Charlotte compró un anticonceptivo de emergencia en la farmacia. Tragarla se sintió como ingerir una pastilla venenosa. Se sintió profundamente incómoda.

¡Bip!

Había recibido un mensaje de WhatsApp. ¿Acaso era de Zachary?

"Disculpe, señorita. Está en el camino. ¿Podría hacerse a un lado, por favor?”.

Escuchó una voz masculina desde atrás. ¿Zachary?

Sintió que una figura alta pasaba junto a ella. Podría ser…

‘¡Zachary! ¿Por qué no puedo dejar de pensar en ese b*stardo, sin importar a dónde vaya?’.

“Carlie”.

"Carlie…”.

"¡Carlie!".

Finalmente, se dio cuenta de que alguien la había estado llamando cuando el hombre alto se paró frente a ella.

Se detuvo rápidamente y apresuradamente ocultó el dolor en sus ojos, luego levantó el borde de sus labios con arrogancia.

"¿No te han dicho que es de mala educación interponerse en el camino de la gente?".

“Carlie, estoy aquí por pura buena voluntad. Deja de ser tan fría conmigo". El hombre apuesto y de aspecto gentil no solo no estaba eno