《¿Qué terminemos con todo? ¿Se ha vuelto loca? ¿Acaso no sabe que sin ella me cuesta respirar?》El tono serio de su voz me asusta, yo no puedo permitir que se aleje de mi lado… no con todo lo que yo la amo. Estamos a punto de casarnos, esperando dos hijos... no, no se puede ir, no me puede dejar.
—Tú no me puedes dejar.— Le digo mirándola fijamente a los ojos y luego la beso queriendo atraparla para que no se marche de mi lado.
—Es lo mejor...— Me dice en casi lo que es un susurro entre beso y beso.
—No, lo mejor es que tú y mis hijos permanezcan a mi lado.— La beso —Que te cases conmigo— Digo y vuelvo a besarla —Que sigamos juntos por siempre.— Nuevamente la beso y está vez no separo mis labios de los suyos.
Puedo sentir el sabor salado de sus lágrimas mientras nos besamos y solo quiero quitárselas una a una. Subo con mi
[BAUTISTA]Su boca y la mía es la mejor combinación para aliviar el dolor, mis manos colándose por debajo de su camisa intentan ser su medicina para olvidar el mal momento que hemos pasado recién, mi cuerpo rozándose con el suyo buscan ser ese bálsamo donde podamos encontrar paz. Busco hacer una poesía en su cuerpo, una donde pueda dejarle saber todo lo que ella significa en mi vida y lo que pasaría si no estuviera a mi lado.No me importa si ella o el mundo cree que no es buena para mí, no me importan los problemas, no me importa arriesgar mi vida si es que mi premio es una vida entera a su lado. Es la única mujer que he conocido en mi vida que me ha hecho completamente feliz, la única con la que le he encontrado un sentido a mi vida, a los sueños que tengo... Ella es mi musa, mi refugio, mi todo....Su ser no solo me ilumina por ser ella, pero también por que dentro de e
[Bautista]Después de que nuestras pieles aliviaran todo el dolor que quería surgir entre los dos, hemos logrado volver a la normalidad de este mundo que nos obliga a ser responsables. Llevamos horas y horas en el estudio corrigiendo escenas e ideando otras, y armando una agenda para las próximas grabaciones. Creo que hemos logrado mucho el día de hoy, dentro de nada podremos ir a las escenas de exteriores. La observo muy concentrada en la computadora, pero no hace nada, solo está ahí como pensando en la nada.Dejo la laptop a un costado y me acerco a ella —Cariño, ¿te encuentras bien?— Le pregunto colocando mis manos sobre sus hombros.Al parecer la he asustado porque su cuerpo reacciona un poco extraño ante mi tacto —¡Me has asustado!— Me dice volteándose para mirarme.—Me di cuenta, pero ¿Qué sucede?— Cuestiono
133. Conociendo a DelfinaEntro al hospital en busca de mi padre para felicitarlo por el nacimiento de mi hermanita, y era claro que no llegaría a tiempo, pero quería estar aquí con él. —Cariño, camina más despacio que no quiero que te lastimes.— Me pide Bautista al verme tan ansiosa.—Vale...— Le digo y desacelero el paso. —¿Mejor?— Le pregunto entre risas.—Si, es por tu bien, por el de nuestros hijos...— Me aclara.Sé muy bien porque lo hace, pero lo que él no entiende es que siempre quise una hermana. Está bien, ha llegado un poco tarde... mucho diría yo, pero la emoción no ha cambiado. —Lo sé amor...— Le respondo mientras seguimos caminando el inter
Unas semanas despuésEstos últimos días han sido los más emocionantes y los más estresantes de mi vida. La preparación de la boda, los preparativos para viajar a Miami y hacer todos los arreglos para la pelicula y los chequeos con el ginecólogo; que aún no puede saber si tendremos dos niños o niñas. Pasado mañana es la boda y aquí estoy haciendo la última prueba del vestido para que la modista lo ajuste según va creciendo mi pansa.Mientras ella hace su trabajo, solo puedo mirarme al espejo e intentar reconocer a la mujer que está enfrente de mí; una que está feliz y plena junto al hombre que le ha enseñado absolutamente todo del amor. Miro mi aun pequeña pansa de embarazada y todavía me emociono cuando pienso que seré madre de dos criaturas. Ya ese miedo que sentía por esta noticia se ha disipado, pe
Llego a la habitación para cambiarme tal como me ha pedido él, y al entrar me sorprendo al ver un vestido color negro sobre la cama junto a una rosa color blanca y una nota que dice que baje a la sala cuando este lista 《¿otra vez? Parece que a mi prometido le encanta regalarme vestidos》 Pienso y lo miro detenidamente, es precioso; es largo, con un escote bien pronunciado, y para mi sorpresa es para embarazadas, ha pensado en absolutamente todo y eso que aun no se me nota tanto…Después de haberme duchado, me coloco el vestido, me peino y me maquillo, y una vez que estoy lista tomo mi bolso y bajo a la sala tal como lo ha pedido él. Bajo uno a uno los escalones con mucho cuidado y al llegar a la sala me lo encuentro a él vestido en un esmoquin que le queda desquiciadamente perfecto. —Pero ¡qué guapo que te ves!— Digo sonriéndole —¿No me digas que has cambiado la fecha de la boda?&mdas
Dos días despuésSi tuviera que decir cuál es el día que más nervios he sentido en mi vida, creo que sería este. Me tiemblan las piernas mientras que la maquillista termina de arreglarme. Estoy sorprendida que el barniz de uñas haya quedado bien porque cuando la manicura estaba pintándomelas, mis manos no dejaban de temblar.—Abril, ya está.— Me dice Roxy para que me mire una última vez al espejo.—¡Me encanta como ha quedado!— Digo al ver esas sombras que hacen que mis ojos resalten de una manera única.—¿Se puede?— Pregunta mi madre entrando desde la otra habitación de la suite del hotel donde estoy arreglándome.—Si madre, debes ayudarme con el vestido.— Le pido.—¿Puedo ayudarte también?— Me cuestiona Carolina entrando también.—&i
[BAUTISTA]He esperado tanto este momento, inconscientemente desde aquel día que la vi por primera vez estaba imaginándome esto; ella caminando de blanco hacia mí. Luce tan perfecta, toda ella lo es, pero con ese precioso vestido que ha elegido me deja sin aliento. La marcha nupcial suena de fondo, eso lo sé, pero para mí todo está en silencio, solo puedo verla y sentir la manera que retumba mi corazón. Cada paso que da hacia mí es uno menos que nos separa de la felicidad absoluta. Leandro estrecha mi mano al llegar al altar junto a la mujer de mis sueños, y me lanza una cómplice sonrisa —Bautista, te entrego a mi hija para que la cuides y la ames como yo sé que lo haces.— Me dice y luego une la mano de Abril con la mía.—Gracias Leandro, te prometo que la cuidare, que la amare, y que la hare la mujer más feliz del planeta.— Le aseguro sabiendo a gran resp
Si alguien me hubiese dicho que se podía ser tan feliz en está vida, no le hubiera creído. Para mí todo era tan oscuro, tan doloroso, pero de pronto todo se ilumino con su llegada. Sus labios borraron todos los rastros de dolor que había en mi vida, sus manos dibujaron un nuevo destino y su sonrisa, me hizo conocer lo más bonito de esta vida; el amor. Ahora ya es mi esposo, es el padre de mis hijos, y nada más ni nada menos que el amor de mi vida.Siento como su mano aprieta la mía mientras me mira con devoción, antes de entrar al salón de fiestas donde todos nos esperan para celebrar este día tan especial con nosotros. —Señora De Rosi, ¿Está bien?— Me pregunta y debo admitir que me encanta cuando me llama así.—Si señor De Rosi, solo pensaba en lo feliz que soy.— Le respondo llamándolo de la misma manera.—Ahora s&