mirada era penetrante.-Me haces reír mucho-Soltó un suspiro.-Bueno, ese es apenas el cinco por ciento de mi lado humorista, en realidad soy muy b
No se que está pasando realmente, ahora me entero de que él es un asesino. ¡Oh Dios mío!Mi vida no da nada bueno, primero mi familia es peligrosa y ahora él… Él también lo es.Mis ojos se empañaron, tenía tantas ganas de llorar, pareciera que todo esto fuera el mismo castigo de todas las mentiras que he dicho, ahora solo me toca averiguar quién es realmente él, porque su ex le habla acerca de enemigos ¿Vale la pena? ¿Realmente vale la pena estar al lado de él?. Y todo por la maldita vanidad. Cuando lo conocí, pensé que era algún famoso o quizá alguien importante en la industria del comercio, y ahora me entero de la realidad, ahora que lo recuerdo aquella vez en el club, muchas personas huyeron cuando lo vieron, era más bien como si hubieran visto algún fantasma.Deje el teléfono en la mesa y luego tome una bocanada de aire para relajar mi tensión, estaba muy angustiada de lo que podría enterarme si es que él realmente es de los malos.Cuando volteo veo a Deivis mientras me mira con
Llegamos a una tienda de ropa muy conocida aquí en Colombia. Kynbara.-Amor, elige todo lo que quieras-Me dice mientras saca un de sus tarjetas.Estaba entre la espada y la pared, por un lado podía aceptar todo de él, desde viajes y todo el dinero que quisiese . Pero… Por otro lado me estaba sometiendo a un inmenso túnel sin salida, ser la novia de un hombre que tenga enemigos no es fácil, conozco la mafia, soy hija del jefe de la mafia latina. Y conozco esta vida, cuando entras es difícil salir. -No puedo Deivis, no puedo aceptar nada de ti-Me miro confundido. Era como si un balde de agua fría cayera en su espalda.-Esta bien, no te regalaré nada-¿Enserio se rindió? me dió la espalda y luego se subió a su auto.-¿A dónde vas?-Cuestionó dirigiéndome al auto.-Iré a la empresa, nos vemos otro día-Sonrió y de inmediato encendió el auto.¿Qué? Esto tiene que ser broma.Se ha ido, y me ha dejado aquí.Me doy un golpe en la cabeza con la palma de mi mano.-Tonta, tonta. ¿Porque no dejaste