Sofía. Después de una incomoda y silenciosa fiesta de té en compañía de Rosa me retiro a mi habitación, me pregunto por que Rosa no invitará a más damas para tomar el té le ase falta socializar más o tal ves es como yo que prefiere pasar el día en soledad con sus pensamientos y leyendo libros, me recuesto en la cama y miro el techo, recuerdo lo que me paso con William en mi oficina y las mejillas me comienzan arder, como se atrevió a intentar besarme y con que fin, que un hombre tan guapo se fije en mi me ase sentir muy emocionada y especial hay a quien engaño de seguro solo desea engatusar me y jugar conmigo, ningún hombre de su estatus y belleza se fijaría en una mujer como yo, se muy bien que no soy lo que se llamaría una belleza mi único atributo es mi inteligencia pero eso no llama la atención de los hombres, es mejor que ocupe mi mente con otra cosa antes que me deprima, me levanto de la cama y voy a mi oficina donde comienzo hacer una mezcla de hiervas que le sirva a Rosa par
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