47El sexo con Mila cada vez era más satisfactorio, tanto que creía que si se llegaba a casarse con ella, pasaría más tiempo en su cama, en la bañera, en la terraza, en la piscina, incluso en el jardín, pero empalado hasta la base en Mila. Ella lo enloquecía de un modo que ninguna mujer lo había hecho jamás. Y si… era de imaginar que, después de tantos años persiguiéndola, ahora que la tenía, le resultaba demasiado deliciosa como para que se pudiera saciar. Era como Adam encontrando la fruta prohibida.Y si… a pesar de todo lo que ocurriera, era un hecho que se casaría con Mila Papádakis así tuviera que deshacerse del enclenque del tal Héctor. Tenía la palabra de ella de que se casaría, asi que imposible no podía ser.La beso una vez más, como si de un castigo se tratara, pero ella le respondió con igual o más pasion. Neck la enloquecía, la hacía estremecerse en cada pequeña célula de su cuerpo. Ahira que había estado hablando con Héctor en la tarde, se dio cuenta que el efecto de N
PETICIÓN DE MANOEl día de la petición de manos por fin llegó, y Mila se había colocado un sencillo vestido blanco de volantes para recibir a su prometido y a su abuelo -suegro. Andaba como una hormiga trabajadora por toda la casa ultimando los últimos detalles para que fuera un almuerzo Perfecto. Príapos estaba un poco reacio a que su hija se casara con ese tumba locas, pero ella parecía estar absolutamente decidida a casarse. Así que no le quedaba mucho por hacer para oponerse…Incluso ni la presencia de ese raro novio citadino, con el que también planeaba casarse, la había persuadido de lo contrario.La mayor preocupación del farmacéutico era que su hija fuera tildada como cazafortuna, en medio de ese pequeño pueblo donde todos se conocían.Aún así no podía dejar de reconocer que su muchacha era buena y hermosa; y que el nieto de Kronos, bien podía estar enamorado de su hija, sin que mediara entre ellos algún tipo de interés económico.Solo por eso acepto recibir a Ulises y al mu
DESPUÉS DE LA PELEACon mucho trabajo Vincent logró contener a Neck, quien con cada golpe se enfurecía más.La situación con el ex novio de Mila, se había salido de las manos. Había empujado, hasta que los celos que sentía Neck se habían salido a la superficie como la lava de un volcán furioso.Ahora nadie podría culparlo por haberle destrozado la cara a ese tipo fantoche, que tuvo la desfachatez de aparecer en casa de su novia, el día que oficialmente su padre le entregaba su mano.El tipo se la había buscado, y nadie podría reclamarle por ello.Ivette también llegó, y abrazó a Mila quien había comenzado a llorar, al ver el espectáculo que se había provocado en un día que parecía feliz.—¡Shhh, Tranquila, todo estará bien!— Intentó calmarla la francesa, pero en el interior de Mila, una voz le decia que todo estaría mal.Vincent hizo lo posible junto a Ulises por regresar a Neck a la Villa, pero Hector seguía allí tendido, y Mila en esa ocasión no supo que hacer.Era médico, tenía qu
UNA CUCARACHA VENENOSANeck salió de aquel hotel absolutamente indignado por la actitud altanera y estúpida de esa cucharacha, a la que sin dudo debio golpear más duro.Pero si algo tenía claro es que no quería a esa escoria rondando a Mila Papadakis. Si lo volvía a ver cerca de su mujer era bastante probable que le diera un ataque.Solo había hecho lo que tenía que hacer, si pagando esa ridícula suma, arreglaba que ese hombre se desapareciera de su vida y de la de Mila; pues sin dudas ese sería el dinero mejor invertido de su vida.Se metió en el coche y condujo de vuelta más tranquilo de que lo que había hecho era lo correcto. No importaba que tan feo sonara, o que poco ético era… pero le parecía correcto.Lo que para Nickolau Kronos significo un acto desinteresado de nobleza, al librar a su novia de el flagelo que significaba tener a ese hombre presionando e intentando hacerla sentirla culpable...; para Mila fue algo bien distinto.Y si, tan pronto Neck dejó ese hotel, Héctor no p
UN PILOTO CELOSO —¡Ivette merece algo mejor que ese tipo! —¡Alguien como tú!— alegó Ulises y Vincent palideció. —No… este que… —Este que nada.¡ Esa muchacha es tuya!—aseguró el viejo. —¿Qué crees Neck? ¿Apostamos? Neck sonrio ante la cara de la sorpresa mezclada con espanto de Vincent. —!No te hagas querido amigo! ¡Es evidente para todos que babeas por esa francesa!— le dejo por lo claro Neck. —Ivette nunca me tomara en cuenta a mi. ¡Por Dios! Ella conoce todos mis secretos, cada una de mis conquistas, y mis desenfrenos. Uno no se enamora de su confidente, ni ella se enamorará de mí después de semejante prontuario. —Bueno no sabría que decirte—musito Neck pensativo— Al menos yo tuve la suerte de ser feo, y no tenía conquistas que mostrar… Al menos eso es algo que no podrá Mila recriminarle jamás. Muy estupido tu de dejar que el amor de tu vida conociera a las "equivocadas". —¡Ahh!¿Y después? — se quejó si abuelo haciendo alusión al tiempo que su nieto habia dejado de ser "FEO"
ANTE UNA BODA GRIEGA.La ceremonia prematrimonial era algo que Ulises había preparado, para que se llevaran a cabo todos los procedimientos legales del matrimonio. Hacía años que no había una boda en la familia Kronos, así que el viejo Ulises no dejaría pasar nada por alto.Primero se llevaría a cabo esta especie de ceremonia íntima en una playa privada, para al día siguiente la pareja marcharía al altar.En la recepción de la playa se había dispuesto mesas por todo el lugar con abundantes vinos y dulces. Como parte de las costumbres para agasajar a la novia.Las bodas griegas a diferencia del resto de Europa se celebran por el rito ortodoxo, en una ceremonia religiosa llena de simbolismo.Para Mila y Neck ese matrimonio tendría que significar la unión de sus dos almas a pesar de todos los inconvenientes que habían vivido.Nickolau sabía que las nupcias griegas empezaban desde el mismo momento de la petición de la mano de la novia, por eso la importancia de que Príapos lo aceptara, y
UNA BODA ESPERADAPor fin el día de la boda llego, y tanto Mila como Nickolau Kronos se preparaban para el momento que tanto habían añorado o temido, porque después de eso no sabían a ciencia cierta en qué pararía toda aquella historia. Si lo cierto era que había cosas que hacían que la pareja funcionara, había otras tantas que a Mila no le resultaron tan fascinantes.La amenaza que resultaba ser aquel tal Héctor, había desaparecido. Mila seguía un poco molesta por la actitud de Neck, pero se tomaba algo de tiempo para procesar lo que sería su vida de casada.Nickolau Kronos, su futuro esposo le había comprado un puto hospital, solo para que no volviera a ver a su ex. Además que la había matriculado sin su consentimiento en aquel curso que tanto deseaba, pero que de ningún modo podía pagar.Los modos de ser de Nick tantas veces la desconcertaban, que le era difícil pensar cuando lo tenía al lado. Sobre todo cuando el joven heredero usaba la mejor arma que tenía a «favor o en contra»
RUMBO AL AL ALTARNeck se bajó del coche y se posicionó tras el altar, allí lógicamente todo el mundo lo miraba. El automóvil que se supondría que traería a su futura esposa aún no daba señales de aparecer y él obviamente sentía cómo se le subía la tensión de los nervios a cada minuto.Después de diez minutos tras el altar, miró a su abuelo sentado en la primera fila de asientos, e hizo una seña que demostraba la impaciencia que lo embargaba y amenazaba con carcomerle el alma.—¡Calma!— susurro su abuelo articulando solo con los labios sin que más nadie pudiera escuchar. —¡Calma! Sereno Moreno..De pronto todos los invitados que estaban afuera de la iglesia comenzaron a entrar y Neck supo que algo había pasado .La música se hizo escuchar y la emoción lo abarcó, un sentimiento parecido a la felicidad lo cubrió de pies a cabezas.Ella había llegado por fin. Se casarían… sería su esposa ante la ley de los hombres, y las leyes de los dioses.Por primera vez desde que llegó Neck se de