OCHO

En la puerta de la casa veo como Javier coloca mi maleta en la parte de atrás del auto, Emily y Manuelito están a mi lado, esperando a que salga Felipe para irnos, todos nos acompañaran al aeropuerto, me negué, que no fui escuchada, dejo claro que me acompañaría.Todos subimos al auto, llevo a mi hermano en brazos, en mucho tiempo no lo voy a volver a abrazar, por lo tanto, voy a disfrutara cada segundo para estar con él.Todo el trayecto es silencio puro, tanto que parece que vamos en una caravana fúnebre, mi madre de ve en cuando me regala una sonrisa triste, en lo que Felipe la consuela un poco, no importa lo que le diga mi madre no parece tener consuelo.-¿Por qué Manuel tiene tu dije? – pregunta Emily, sonrió - ¿Qué estas planeando Raquel? – niego con la cabeza-no planeo nada, solo que he guardado muchos años la esperanza de volver a encontr

NUEVE

Todos los muebles de lugar eran modernos, los colores que destacaba era el rojo, era una combinación de tres colores y el lugar tenia personalidad, los bancos del desayunador eran rojo, la refrigeradora y algunas puertas de las alacenas y algunos cojines de los sofás, este en su totalidad era negro, la mesa era una mesa blanca con sillas color oscuro.Las paredes eran todas blancas por lo que los colores estacaban y hacían una armonía en todo el lugar, cada detalle me llamaba la atención, cada paso que me acercaba a los sofás me hacía sentir más real, cuando al final llegue a uno de ellos que es un pequeño, logro ver que en la mesa de centro Felipe tiene una jarra de agua justo como en casa, la veo por unos segundos y él lo único que me hace de todo lo que existe a mi rededor lo que me saca una sonrisa es ver la jarra color celeste de porcelana con cuatro tazas del mismo color en una bandeja de mader

DIEZ

Tomar el autobús y aprender a utilizar la línea subterránea es todo un reto, uno que me ha llevado mas de tres semanas, el aprender que bus tomar para que lugar y no bajarme una parada antes o una después, es la segunda semana de clases, los cinco que estudiamos en el taller somos unos completos extraños las palabras que se cruzan son “buenos días” y “adiós” luego de ello toda la sala se la pasa en silencio, a cada uno le corresponde realizar una tarea, tener el taller limpio es mi tarea, nadie se preocupa por lo que hace el otro, al momento de recibir las instrucciones, cada quien lo realiza como mejor le parece.De todos los que están estudiando se puede decir que a la que peor le va es a mí, de los cinco diseños que pido que realizáramos los mismo cinco me pido que volviera a repetir, llevo solamente dos semanas y quiero salir corriendo de esta clase.Esta hablando d

ONCE

El dolor de cuello me hace despertarme, cuando abro los ojos y giro mi cabeza siento como si estuviera trabado mi cuello, llevo mi mano a el con cuidado giro mi cabeza y masajeo el área que me duele, hago movimientos circulares un quejido sale de mi boca, abro los ojos y son las cinco de la mañana, veo hacia el sillón mi primo está dormido en el y la televisión que era mi única compañía por la noche sigue encendida, los dos nos dormimos donde pudimos el día de ayer.Me pongo de pie, tomo el control que esta sobre la mesa de centro, busco en mi móvil la app del reloj la activo para dentro de una hora para poder dormir un poco en mi cama, me recuesto sobre ella me quedo profundamente dormida cierro el sonido de mi alarma me despierta, no quiero moverme, pero recuerdo que si llego tarde a clases seré castigada.Entro a la ducha, me baño rápidamente, desayuno cereal y salgo de casa j

DOCE

Hago un esfuerzo por no sentirme molesta con mi primo, por cada vez que intento preguntarle sobre mi familia en el viaje que tuvo, evita el tema, lo cambia, hoy estoy trabajando en la traducción de otro documento este es mucho mas pequeño, necesito el dinero así que no importa, solo son quince hojas el pago es menor, pero lo acabe en menos tiempo, me estoy haciendo hábil en leer documentos y traducirlos inmediatamente.Comemos en silencio porque el esta en una llamada con algunas personas, lo veo su rostro esta completamente serio su expresión es profesional, su sonrisa es amplia al momento de acabar y se expresa – voy a ir de viaje a Alemania – asiento con la cabeza-Me alegra mucho, felicidades – le digo y termino de comer - ¿Qué sucede porque no me respondes cada vez que quiero saber de mis padres? – su sorpresa es efímera como las veces anteriores-Todo esta bien, no tienes porqu

TRECE

Introduzco dentro de la mochila la ultima herramienta que necesito para trabajar, mis materiales de dibujo, dentro de una mochila tan amplia que no necesito otra maleta, llego a la cocina y saco algo de jugo para beber, en el momento que termino el contenido mi primo se asoma, me ve y luego sonríe -vamos que te invito a comer – no tenemos mas que jugo y pan en la alacena, no hemos ido a comprar comida, fue una de las razones por las que salimos también a comer fuera y a bailar a la calle, asiento con la cabeza porque muero de hambre, entramos al elevador y llegamos rápidamente a piso de abajo, a un par de calles se encuentra un lugar donde podemos comer, nos sentamos a degustar la comida, en silencio, aun es temprano así que no tengo porque apresurarme. Terminamos de comer voy al baño, no me demoro mucho regreso y veo a Felipe de pie frente a la puerta - ¡que sucede? – cuestiono por su presencia ahora ante mis ojos con todas mis pertenencias colgándole

TRECE REAL

CATORCE

Algo frio toca mi piel, lo que hace que me estremezca, me remuevo en mi lugar, lucho por abrir los ojos lo logro hasta el otro contacto de algo frio en mi frente, mis ojos se tardan en adaptar a la luz del lugar, veo a mi primo sentado a mi lado con algo sobre mi frente lo que asumo es un paño húmedo, finjo una sonrisa con el único fin de mostrarle que estoy dentro de mis cinco sentidos. -No me vuelvas a asustar de esa manera – me reprende -Hare mi mejor esfuerzo – me intento sentar, me lo impide, sonrió – agua – asiente con la cabeza, me ayuda a beber del contenido solo alzando la cabeza – no voy a moverme de aquí, puedes iniciar el sermón – su carcajada hace eco en todo el dormitorio -Será para mañana – niego con la cabeza – hoy ya ha sido suficiente, duerme – vuelvo a negar con la cabeza – toma mis llaves y me las muestra – por el momento están decomisadas -¿Por qué? – casi grito y me ahogo con mis palabras toso, se acerca a socorrerme, con un adem