Sin embargo, Juliana no se dio cuenta de que Santiago ni siquiera notaría la billetera, y mucho menos una pequeña nota que sobresalía de ella. Habría sido mejor dejar el papel en la mesa de café para que fuera más visible.—Lo siento, Emiliano. Fui impulsiva al salir sin decirte nada. Lamento que ha
—¿Qué es esto?Juliana ya estaba de nuevo junto al sofá, mirando el ramo de rosas champán en el cubo de basura.Ese ramo era completamente diferente al que compraron por la tarde en el camino costero, que estaba delicadamente empaquetado y era de color rojo.El ramo que compraron apenas tenía dos ro
¿Qué significaba que la persona que le regalaba flores no era Emiliano?¿No estaba él parado frente a ella ahora mismo?Ella frunció el ceño al mirar las hermosas rosas que florecían en la entrada y luego barrió su mirada hacia Santiago, quien no mostraba ninguna expresión en su rostro.Apretaba los
Los golpes en la puerta se volvían cada vez más urgentes, al igual que el tono ansioso del timbre del teléfono en la mesa de centro.Santiago tuvo que dejar el tenedor y levantarse para revisar el teléfono que sonaba sin parar.Juliana no se quedó atrás y se levantó: —Voy a abrir la puerta.—No es
Aunque Diego era el presidente de XR Entertainment, incluso si fuera una persona común, causar un retraso en el registro de otras personas en un lugar público podría generar prejuicios. En la actualidad, la opinión pública tiende a condenar primero y preguntar después. Si se trata de una figura públ
La presión del aura era demasiado fuerte; el gerente no se atrevía a expresar ninguna objeción. Después de responder a Diego, el gerente rápidamente sacó el teléfono y se volteó para llamar a su propio jefe.La noticia ya se había transmitido a Santiago a través de dos o tres personas. Sin embargo,
—¡Habla!Diego ya no tenía mucha paciencia, y mucho menos con el gerente que seguía en estado de shock.El gerente, temblando, dijo: —No fue que no la vi en todo el día... Esa señorita estuvo con... anoche y...La manera vacilante de hablar no solo hizo perder la paciencia a Diego, sino que incluso
Su estado de ánimo en este momento era muy similar al de Diego: completamente impactado e incrédulo. La ira envolvía su corazón, incapaz de creer que su hermana realmente estaría involucrada con Santiago y que aceptaría sus rosas.Él sabía que a su hermana le gustaban las rosas, y él, junto con Dieg