— ¡Hey hola! ¿Qué haces acá afuera? pensé que hablarías con mi padre –Bianca se acercó viendo a Alastair parado frente a la puerta del despacho del rey.— Mi hermana me pidió que saliera, pero me estoy impacientando –Respondió el joven con la mirada fija en la puerta.— Bueno a lo mejor tu hermana solo quiere defenderte, por cierto no te agradecí por tu ayuda, de no ser por ustedes dos dudo mucho que haya podido con esos dos sola –Él sonrió sonrojado.— Dudas mucho de ti misma, eres una mujer lobo yo soy solo un simple humano –Se encogió de hombros.— ¿Eso te molesta? Lo que soy, lo que es mi familia –Preguntó la joven con curiosidad.— Pues... para serte sincero aún lo estoy procesando, no es que sea algo malo, ni Ailsa ni yo teníamos idea de lo que ustedes escondían mi padre siempre ocultó sus verdaderas intenciones, me gustas y mucho Bianca –Ella Subió su mano interrumpiendo a Alastair.— Tengo una duda, si tu hermana no hubiese descubierto a tu padre ¿Me habrías usado? –Alastair m

La primavera llegó a Brasov y con ella el nacimiento del nuevo príncipe, los reyes Nicholas y Lena anunciaban el nacimiento de su tercer hijo Ludvig II. Todo había vuelto a la normalidad, Elin y Goran estaban felices y muy ocupados con su bebé Gia, las predicciones de Astra no fueron acertadas ya que de la unión de los enamorados nació una hermosa, bebé con los ojos de su padre y la viva estampa de su madre. El padre de Elin viajo hasta Brasov para conocer a su nieta, cualquier desavenencia entre ellos había quedado atrás. Nicholas decidió darle a su beta un tiempo para que disfrutara su dicha, Bianca estaba más involucrada en sus obligaciones y hasta que volviera Goran su padre la nombre su mano derecha. Tras el nacimiento de Ludvig, la reina se mantenía al margen de los deberes ella amaba dedicarse de lleno a la maternidad y estar siempre cerca de su bebé. — Creo que Daven está un poco cansado padre, creo que yo debería seguir con la gira real — ¿Estás segura? he enviado a Dave

— Despertaste temprano amor mío –Nicholas rodeo la cintura de Lena haciéndola sonreír.— Ludvig me hizo madrugar y no quise despertarte, te veías muy tierno dormido, tú también necesitabas descansar — Ujum... anoche mi luna me hizo trabajar duro hasta muy tarde –Susurró él en su oído.— Ya basta, bien que te gustó, oye Daven y Bianca llamaron temprano ya están en Brasil, por cierto este mes se me olvidó comentarte hace unos días me llamo el arquitecto Mark Vincent no sé si lo conoces –Nicholas negó.— No, ¿Debo recordarlo? — Bueno su abuelo y su padre eran los encargados de construir las viviendas, su padre se retiró y él quedó a cargo del negocio familiar, eran amigos de la familia— ¡Ah sí claro ya! ¿Va a venir? — Si cada cierto tiempo le ofrecemos unas mejoras a las viviendas y construir nuevos complejos, dice que tiene una propuesta de un hotel turístico y la verdad me parece buena idea ¿Qué dices? — Uhm... me parece una idea genial, todos dicen que Brasov es una belleza podrí

— Mark quiero pedirte disculpas, Nicholas se encuentra un poco estresado, es la primera vez que envía a Daven y a Bianca a un viaje y está...— Un poco gruñón –Interrumpió Elin. — Elin... –Lena la miró seria negando. –No le hagas caso — De casualidad le comentaste de mi pedida de mano cuando éramos jóvenes –Las mejillas de Lena se tornaron rosadas y con una leve sonrisa asintió. –Ahora lo entiendo, bueno yo me comportaría igual... avísame si desean ver mi propuesta, si el rey no está de acuerdo no necesito quedarme más de una semana aquí. — Yo si estoy interesada, no te preocupes por Nicholas, como dije antes él solo no toma las decisiones, sigo siendo la reina –Mark sonrió y asintió. — Perfecto, entonces estaré al pendiente de tu llamado –Ambas mujeres observaron partir a Mark.— ¡Que dios me perdone porque tengo compañero, pero que hombre más guapo! no sé cómo lo dejaste escapar — ¡Calla! que no te escuche Nicholas, pero me va a oír se comportó como un idiota— Bueno tanto como

— Nicholas debes irte ahora — ¡No, debo estar con ella! ¡La lastime! ¡Lena! –Lena aún seguía en shock por el ataque de su esposo, también para ella siempre existió el temor de que pudiera ser agredida, no solo por él sino por Daven y ahora Bianca, ella sabía perfectamente que ese lado primitivo no siempre podían controlarlo, una cascada de lágrimas comenzaron a derramarse sobre el rostro de Lena, no solo el dolor físico que sentía por la gran herida en su brazo, sino el profundo dolor que su corazón estaba sintiendo, cuando Nicholas intento acercarse a ella, lo miro con terror y como pudo se alejó de él.— No vuelvas a tocarme nunca más –Nicholas se quedó sin parpadear, sabía que había cometido el peor error de su vida, abrió un abismo en su relación sin mencionar que había a la reina de Brasov, el beta intervino.— Alfa... será mejor que se aleje para que se calme –Los ojos de Nicholas no se despegaban de Lena. – ¡Por favor! –Goran se alejó y se puso al lado de Lena. –Debemos llevar

Lena despertó agitada a media noche, su corazón latía con fuerza, al levantarse sintió una punzada de dolor, miró su herida y su mente volvió a ese terrible momento, a su lado se encontraba dormida Elin, toda la habitación estaba oscura, hizo un gesto de dolor, su herida comenzaba a molestarle, se bajó de la cama y vio en su escritorio varios frascos uno de ellos serviría para aliviar su dolor, sacó dos píldoras y se las llevó a la boca, se sirvió un vaso con agua notó lo difícil que le fue puesto que ella era zurda y el brazo que hirió Nicholas fue su brazo dominante, aún estaba débil así que la jarra resbaló de su mano cayendo en el suelo haciendo una gran estruendo eso hizo que Elin saltará de la cama del susto, miró a todos lados hasta que sus ojos la llevaron a su amiga.— ¿Por qué no me despertaste? –Dijo acercándose evitando los vidrios rotos. — Cuidado no te vayas a cortar, las dos no podemos estar heridas al mismo tiempo— Perdón debía despertarme para que tomaras tu medicam

BRASIL.- — Daven bienvenido a Brasil –El joven extendió su mano para saludar al chico que lo recibía con una gran sonrisa. — Blane es un gusto, queríamos ver cómo andaban las cosas por acá ¿y tu padre?— Sabes cómo es adicto al trabajo, oye dijiste ¿Queríamos? — Sí, mi hermana vino conmigo, su primera visita, ahorita está descansando ¿Podemos ir a almorzar y nos ponemos al tanto de los negocios? — Perfecto vamos, debo decir que las mujeres en la manada están un poco entusiasmadas por tu llegada –Daven sonrió de medio lado negando. — Vine por negocios Blane, no me sonsaques -Le dio un golpe con el codo. — Oye debo reconocer que hay lobas muy bellas aquí tal vez una podría ser tu mate — A veces presiento que mi mate no es una loba para serte sincero –Blane lo miro confundido.— Sabes que el vínculo con humanos es prácticamente nula — Pero a mis padres les pasó –Blane se encogió de hombros.— Sabes converse eso con mi abuela, ella dice que el vínculo de tus padres debía suceder

— No puedo creer que mi hermana menor ya se haya vinculado –Expresó Daven aplicándose loción sobre su mejillas, se apoyó mirándose al espejo negando. – ¿Cuál es el problema conmigo? ¿Voy a morir pronto? –Se hablaba mirándose al espejo, escuchó la puerta.— ¿Daven? ¿Estás listo? –Avisó Bianca su llegada. — Si, ya salgo –Apareció frente a Bianca que llevaba un vestido azul corto- ¿No te parece muy corto tu vestido? –Ella sonrió. — ¿Quieres que me ponga un cuello de tortuga? vamos a una fiesta en una playa de clima tropical, por cierto te ves muy bien –Daven asintió serio. ¿Estás molesto conmigo? por mi... — No, discúlpame uhm... estoy feliz por ti de verdad Blane es leal y ustedes se llevarán muy bien, no me hagas caso vámonos— No sé cómo le diré a mi padre — Bianca él es el alfa de la manada tú eres su hija, ya lo sabe, pero para los lobos es un proceso natural –Se subieron al ascensor y por unos segundos estuvieron en silencio hasta que Daven lo rompió. – ¿Qué se siente? –Bianca

— ¡Padel! — ¡Daven, hijo bienvenido! te estaba esperando— Es un placer verte Padel, lo sé tú no te das un respiro ¿Eh? –El hombre mayor de pelo blanco y barba, piel bronceada, anteojos gruesos, alto y corpulento a pesar de los años su presencia sigue siendo intimidante. — Ya lo sabes, el alfa me mantiene ocupado, creo que ya te estás dando cuenta, ven acompáñame tengo los documentos que le enviaré a tu padre aunque sé que esas aquí para divertirte un poco –Daven hace un mohín. — ¿Viste que seremos familia? bueno más cercanos — Si estoy feliz, sé que es la hija de tu padre la conoceré luego, ahora solo quiero hablar contigo –Daven lo miraba con atención. –Blane me habló de tu conversación sobre la conexión ¿Que te preocupa? –El chico se encogió de hombros. –Daven sé que no soy tu padre, pero puedes confiar en mí, ahora que te veo siento que algo te perturba dime qué es para ayudarte — Desde hace un tiempo siento que algo pasa conmigo, no lo sé estoy confundido creí que la chica

— ¿Qué dices? ¿Que mi padre hizo qué? –Preguntó Bianca sorprendido.— El tío Goran no dijo nada más, debemos irnos ahora— Yo iré con ustedes –Dijo Blane, Daven no pudo objetar en su mente solo estaba esa noticia su padre el alfa habías atacado a su mate.— Está bien adelántense al hotel y empaquen iré a hablar con la chamán –Daven caminó hasta la carpa de la anciana. — ¿Es posible que Astra haya infectado a mi padre también? (...) — Padre... –Daven entró a la habitación, su padre estaba hecho ovillo en un rincón oscuro de la habitación, el chico no podía creer el estado en el que estaba viendo al gran alfa Nicholas Ottum, con lágrimas en los ojos, indefenso con un cachorro con miedo, de aquel valeroso, hombre con fuerte carácter, decidido no quedaba nada. -Papá ya estoy aquí, el tío Goran me avisó— ¡La lastimé, la lastimé! ¡La lastimé! –A Daven se le partió el corazón, por suerte traía consigo el remedio para curarlo de la infestación a la que fue sometido por Astra, un hechizo p