La mirada de Zachary era la cosa más fría que jamás había visto, pero en este momento, había una dulzura predominante en sus ojos helados.

Ella no sabía que un hombre con un corazón de piedra como él era capaz de tanta dulzura. Estaba tan cautivada por él que quería abandonarlo todo e irse con él.

“Deja a Garrison, conviértete en mi esposa. Te aseguro que te cuidaré mucho”. Zachary era el hombre más majestuoso de Rothesay, pero ahora su mano estaba temblando.

“¡Carlie, prométemelo! ¿¡Está bien!?”.

Las cejas de Sotiria se torcieron.

Sotiria volvió a la realidad en el momento en que escuchó el nombre “Carlie”. Era como si le hubieran echado un balde de agua sobre la cabeza.

“¡Carlie! ¡Ja! Tal como dije, ¡realmente me tratas como a tu Carlie!”.

Sotiria reunió cada gramo de fuerza en su cuerpo y apartó las manos de Zachary. Sus ojos estaban llenos de dolor, pero había una sonrisa tirando de la comisura de sus labios.

“Me parece que tienes un tornillo flojo, Señor Connor. Entonces d