Conocer a Garrison había sido la mayor bendición de su vida. Ella se había topado con una joya preciosa. De ahora en adelante y por el resto de su vida, se aferraría a esta joya, lo amaría de todo corazón, lo cuidaría y nunca más lo haría sentir triste.

“Tiria, iba a ocultarte la verdad porque no quería ser una carga para ti. Quería mentirte y decirte que no te violaron en absoluto. ¡Nunca pensé que mi papá arruinaría mis planes!”.

Garrison suspiró.

“Bueno, como ya te enteraste, supongo que debería decirte la verdad. Tiria, no fuiste violada por dos hombres. Solo un hombre te violó. Con suerte, eso te hará sentir mejor”.

Los labios de Sotiria temblaron.

Las caras de los dos hombres feos aparecieron en su mente una vez más.

¿Los dos hombres le hicieron eso, o solo había sido uno de ellos? ¡No hacía ninguna diferencia para ella!

“Obtuve las grabaciones de vigilancia del baño y me di cuenta de que esos dos hombres se fueron después de que Zachary entrara al baño y te violara. Los d