Daría.Abrí mis ojos con pereza, hacía mucho que no dormía con tanta tranquilidad como lo había hecho. Me sentí aturdida al ver que no me encontraba en mi habitación. Miré a todos lados buscando algo que me indicara en dónde me encontraba y viendo los aparatos a los que me encontraba conectada, supe que estaba en un hospital.— Hija— dijo mi madre, rompiendo en llanto.— ¿Mamá, qué pasa, porque lloras? —le pregunté llena de preocupación, sin entender lo que pasaba.— Por fin despertaste, hija —dijo mi padre con lágrimas en los ojos.Estaba aturdida, pues no sabía a qué se refería, acaso cuánto llevaba dormida.— ¿Me pueden explicar qué está pasando?—pregunté impaciente. Ellos se miraron entre sí y asintieron. — Hija, llevadas inconscientes más de un mes —dijo mi madre. Y me quedé en shock, acaso estaba bromeando, como podía ser posible, eso. Si más, no recuerdo, anoche me acosté como de costumbre. — Eso no puede ser posible —les dije con una sonrisa en mi rostro, pensando que se t
Leer más