**Lyra** El roce de su piel contra la mía era un incendio lento, tan dulce como devastador. Mikail me miraba como si yo fuera su única certeza, su refugio, su perdición... y su redención. Cuando finalmente me hizo suya, un escalofrío me recorrió la columna. No era solo placer; era algo más profundo, una explosión de sensaciones que me envolvió por completo. No pude evitar pensar que tal vez, solo tal vez, esta vez las cosas sí funcionarían entre nosotros. Que los errores del pasado, los silencios, las heridas, se quedarían atrás. Que Mikail y yo podríamos tener un nuevo comienzo. La conexión era tan fuerte que, por un segundo, juré ver destellos dorados en el aire. Cerré los ojos, y supe. El vínculo seguía ahí. Tharion tenía razón. No se había roto. Nunca. Un par de lágrimas cálidas se deslizaron por mis mejillas. —¿Estás bien? —susurró Mikail, su voz ronca y suave al mismo tiempo, como una caricia—. Cariño… Asentí, pero mis labios apenas se movieron. —Esto
Leer más