Bianca le pidió a un camarero cercano que le trajera a Paige un vaso de agua tibia.

Lo que Bianca no sabía era que Dave estaba en el balcón del segundo piso, observando la escena desde abajo. Un destello de sorpresa cruzó sus ojos mientras observaba a Bianca. A su lado, Justin también observaba a Bianca con admiración. No pudo evitar comentar,

—No esperaba que Bianca fuera tan capaz. ¿Viste eso? ¡Habló con tanta facilidad con la esposa del director Lopez!

—Si escuchara a su ídolo elogiándola así, estaría encantada —murmuró Dave.

Justin no tenía ni idea de lo que estaba hablando. Miró a su amigo confundido.

—¿Ídolo? ¿Yo?

Dave le lanzó una mirada dura, dejando a Justin incómodo y preguntándose cómo había vuelto a molestar a Dave.

En el salón del banquete, Paige miró agradecida a Bianca después de tomar el antihistamínico.

—¿Cómo te llamas, jovencita?

—Yo soy...

—No necesitas saber su nombre. ¡Ella es solo una asistente de una agente! —Bianca fue interrumpida por una voz áspera desde