—¡Ay, loba!, ¡qué deprimente es tu vida! —, le habló Hope desde el otro extremo con una voz suave pero cargada de sarcasmo, asegurándose de que solo ellas dos pudieran escucharla al aislar sus voces con su magia. Juliet, furiosa, le respondió en voz alta. —¡Vete al infierno! —, gritó, pero para s
Leer más