No sé cuanto llevo en posición fetal en el suelo de mi habitación, todo a mi alrededor se sigue moviendo menos yo, puedo escuchar los gritos de Andy, puedo escuchar su dolor, puedo escuchar los golpes en mi puerta, puedo escucharlo todo, pero no puedo moverme, estoy paralizada, estoy en shock, pero ni siquiera una sola lagrima ha salido de mi ojo. No puedo creer que Aaron esté muerto, que en realidad no esté muerto, no respira, su corazón no late, y todo por mi… ¡no! No es mi culpa, no fue mi culpa, no había forma de saber que Aiden le haría eso, ¿cierto? Es imposible, yo no tenía idea. No era mi intención, yo no quería que muriera, solo quería que se alejara de mi hermana, sabía que no la amaba, sabía que no estaba con ella por ese amor que tanto le juraba, sabía que no estaba siendo sincero, pero dentro de todas las cosas, lo último que quería era que muriera. Yo no quería que muriera, no era mi intención, no estaba en mis planes… —¡¿Qué carajos estás diciendo, Victoria?! ¡cierra l
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