Al día siguiente…
Brianna se había levantado temprano y se había ido del piso de Robert luego de haber pasado la noche en su apartamento con él, haciendo el amor, hablando y cocinando juntos.
El día de hoy Robert tenía algo preparado, como una pequeña cita romántica, según este. Él dijo que con más tiempo organizaría un viaje para los dos para cumplir la promesa que le hizo mientras ella estaba en New York, así que debía esperar por ella pero a Brianna no le importaba, no importaba donde estuviera si estaba junto a Robert todo estaría bien.
Ahora entraba en la casa de sus padres sigilosamente. Era así como entraba últimamente, es que temía que sus padres la detuvieran y comenzasen a hacerle preguntas. Aún tenía miedo de responderlas ya que no les gustaría ver la mirada desaprobatoria d
Robert nunca había pedido la ayuda de estos hombres y la verdad era que podía contar con una sola mano la ayuda que había pedido, eran pocas. Él era algo orgulloso pero… a veces uno tenía que sacrificarse por lo que amaba y él definitivamente se iba a sacrificar el día de hoy.Había invitado a sus dos hermanos con sus mujeres solo porque necesitaba ayuda. Tenía la cita perfecta para Brianna, luego de un tiempo matándose la cabeza, pensando a que restaurant elegante llevarla y que harían, al final una hermosa idea le paso por la cabeza y estaba seguro que le agradaría a su novia. Pero para completar la cita necesitaba un poco de ayuda y por eso había invitado a estos individuos a su humilde hogar.Cuando llamó a sus hermanos luego de que se despertó y les comunicó lo que necesitaba de ellos, estos se habían alegrado por él y habían
Estaba tan nerviosa.Brianna fijo la mirada en sus manos mientras se balanceaba en el pequeño sofá en su cuarto. Habían llegado hace una media hora del spa, en donde Brianna se había dado la vida. Se hizo la manicura y la pedicura, además de eso le dieron unos masajes que ahora sentía su cuerpo más liviano y relajado. Fue maravilloso, ahora entendía porque la gente se obsesionaba con el lugar. Debería ir más seguido a este.Cuando llegaron, se dio otra ducha pero rápida ya que se había tomado un poco de tiempo en el spa y se cambió con un vestido que había seleccionado de su armario. Este era un vestido blanco florecido. Su cabello estaba atado en una coleta alta ondulada con un lazo blanco. Estaba bonita, la verdad es que nunca se había sentido tan bonita antes. Estaba tan femenina que era duro reconocerse en el espejo cada vez que se miraba en el espejo, inc
Una semana después…Estaba nerviosa.Había sido invitada a una cena familiar en la casa de los Bryant. Brianna sonrió con nerviosismo. La reunión sería bonita si tan solo estuviesen ellos, pero no, estaban todos y cuando decía todos se refería a sus tres hermanas y los esposos de estas, bueno, Shanna andaba sola y también estaban sus padres. Aunque sus padres habían aprobado su relación con Robert aún se sentía nerviosa y además de ello…Levantó la mirada hacia los padres de Robert.El padre de Robert se veía tan serio y estricto. No era como si esta fuese la primera vez que lo veía porque lo había visto antes, cuando sus padres hacían negocios y además en la boda de Cassie, pero aun así se sentía cohibida frente a él. Durante toda la cena se había sentido s
Cinco años después…Sonrió mientras miraba a su esposo jugar con su sobrino Nathaniel. Brianna apoyó la cadera sobre el umbral de la puerta de la habitación de los mellizos mientras los observaba, los dos jugando con figuritas de acción y riéndose. Se llevó una mano al corazón y miró la escena con ternura. Robert y ella se habían quedado en la casa de Chris y Cassie cuidando a los niños mientras la última daba a luz a su tercer hijo.La cosa se había puesto algo fea unos momentos antes. Ellos habían estado en su casa, viendo un partido de béisbol cuando Robert recibió una llamada. Chris había llamado a su hermano mayor y le había dicho que Cassie se había puesto de parto, rápidamente ellos se cambiaron y salieron hacia la casa de Chris, la cual no quedaba muy lejos de la de ellos, encontr&aac
.Serie: Encontrando El AmorLibro 3: Al Fin Enamorada..Shanna McKay no creía en el amor ni en los finales felices, pero luego de ver que sus hermanas conseguían la felicidad junto a sus parejas, ella comenzó a desear a tener lo mismo. El problema estaba en que, para tenerlo, debía de tener una pareja y no tenía ninguna, el único hombre que estaba detrás de sus huesos era solo su jefe malhumorado que vivía acosándola a cada rato.La relación con su jefe era tan extraña. Había sido odiada, ignorada, insultada y luego deseada, y volviendo al principio ya que su jefe, Nick O’Brien, era un hijo de perra con una bipolaridad extrema. Shanna no deseaba tener a su jefe como pareja, lo único que deseaba era tener un respetable ho
*—Brianna: Hace 7 meses… Era una estúpida. ¿Cómo podía estar enamorada de un hombre que conocía más que de vista? Brianna McKay ladeó la cabeza. Bueno, habían intercambiado alguno que otro saludo hace dos años, en la boda de su hermana mayor Antonella, pero después, no había pasado nada más que eso y aun así, ella estaba enamorada de aquel hombre. Brianna se dio un festín mirando aquel espécimen de adonis que estaba sentado en uno de los sofás de la sala. Robert Bryant era el mayor de los famosos hermanos Bryant. La primera vez que había visto a Robert había sido en la boda de su hermana y desde ese día ella se había enamorado perdidamente de él. No conocía nada de él, pero ella aun así lo amaba. Aquello era estúpido, tenía 20 años y estaba enamorada como si fuese una chiquilla. Bufó molesta y Robert Bryant la miró en ese instante, Brianna se sobresaltó, Robert le había sonreído y aunque se escuchara
Hace dos semanas…¿Qué hacia allí? No le gustaban los lugares donde no era bienvenido y era obvio que allí no era bienvenido. Robert Bryant paseó la mirada por la recepción de aquella boda tan hermosa. La mayoría de los invitados eran conocidos de él, pero ninguno se había acercado a darle un saludo, era obvio que estaban enterados de lo que él había hecho para arruinar el matrimonio de las dos personas que se habían unido el día de hoy por una segunda vez, si, segunda vez porque la primera boda fue una boda falsa pero claro, nadie decía nada de esto.Robert bajó la cabeza. Se había visto obligado a venir. Su madre le había dicho que tenía que ir y si no iba que mejor se fuera olvidando de ella. Según Bethany Bryant, sus hijos tenían que estar unidos y no tan alejados como estaban sus dos hermanos m
Salió de la habitación de Robert, caminó por el pasillo hasta volver al salón otra vez. Se acercó a el sofá más grande del salón, parecía como que Robert había pasado aquellos días sobre este, estaba algo sucio con manchas que de seguro era de algún tipo de bebida que Robert quizás había derramado. Suspiro y tomó asiento sobre el sofá, llevándose una mano hacia la frente, comenzándosela a frotar.¿Qué estaba haciendo? ¿Acaso estaba loca? Hoy había sido muy valiente para accionar el timbre. Había estado viniendo al piso de Robert desde que pasó la boda de Chris y Cassie, se había dicho que tenía que dejarlo pasar, pero no podía, no sabiendo lo muy enamorado que estaba Robert de Cassie. Sonrió, en verdad era una chica fuerte, como podía allí sonriendo cuando por dentro es