Boris, una vez en la mansión de Miguel, le había contado hasta el último detalle de lo que vivió los dos ultimos meses estando prisionera de Luzbeñ Arcangel bajo la tierra.
La.joven se sentía desfallecer de la desesperación, no sabía cómo eludir el destino que tenía por delante a manos de su maestro. Hasta que Gabriel haya podido volver a su cuerpo, Boris sabía que seguiría esclavizada.
La muchacha no paraba de llorar y Miguel intentaba continuamente consolara. Llegó un momento en que el pelirojo le tuvo que dar un tranquilizante, a su hermosa solcita porque estaba a punto de entrar en shock.
Boris comenzaba a sentir los efectos del calmante debido a que era muy fuerte. Miguel la abrazó con amor intenso mientras le susurraba al oído.
— Mi sol por dios creeme cuando te digo que te liberaré. Te protegeré.
— Gabriel está en mi cuerpo y...puede controlarme cuando él así lo desee. — Eres fuerte Boris y yo estoy contigo. Te amo tanto mi amorBoris y Miguel decidieron casarse en secreto al día siguente. Boris se colocó el anillo que Miguel le dió en su dedo derecho.La joven no volvió al teatro por pedido de su marido Miguel y porque ella así lo deseaba. Se había empezado a imponer a Gabriel, siendo ella quien mandaba debido a que era su cuerpo.No le interesaba saber nada del pasado de su padre ni sobre quienes fueron las que lo intentaron matar ni mucho menos queria volver a ver a Luzbel.No soportaría ser encerrada de nuevo y honestamente, no creía en la palabra de su padre. Lo encerró en su cuerpo y no lo dejaría salir mientras tenga la fuerza para hacerlo.Miguel se ocupaba de buscar la forma de entrar al sector donde Luzbel tenía al cuerpo de Gabriel. Ésto se debía a que pudo descubrir cómo hacer para liberar a su amada esposa de Gabriel.El espiritu de Gabriel castigaba a Boris continuamente provocandole dolores físicos y moratones en sus brazos y torax. Pero la joven much
El regreso de Gabriel, no solo al teatro sino a la vida de Luzbel, dejó impactados a todos los que ahí trabajaban.El rubio entró a ese lugar donde tantas emociones sintió, lugar de sus triunfos y fracasos, sitio donde conoció y vivió el amor y también donde fue traicionado sufriendo el peor de los ataques.Ahora Gabriel no era el dulce muchacho del pasado. Su único deseo era venganza, destruirlos a todos. Sin piedad alguna. Y quedarse con su amado esposo y su hija para siempre. No cedería jamás.Antes de llegar, Luzbel le dijo quienes seguían trabajando en el teatro, gente que lo conocía y de alguna forma tuvieron algo que ver con su mala experiencia. Gabriel reocrdaba cómo sufría el desprecio de sus compañeros y personal que trabajaba ahí.Ya sea porque era el dueño del amor del popular de Luzbel, el joven más hermoso del teatro y más codiciado por todas. Ya sea por el talento que poseía para la música.Lo cierto era que la envidia ll
Gabriel fue descubriendo a todos y cada uno de quienes conspiraron para su destrucción y por supuesto, los eliminó.Los iba induciendo al suicidio, volviéndolos ansiosos y en extremo nerviosos. Así fue vengándose de cada uno de ellos.Transcurrieron dos meses, en los cuales ni Gabriel ni Luzbel fueron a ver a Boris y Miguel debido a las ocupaciones que tenían.Gabriel se había vuelto alguien de sangre fría, con el único sentimiento de amor hacia su esposo. El emo también se había vuelto frío y cruel, al punto de no importarle que Boris y su pareja permanezcan encerrados para siempre bajo tierra.El placer que el rubio sentía con cada muerte de quienes trabajaban cuando él era adolescente aún y lo odiaban no podía describirlo con palabras.Su venganza era en extremo dulce, en especial porque nadie sospechaba de él ni de su amado emo. Siempre ellos tenían uma coartada firme y sustentable.Así fue hasta que descubrieron a quién ideó
Boris fue despertando poco a poco sintiéndose morir, los recuerdos sobre lo vivido reciéntemente la despedazaban.No quería despertar, no soportaba saber que su amada luna ya no se encontraba a su lado ni en éste mundo.Deseaba seguir durmiendo, seguir inconciente, ya que en el mundo de los sueños era el único lugar donde aún podía seguir viendo y estando junto a su amada luna.Su gran amor.Pero lamentablemente iba despertando. La luz de día penetró sus capas de sueños logrando así que Boris abra los ojos.Lo primero que vió fue a su padre, de espaldas a ella contemplando el jardín por la ventana. Las lágrimas humedecieron su rostro, aún se sentía mareado por la droga que le hubo inyectado Luzbel.— ¿Ya despertaste hija? En horabuena — la voz fría y dura de Gabriel le provocó escalosfríos.Gabriel volteó y le clavó la mirada a su pálida y deprimida hija quien desvió la mirada hacia el otro lado.— Mataste
"Sedúceme sin piedad, quebranta ley fuerte. Siempre dije que nada es eterno, nunca podrás decir jamás.Y ahora dime que sin mí llora la noche a tu lado. Jura amte mi, dime que nadie es más que yo.Fuego al corazón, arden los sentimientos. Muy suavemente tu vida romperá con el pasado.Dime que sin mi llora la noche a tu lado, jura ante mí y dime que nadie es más que yo".Gabriel interpretaba en el salón privado aquella canción que Luzbel le hubo compuesto tiempo atrás. En verdad el rubio se sentía brillar cada vez que la cantaba. Nunca antes la había interpretado en vivo, ya que solo era suya.Luzbel tocaba el organo logrando que la melodía los envuelva a ambos consiguiendo que Gabriel se mueva con magistral sensualidad, mientras su voz resonaba con pasión.Al concluir la canción, Luzbel se avalanzó a
La gente aguardaba la salida de Boris, la gran estrella del pop del estudio de radio de la ciudad donde fue entrevistada llegando así a muchisimos fans.Cuando la jóven salió junto con Luzbel y sus guardaespaldas, el grito de las fans fue total. Empujaban con locura total para lograr llegar a la muchacha con alocada pasión.Boris llegó hasta su limousina donde subió junto con Luzbel. Los flash de las fotos se sucedían de forma continua. Una vez dentro la limousina se puso en marcha y se alejó del lugar.Dentro Boris respiró hondo, la jóven no sonreía nunca por voluntad propia. Si lo hacía era para interpretar un personaje o una canción.Luzbel abrazó a Gabriel mientras respiraba aliviado al sentirlo entre sus brazos. No le gustaba permanecer mucho tiempo lejos de su dorado esposo.Boris miraba por la ventana con la mente en blanco total. Estaba agotada, ya que había trabajado mucho ultimamente.Llegaron al estadio donde estaba repleto de fan
Santy había ido a la mansión donde sabía que se encontraba Boris. La estrella estaba sola, eso también lo sabía.Toda la servidumbre dormía profundamente, el guardián de Boris no obstante seguia despierto pero Santy supo neutralizarlo tomándolo por sorpresa. Le inyectó un sedante poderoso dejándolo dormido.Luego entró a la habitación de Boris quien dormía profundamente. Santy la sujetó despertándola bruscamente. Por más que la jóven forcejeó, no logró nada ya que su captor era muy fuerte.Fue arrastrada afuera y por más que intentaba soltarse, Boris no lo logró ya que había sido muy bien amarrada. Fue llevada a un oscuro auto para desaparecer en medio de la noche.Santy dejó las puertas abiertas de la mansión y a la servidumbre dormida por un sedante. Sabía dónde
Boris estaba en la fila, aquella fría mañana de invierno. Esperaba su turno para el casting que la ópera de la ciudad hacía. Necesitaba el trabajo o acabaría en las calles literalmente hablando, debido a que estaba en banca rota total.El frío calaba sus huesos entumeciéndolo al completo. Pocas eran las veces en que la ópera hacía un casting para buscar artistas. Esa era su oportunidad y esperaba tener éxito.Al menos con un personaje secundario aunque más no sea, sabía que lo importante era entrar. Lo demás vendría solo.Las horas pasaban y la fila iba avanzando lentamente. Podía ver la desesperación en todos los que aspiraban a entrar para formar parte del elenco principal del teatro.Eran días duros, momentos de intensa crísis económica, por ende todos estaban necesitados. Esto hacía que haya muchísima más competencia. Suspiró profundamente.El ruido era casi enloquecedor debido a las prácti