Capítulo 43 ¡Ella no te aportará nada!—Tenemos el vuelo programado para mañana muy temprano, hoy nos quedaremos aquí, quiero que conozcas algo más de la ciudad–sintió como Ricardo cambio de temaArabella no siguió preguntando nada más, quizás en algún momento él se sentiría en confianza para poder contarle que paso, y decirle donde estaban sus padres.Muchísimo tiempo después Ricardo tamborileaba los dedos sobre el brazo de asiento mientras el avión aterrizaba, luego al aterrizar aunque era un vuelo privado, fue necesario que junto a Renato y el resto del personal hicieran los trámites legales respectivos, posteriormente caminaron hasta las afueras del aeropuerto y allí ya les esperaba un automóvilArabella sin saber por qué se sentía feliz, a su llegada a su ciudad podía relajarse y sentirse más tranquila, por otro lado, Ricardo no había dejado de tomarle la mano en todo momento, parecía temer que se escapara, una vez en el vehículo Ricardo recibió una llamada.— ¿Todo bien? – Pr
Capítulo 44 ¿Se casó contigo porque estabas embarazada?—Arabella te buscan en la recepción— ¿Quién me busca?—Alguien de nombre Emily RossArabella pensó en que le gustaría quedarse encerrada en el baño o ser invisible, quizás…desaparecer, se preguntó a sí misma ¿Es qué estas mujeres no se van a quedar tranquilas? ¿Cómo me pudo pasar esto con un hombre que tiene o tuvo, amante, prometida y ahora esposa? De pronto la asalto una idea, y si hay otra esposa por allí, la voz de Sofía, la trajo de nuevo a la realidad—Arabella, esa mujer quiere verte y dice que su empresa es el mejor cliente de la nuestra, también amenazó con formar un escándalo si no sales,—Está bien ya voy hasta allá—camino como si le pesaran los pies, sintió como piedras grandes en sus zapatos, que más vendría ahoraAl llegar al vestíbulo de la empresa, se encontró con la mirada evidentemente furiosa de Emily Ross, esta se paseaba de un lado a otro, y su caminar también reflejaba el mismo ánimo.— ¿Me buscaba Señorita
Capítulo 45 ¿Recuerdas a los dos bebes?—Te repito Arabella, para cualquier hombre sería un honor estar a tu lado, eres una joya de incalculable valor, un premio, un tesoro, no te menosprecies y si necesitas ayuda para separarte de él, cuentas conmigo, he vivido lo suficiente en el mundo de los millonarios para saber qué haciendo uso de su poder intentan intimidar a los demás, pero no tienes que pasar por eso, soy tu amigo y puedo ayudarte— ¿Recuerdas a los dos bebes?—Creo que no has tenido un momento de tranquilidad desde hace mucho Arabella, si sigues así tus hijos nacerán nerviosos o antes de la fecha estimada, tienes dos opciones habla claro con él, exígele respeto, que haga algo con esas mujeres, o haz lo que hubieras podido hacer antes corre hacia otro lado lejos de él, al menos hasta que nazcan los niños—A veces quiero correr hacia otro lado, pero no es cosa de adultos, debo enfrentarme a mi realidad—Correr a veces es de adultos inteligentes y sabios—No puedo Henri, para a
Capítulo 46 ¿Por qué no me llamaste? Arabella despertó más descansada, ya se sentía mejor, menos triste y al despertar encontró a Ricardo pegado a su cuello—No te levantes todavía—le dijo el adormilado—Tengo que ir a trabajar y ahorita mismo tengo que hacer pis — ¿Por qué eres tan realista cuando quiero ser tierno contigo?— ¿Quieres ser tierno?—Estás embarazada, Renato me dio una explicación de media hora de que tus hormonas están alterada, necesitas mucha atención— ¿Renato? ¿Qué sabe Renato?—No sé, pero creo que sabe más que nosotros— ¡Claro que no!—Escucha quedémonos hoy, no salgamos a trabajar, puedo quedarme medio día, estaremos solos los dos, correré a Renato—No dejaré que hagas eso, tienes problemas en tu empresa y ahora los Ross están furiosos, e incluso esa mujer amenazo con cerrar la empresa de Henri y deberías prepararte, si la boda los enojo, imagínate cuando sepan que estoy embarazada, aunque… pensándolo bien eso quizás le haga entender a Emily Ross, cuál fue el
Capítulo 47 Una tercera en discordia—Lo lamento, no había señal, de verdad no quise preocuparlos—Ricardo trato de calmarse, la noche que paso sin dormir no le ayudo en ese propósito —Ven vamos a que descanses— ¿Ya desayunaste Arabella?—Si comimos algo antes de salir, Renato disculpa, por favor—No te preocupes, ve a descansarAl llegar a su dormitorio Ricardo la ayudo con el bolso y la chaqueta que cargaba, se dio cuenta de que esa prenda no era de ella, así que asumió que se la habían prestado, era una chaqueta de hombre por lo cual tenía perfectamente claro de quién era, por lo que se la quitó y la arrojo con furia en una silla lo más lejos posible de ellaÉl la ayudo a quitarse la ropa — ¿Te vas a bañar? —le pregunto—Si estoy muy cansada casi no dormí, sabía que estaban preocupados, de verdad no quise preocuparlos—Vamos para ayudarte en el baño—Puedo sola—le insinuó con cautela y preocupación de que lo hiciera en verdad—No veré nada que no haya visto ya—Ricardo…dame privaci
Capítulo 48 ¡La mamá de Ricardo está viva!La pantalla del teléfono móvil de Arabella se ilumino y comenzó la búsqueda. En todas las redes sociales se hablaba del presunto romance entre Ricardo Wash, reconocido empresario hotelero y la famosa actriz, también sobre su intento de suicidio y su reclusión en una clínica de salud mental.Además hablaba sobre una mujer que era la actual novia del empresario y del presunto matrimonio con esa chica desconocida lo cual había afectado grandemente a la famosa actrizLas personas comentaban desconociendo los detalles de la situación, unos a favor de la actriz, deseándole salud y una recuperación inmediata, otros criticaban una acción tan baja como un intento de suicidio e incluso llamaban bestia a Ricardo por traicionar a su actriz favorita.Demasiado afectada para pensar en algo más, Arabella comenzó a inquietarse deseando que llegara Ricardo, en estos momentos debía tener muchos periodistas de esos que perseguían a los famosos detrás de él, Ann
Capítulo 49 Me gusta muchísimo mi mujer En horas de la noche, Arabella todavía seguía vigilando el sueño del abuelo Brown y de vez en cuando le ponía el dedo debajo de la nariz, a ver si seguía respirando, precisamente la novena vez que lo hizo, el abuelo abrió sus arrugados ojos y la miro con gran enojo— ¿Qué haces, chica embarazada? ¡Todavía no me he muerto! !No pasará, ni aunque lo desees! Arabella brincó del susto — ¿Qué haces aquí? ¿Por qué no te has ido? ¿Acaso no puedo dormir en paz?—continuo diciéndole —En realidad no sé qué hago aquí todavía, lo acompañaba mientras trabajaba con mi teléfono—temía sobre todo que el escándalo de la actriz y Ricardo tuviera efectos retardados en el abuelo.—A eso le llamas trabajar —Sí, se llama moldear la opinión pública a tu favor y manejo de la crisis, me comunique con Sebastián y me está ayudando —Sebastián ¿Lo conoces? —Sí, lo conocí estuvo en el apartamento —Entonces si Sebastián está en eso será bueno, creo en él y en lo que hace,
Capítulo 50 ¡Este es nuestro hogar! Arabela extrañaba a Amelia, últimamente si no estaba con Franklin estaba en la oficina con su jefe, se sentía abandonada, hay cosas que solo a una amiga se les puede confiar. La reunión de Ricardo con sus amigos, le hizo extrañarla muchísimo, ya había intentado acordar una salida con ella, pero fue inútil, quiso intentarlo de nuevo y la llamo, ella le atendió y le propuso: — ¿Te parece que quedemos para el sábado? ¿Qué tal si vas al apartamento y nos hartamos de helados? ¡Puedes pasar la noche allí!— ¡Me parece muy bien!—pensó en Ricardo, no estaba segura de querer pasar la noche con Amelia, últimamente se había hecho adicta a la compañía Ricardo, no obstante le respondió —Necesito hablar contigo ¡Te extraño muchísimo! — ¡Y yo a ti! — ¡Hecho!, nos vemos este sábado ¡No lo olvides! … Ese sábado intento explicar a Ricardo que pasaría el día donde Amelia y no fue tan fácil—No entiendo por qué tienes que hacer eso, raramente pasamos un día aquí