Juliana realmente no esperaba encontrarse con Santiago aquí.Por la noche, mientras cenaba con Emiliano en la calle de los puestos de comida, recibió un mensaje de Santiago. Le dijo que acababa de asumir el control de los Torres y estaba tan ocupado que ni siquiera tenía tiempo para comer. Juliana l
Santiago no estaba seguro de qué le pasaba. Cuando subía con Juliana en el ascensor, estaba tratando de calmarse. Después de todo, en comparación con Emiliano, a quien se le había dado la orden de salir, él era quien había sido invitado a subir y quedarse en casa de Juliana, lo cual indicaba una may
La reacción airada de Santiago dejó a Juliana atónita y la hizo reflexionar sobre sus palabras. Parecía un poco exagerado, ¿pero acaso merecía tal enfado? Ella simplemente había hablado con sinceridad.Santiago, viendo la expresión perpleja de Juliana, sintió que el fuego que ya ardía en su interior
Así que durante estos cuatro años, ella ha sido como un payaso. Frente a él, ocultaba esas pequeñas intrigas que ella consideraba inapropiadas. Pensaba que no debería tener esos sentimientos no deseados, pero en realidad, él estaba consciente de todo, actuando como si no entendiera.Juliana aclaró s
Pero esa máscara parecía estar pegada en su rostro, dejando a Juliana confundida acerca de si él estaba siendo sincero o fingía.Ella miró al hombre frente a ella con ojos perplejos, de repente sintiéndose un poco cansada.Juliana se pasó la mano por el cabello, recogiéndolo hacia atrás, y su voz ca
Juliana levantó la mirada, con preguntas en sus ojos negros.Al ver la expresión complicada en el rostro de Santiago, se tragó la comida en la boca y preguntó de nuevo: — ¿Qué pasa?Este aspecto evidenciaba que él había olvidado lo que ella dijo la noche anterior.Santiago estaba indeciso sobre si
—La situación en la empresa no es urgente.Santiago se apoyaba en la mesa, con una mano descansando sobre ella, jugando despreocupadamente con una pequeña moneda de plata. Aunque su actitud parecía indiferente, para Juliana, en el lado opuesto, claramente emanaba cierta opresión.La comida en la boc
—¿Olvidaste lo que acaba de decir?— Santiago no estaba enojado. Mantuvo su expresión habitual y su tono suave al hablar.Juliana frunció el ceño. ¿Qué dijo ella? Todas las cosas que dijo estaban relacionadas con él, ¿por qué mencionar a Emiliano?Santiago no dejó que ella se sintiera confundida por