—No estoy seguro, sé que tienen sus propios problemas también, pero estoy consciente que nosotros solos no podremos, debemos averiguar a qué nos estamos enfrentando.—¿Qué clase de cambia formas crees que nos estaríamos enfrentando?—Por la zona en la que están, muy seguramente sean conejos, como el señor Donel y muy seguramente kitsunes.El jefe Donel carraspea con fuerza la garganta, llamando nuestra atención, ambos volteamos a verlos un poco confundidos por su reacción, noto en su rostro que está algo incómodo y sospecho porque les han dicho conejos.—Somos Delaras, alfa Reese... no “conejos”El alfa se ríe de una forma un tanto sexy, al menos desde mi perspectiva y niega suavemente con la cabeza, mira a los ojos al jefe dedicándole media sonrisa algo sarcástica.—Jefe Donel... le seré honesto de una vez por todas— Se incorpora y se cruza de brazos, todavía tiene esa sonrisa en el rostro. —Me importa muy poco el nombre de sus razas, ni siquiera llamo a los míos con su nombre de Gai
Avanzamos con los exploradores; mirando mejor a los conejos, me causan mucha curiosidad al igual que los hombres gato y los hombres oso. Giro mi cabeza para ver a mi esposo y sospecho que en mi rostro se debe notar que la curiosidad me come por dentro.—Donny, se muy poco sobre ellos, pero te puedo asegurar que corren como si no hubiera un mañana, es difícil alcanzarlos.—Ohh... Me pregunto ¿Cómo será su forma humanoide?Ambos nos quedamos pensando por un largo rato y luego posamos nuestros ojos en ellos, al sentir nuestras miradas nos voltean a ver un poco incómodos, pero me causan demasiada curiosidad. Cuando volvamos de la exploración, voy a hablar con ellos.Después de que todos nos hemos separado, miro hacia el frente y veo que todo está marchito, si antes pensaba que en la aldea del señor Russel el ambiente era escalofriante y triste, en este caso no sólo siento eso, sino una fuerte aura de muerte, todos los vellos de mi cuerpo están erizados. Por lo que tengo entendido, debemos
Estando en la sala de reuniones, noto en los rostros de los exploradores la desesperanza, están demasiado pálidos y muchos de ellos tienen los labios agrietados, en sus ojos parece que se les ha esfumado la vida. Trago saliva con dificultad y regreso la vista al frente, buscando alguna clase de consuelo en mi esposo, pero sabe bien que nosotros estamos igual que ellos.—Alfa... las cosas están muy mal.—También en nuestra zona, la oscuridad ha avanzado muy rápido desde el norte.—Vi algunas aldeas, pero estas ya han sido arrasadas y saqueadas... no queda nadie.—Hemos descubierto muchos cuerpos tanto de cambia formas como de humanos.Todos se ponen a hablar, haciendo imposible que se les pueda entender, la situación se empieza a salir de control cuando alguien se pone a gritar que estamos condenados a ser corrompidos, desatando la locura dentro de la sala. Ante tal desastre, Reese suelta un fuerte rugido, uno bastante poderoso, haciendo que todos se callen al instante.—Madre Gaia....
—Yo estoy con el cachorro, a este paso todos nos terminaremos muriendo.Hay veces que me dan ganas de golpear con todas mis fuerzas a Rowan, pero en este caso me impresiona que diga abiertamente que está de parte de mi esposo y me alegra mucho que lo haga, ya que su rivalidad es bien conocida. Todos los presentes se siguen quedando callados por un rato hasta que uno a uno empiezan a asentir con la cabeza, para al final vociferar que ya va siendo hora de plantarle cara a la oscuridad.Duncan todavía no se ve muy convencido, pero acepta seguir adelante con todo esto y me alegra mucho, ya que experiencia nos vendría muy bien, sería una verdadera lástima que su talento se desperdiciará cuidando la aldea, me siento más tranquila sabiendo que estará con nosotros, sólo espero que no nos traicione como lo hizo Rica.Reese despide a todos menos a Duncan; parece ser que él tuvo los mismos pensamientos que yo. Nosotros cuatro somos los únicos que quedan en la habitación, la tensión se puede cort
—No lo suficiente, todavía me falta mucho por mejorar— Contemplo el cielo por un largo rato, sentir la brisa refrescante en mi rostro me relaja bastante. —Es por eso que me esfuerzo mucho, quiero mejorar cuanto antes.—Sí, Reese nos ha contado lo ocurrido y lo que piensan hacer— Se queda callado por un largo rato.Su silencio me deja consternada, así que volteo a verlo, pero Dumart me toma de los hombros repentinamente y los aprieta con algo de fuerza, puedo sentir como tiembla, no se si sea de coraje o miedo.—Donna, es una locura.—Lo sabemos, pero tampoco podemos quedarnos de brazos cruzados— Pongo mis manos sobre las suyas y las aparto lentamente. —Sabemos que es una misión suicida, es por eso que no los hemos involucrado.—Tonterías— Exclama entre dientes. —Si necesitan mi ayuda, pueden pedírmela... no quiero que te pongas en riesgo de forma innecesaria.—Dumart— Susurro su nombre con suavidad. —Creí que las cosas habían quedado claras— Me levanto del suelo seguida de él. —Agrade
Abro los ojos de par en par y una pequeña carcajada se me escapa, él al ver mi reacción frunce el ceño, quedándose parado esperando alguna clase de explicación. Ahora yo soy la que esta confundida.—Soy yo... — Le contesto sin dejar de reírme.Toda esta situación se me hace surreal, ¿Cómo es posible que no me reconozca? Me ha visto miles de veces, sigo siendo la misma y lo comprobé cuando me fui al baño a arreglarme y me miré al espejo.Él se acerca a mí, todavía con una expresión de confusión dibujada en el rostro. Al estar unos metros de distancia, sus ojos se abren de par en par y roza mi mejilla derecha con las yemas de sus dedos.—¿Qué te ha pasado?—Nada.Confundida, giro la cabeza hacia mi abuela buscando alguna respuesta, en su lugar, ella me entrega un espejo y me lo entrega. Esto hace que me sienta aún más confundida que hace unos momentos, pero aun así decido observarme para saber que está ocurriendo.De la sorpresa, el espejo se me cae al suelo y este se agrieta un poco, a
Llegamos hasta un pequeño asentamiento, destruido y lleno de escombros por todas partes, un pequeño suspiro se me escapa al ver tan triste escena, todos buscamos un lugar en donde quedarnos y nos preparamos para descansar un rato; durante mis entrenamientos, mi abuela me ha enseñado a cómo crear un campo de energía que nos protegerá de los intrusos.Llegamos bastante tiempo andando por los Paramos Oscuros y no hemos encontrado señales de vida, noto en el resto del equipo que están perdiendo la fe en encontrar a alguien, aunque sean humanos. Miro de reojo a mi esposo y él a mí, Reese niega suavemente con la cabeza y sigue caminando.—Que mierda de ánimos— Me susurra Rowan molesto y harto. —Como si fuera la primera vez que ven algo así, me caga que con cualquier cosa se desanimen— Expresa sus palabras con fuerza y desdén.—Es fácil para ti decirlo, tú eres uno de ellos— Rica lo mira por encima de su hombro, con el ceño fruncido. —Nosotros no.—Mira nena, mejor cierra la boca que tu esta
—¿Existen? Creí que eran un simple mito o algo por el estilo.—Pues... no— Me encojo un poco de hombros. —Soy una hibrida.—Antes de empezar con mi interrogatorio sobre los tuyos, quiero saber... ¿Qué hacen aquí? Puedo notar que ustedes no son de esta zona.—Hemos venido a buscar supervivientes.—¡Gaia los bendiga! — La voz de una mujer algo mayor se escucha al interior del recinto.—¿Por qué? Digo... no quiero sonar mal agradecida ni nada, sino todo lo contrario, su llegada nos ha salvado el pellejo, pero... es extraño que un grupo salido de la nada hayan decidido buscar personas por estos lares.—Venimos de Avalos— Le responde mi esposo en un tono bastante frío y serio. —Hasta hace poco nos enteramos del estado que tiene el norte y decidimos hacer algo para ayudar.—¿Avalos? ¿No había caído la gran ciudad hace muchos años atrás? Creí que el clan Los hijos de Fenrir la habían dado por perdida para siempre.—Si y no, mi padre quería recuperar la ciudad desde hace tiempo, pero no contá