RavennaEl cuarto de visitas era un espacio encantador, cuidadosamente decorado para proporcionar comodidad y tranquilidad a los huéspedes. Las paredes estaban pintadas en tonos suaves, transmitiendo una sensación de serenidad, mientras una gran ventana permitía la entrada de luz natural, iluminando el ambiente de forma acogedora. Me senté en la cama, observando a la señora Elowen acomodar mis pertenencias sobre ella."Cualquier cosa que necesites, solo avísame", asentí, y ella salió, cerrando la puerta. Acerqué la maleta y saqué el celular de dentro, enviando un mensaje a Benjamin."Gracias por todo lo que hiciste por nosotras. Espero que algún día pueda presentarte a Rubí." Cerré los ojos, conteniendo las lágrimas que amenazaban con caer. Nunca había deseado algo así en mi vida, pero, en ese momento, lo que más quería era permanecer a su lado."Pobrecita de la lobita, ¿estás triste, verdad?" No sé cómo Sarah entró en mi cuarto sin hacer ruido, pero me alejé lo más posible de ella."

BenjaminCorriendo por el bosque, logré liberar todo el odio que sentía por mi padre en ese momento. Aunque sabía que él quería lo mejor para mí, seguía tratándome como un cachorro, sin darme ninguna oportunidad de elección.Corrí dejando todo atrás, incluyendo a ella. Ravenna nublaba todo mi ser, me mantenía atado a sus pies y, de alguna manera, me mantenía alerta a todo lo que podría sucederle.Aunque no quisiera, mi lobo siempre me llevaba cerca de ella, siempre me arrastraba hacia su olor, hacia su sabor.El deseo que sentía era inexplicable.Corrí lo más lejos que pude. Sabía exactamente dónde el alfa me buscaría y la pelea sería aún peor, terminando con él corrigiendo a mi lobo.Me detuve cuando ya no sentí el poder de mi padre sobre mis espaldas. Cuanto más corría, más él aceleraba, pero Jordan era un lobo viejo y yo estaba en pleno vigor."Diosa, escucha mi ruego: ¿Cuál es el camino que debo seguir? ¿Quién es mi compañera? ¿Ravenna o Sarah?" Pregunté mirando a la Luna, que ya

BenjaminApreté el celular con tanta fuerza entre los dedos que la pantalla se resquebrajó. Mi hermana había hecho todo lo que le pedí que no hiciera."Voy a arrancarle la cabeza a Mallory en cuanto llegue allí," dije a mi familia, que seguía recelosa en mi presencia. Algo dentro de mí se había roto durante la madrugada, y el odio y el deseo de derramar la sangre del Alfa frente a mí y del Alfa del Sur me cegaban para cualquier otra cosa."Ella solo está tratando de calmar a Ravenna, hermano," Cameron dijo, intentando acercarse, pero la evité, saliendo de su alcance."Parecen no entender nada de lo que digo. Pido cosas simples y no las hacen, intento ser amable y no lo aceptan, así que ahora será a mi manera." Mi lobo estaba dominado por la oscuridad que se había infiltrado en mis huesos.Era como si eso siempre hubiera estado al acecho, esperando surgir, y finalmente había encontrado la salida necesaria."Hijo, no somos tus enemigos. Estamos intentando evitar una guerra." Miré a mi p

BenjaminEl tiempo pasó demasiado rápido mientras conversábamos sobre lo que todo esto significaba. Ravenna estaba curiosa sobre mi pasado, y pacientemente le expliqué las implicaciones de todo lo que me sucedió cuando era solo un bebé."Benjamin, Ragnar los espera en 5 minutos." Asentí, acercándome a Ravenna, que se puso inmediatamente tensa. Tomé su rostro y mordí su labio inferior, haciéndola olvidar lo que íbamos a enfrentar."Estaré a tu lado en todo momento. No tienes que tener miedo." Sus ojos se encontraron con los míos y ella asintió. Nos levantamos y seguimos a Ton, que nos esperaba fuera de la sala.Sentí cómo la tensión en el aire se intensificaba a medida que Ton nos conducía hacia la presencia del Alfa Supremo. Mi lobo estaba inquieto, y luchaba por contener la ira que burbujeaba dentro de mí. Sabía que esta reunión sería el punto clave para mi plan, especialmente considerando el estado vulnerable de Ravenna y la amenaza inminente que representaba Mason.Tan pronto como

BenjaminEl aire estaba cargado de tensión mientras esperábamos fuera de la sala de reuniones. Podía sentir el peso del miedo y la desesperación de Ravenna oprimiendo mi pecho, asfixiándome de manera aterradora. Mi corazón latía descontrolado y mis manos temblaban ligeramente, aunque intentaba mantener una expresión calma y controlada.Ton, Connor y Cameron estaban a mi lado, ofreciendo palabras de consuelo y consejos para que me calmara. Trataban de tranquilizarme, diciendo que todo estaría bien y que Ravenna estaría a salvo. Pero, por más que lo intentara, no podía apartar la sensación de impotencia que me consumía."Benjamin, necesitas mantener la calma", dijo Ton, poniendo una mano reconfortante en mi hombro. "Ravenna está aquí para liberarse, estará bien."Asentí, pero las palabras de Ton parecían lejanas, perdidas en medio de la tormenta de pensamientos que tumultuaban en mi mente. Me sentía incapaz de proteger a la loba que nublaba mis sentidos, del dolor y sufrimiento que esta