Narra AlessandraSeguimos por ese pasillo hasta el fondo, cuando llegamos ahí asomamos la cabeza para ver si había alguien. Cuatro hombres. Están un poco lejos, así que si doblamos para matarlos, nos verán mucho antes y gritarán, toda la mansión se enterará y de nada serviría lo que estoy haciendo. Ellos le ponen silenciador a las armas. ¿Los tenía escondidos en el culo o cómo? Por qué no los vi. Saco dos shuriken y se los lanzó a la frente de dos, caen cómo saco de papa al suelo, seguido de los otros dos con una bala en la frente. Hui: ¿Quieres ser mi amiga? O ¿La madrina de mi hijo? —Bastian lo mira mal y él se encoge de hombros— ¿Qué? No puedo desaprovechar la oportunidad. Me río y me acerco a los muertos. Tres de ellos posaron sus manos en mí. Le hago una seña a Bastián para que venga con el bolso, mientras cortó las manos, para cuando termine de hacerlo la sangre goteaba de mis manos. Me limpio con mi pantalón, una mancha más al tigre no le va a hacer nada. Bastián: ¿Ti
Narra AlessandraEntramos yo con mis shuriken y navajas en la mano, Bastián con el arma en lo alto. Nos acercamos a él que sigue sentado con confianza en su m****a de sofá. Pero el seguro de varias armas siendo desactivado nos hace detenernos. Jian: Quietos. Frenamos y los hombres a nuestra espalda nos sacan las armas. Jian: Me dijeron que eras un problema, pero no tenía idea de cuánto, ¿¡Dónde está mi nieto!? Dónde le dijiste a este traidor que lo dejara. Apunta al rubio. Alessandra: No sé de qué habla. Hace una seña a un hombre a mi espalda y me patean la pierna para que me caiga hacia adelante. Y con un demonio que les voy a dar el gusto de ver desde arriba. Trastabillo un poco, pero sigo en pie. Bastián: Diosa, ¿Estás bien? Asiento. Esto no es nada. Por una puerta al costado entra Hui y la bruja La última está con una sonrisa de oreja a oreja. Hui: Ustedes, se llevaron a mi hijo, mi heredero. Bastián: ¿De qué hablas? Hui: Me traicionaste por una, una puta. Hace u
Narra AlessandraNo, no, no. No me van a meter en sus dramas de macho alfa. Tengo cosas más importantes que hacer, cómo ver a mi hija. Massimo: ¿Estás bien? Alguien se acuerda de mí, al fin. Alessandra: Bien, solo tengo un pequeño corte. Tom: Aless, no es pequeño, es profundo, vamos así te curo. Samuel: Niña, ¿Segura que está todo bien? Junior: ¿Necesitas algo de nosotros? Alessandra: Quiero ver a mi hija y conocer a mi ahijado. Hui: Yo quiero lo mismo. Bastian: Vamos, la rojita debe estar preocupada por la diosa. Este se está ganando todos los boletos para un derechazo y no de mis esposos. Akio: Puedes explicarme cómo es que mi mujer desapareció hace dos días y ahora tiene novio. Kaori: Me regreso a casa, hijo, me avisan en qué quedó esto, saludos, niña, lamento mucho lo que tuviste que pasar por mi esposa. Oh, cierto. Alessandra: ¿Quieres su cabeza? Kaori: ¿La trajiste? Alessandra: Claro, está en el bolso, también sus manos, tómalas si quieres te las regalo, a las p
Narra BastianLa diosa se fue con su hermano y el otro chico Massimo que aún no sé exactamente quién es, a la cocina con la rojita y Bao, el hijo de Hui. Mi mejor amigo se quedó conmigo. Bastian: ¿Quién es el otro hombre que se fue con ella? ¿Otro esposo? Iker: ¿Y eso a ti qué te importa? Hui: Vamos a calmarnos, ya son grandes, solucionen sus problemas hablando, Aless sufrió algunas cosas... feas, cuando estuvo en la mansión, no creo que se tome bien que se agarren a trompadas aquí. James: ¿Puedes contarme? Sí sé que le pasó voy a poder ayudarla como lo necesite. Mi mejor amigo asiente y le hace una seña para que lo siga hacia los sofás. James: Es su hermano por cierto, y no te lo digo porque tengas derecho a saberlo, sino porque en donde le tocas uno solo de sus cabellos te va a torturar. Bastian: Casi me mata con una navaja, no creo que sea mucho peor a qué te mate. Akio: Es militar, sus torturas son militares. Sí... ni al caso, no iba a tocar a nadie de aquí, no le haría e
Narra JamesEstamos hace algunas horas en el Jet de Hui, claro que nos acompañó junto a su hijo y el griego también, nadie quería dejar a Aless. Pero en lo principal, el chino viaja para hacer una tregua con la reina, aunque ya Aless lo aceptó, y si ella lo hizo es seguro que el resto también. Es más, ahora está durmiendo en la habitación del jet con nuestra hija y Bao, es un niño muy tierno y a nuestra hija le agrada, me atrevo a decir que más que las mellizas. Estamos todos en nuestros asientos, el grandote está a mi lado y al lado de él está Isaac. Frente a nosotros están Izan e Iker, y a su lado Bastian y Hui, este último está leyendo unos papeles, trabajo supongo. Unos asientos adelante están Tom y Massimo, que andan inseparables, eso hasta que se enteren de que el mayor se folló a rosita. La azafata va y viene trayendo tragos, que pocos toman, no sé para qué trae tantos, pero como nadie dijo nada no opino. James: ¿No consideran este un buen momento para hablar? Ni los niño
Narra BastianUna hora después de que la diosa vuelve a dormir, la azafata sigue volviendo cada cinco minutos. Trayendo... no sé qué trae, porque los tragos nadie los está tomando, así que los vasos nunca se vacían. Y no es por qué haya querido ver sus piernas, pero quería corroborar que era verdad lo que la diosa decía y sí, cada vez que volvía su falda estaba unos centímetros más alta. Como lo noto desde la habitación, no sé. Bastian: ¿Es celosa? Massimo: Despidió a su representante por coquetear con el gruñón. Isaac: No fue solo por eso, nos llamó asquerosos. Bastian: ¿Por qué? Izan: Por qué somos primos. Iker: Legalmente. Akio: También son esposos, legalmente. WoW, no sabía. Bastian: ¿Es adoptada? Tom: Mi madre tiene 29 años, no creo que haya tenido a Aless a los 7. Bastian: ¿Los dos son adoptados? Que preguntas estúpidas que hago. Isaac bufa. Izan: Mi madre adoptó al niño que le gustaba como su hermano y después se casó con él, el gruñón enfrente tuyo también lo e
Narra BastianFei: Voy a buscar su agua señorita. Alessandra: No hace falta, hay varios tragos aquí que puedo tomar. Fei: Esos son de los señores. Alessandra: ¿Sí? Va hacia James, se sienta en sus piernas y agarra el vaso que tenía en su mano antes de tomar. Alessandra: Vuelve a bajar esa falta y deja de coquetear. Fei: Señorita, todos tenemos derecho a conocer el amor. Alessandra: Busca uno que no esté tomado. Fei: Disculpe, no sabía que el señor era suyo, hay muchos hombres aquí, no hay por qué pelear. Alessandra: Tienes razón, por favor señala al que te gusta. La muy estúpida se cavó la tumba al señalar al gemelo Izan. Alessandra: Yo no te vi coquetear con él. Fei: No prestó atención cuando le hablé. Alessandra: Cómo debe de ser, es mi esposo. Fei: Bueno él. El otro gemelo. La tumba es cada vez más honda. Alessandra: Mío. La azafata ya cansada señala a Tom. Alessandra: Tiene 15 años y está apartado. Fei: ¡Dios, señorita, no puede dejarme follar con alguien! Grit
2 días después, ya en Sicilia...Narra AlessandraMi madre está súper bien, mis nuevos hermanitos también, son tan hermosos y tiernos, me contaron que tuvieron que hacerle una cesárea de emergencia, pero que todo salió muy bien. Blake y Atenea la atendieron. Lo bueno de tener parientes doctores, y es justo por esa razón que Adaris exige que todos elijan una carrera aparte de la que en verdad aman. Nos cuidamos entre nosotros, si estás enfermo tenemos doctores, ¿Problemas legales? Tenemos abogados, ¿Misión Suicida? Tenemos militares especializados. ¿Maneras de lavar dinero? Tenemos administradores de empresas que se ocupan, ¿Un ex tóxico subió una foto desnuda tuya? Tenemos hackers para eso. Y de paso subir una de su micropene. Todo lo que necesitemos, lo tenemos en la familia. En la familia que elegimos. Porque esa es en la que confiamos, no en la que nos tocó, bueno, casi todos hay casos muy particulares. Atenea: ¿Te robaste un niño Alessandra? Ate no estuvo aquí cuando pres