47. Una visita inesperada

— ¿Quiere decir que el cuerpo que estaba en el lugar del accidente no era el de mi prometida?

— No, la verdad estoy tan sorprendido como usted, tanto que lo hice analizar de nuevo y no, no coincide la muestra de tejido de la mujer fallecida con las muestras de su esposa.

— Es decir, que también está desaparecida o le ocurrió algo que le ha impedido regresar.

— No podemos descartar ninguna opción, su desaparición puede estar ligada a un simple secuestro, tráfico de órganos o a la mafia de trata de personas a la que pertenecía su padrastro.

— Siento que cada vez que nos acercamos a algo, ocurre algo nuevo y todo lo que avanzamos debemos reiniciarlo.

— No se desespere, iremos detrás de algunos miembros que nos puedan dar información, estoy seguro de que pronto tendremos una pista.

Arin volvió a casa, necesitaba un respiro, ocuparse del trabajo y también de su hermana, quien en ese momento en que llegaba sostenía una calurosa discusión con su madre.

— Quiero ir, no veo cuál es el problema
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