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Capítulo 81: Al borde del precipicio
Lawrence llamó a una ginecóloga, estaba afuera de la habitación, la doctora revisaba a Liv. Su madre lo observó, estaba muy molesta. —¿Qué significa esto, Lawrence? Dime si lo que Rentada dijo es verdad, ¿el hijo que espera esa joven es tuyo? —Es mío. Su madre le miró perpleja. —¡Dios mío, Lawrence! Debes hacerte cargo de ese bebé, no puede crecer sin un padre, no puede tener tu mismo destino, debes casarte con ella, no puedes negarle tu amor. Lawrence bajó la mirada. Su madre se alejó de él. Sin embargo, le informaron que había un hombre que la buscaba, la mujer se encontró con Demetrius Vicent. —¿Usted aquí? —Por favor, quiero hablar no con su hijo, sino con usted. Ambos deambularon por el jardín, hablaron. Ella le contó toda su verdad. —Entonces, mi padre fue un hombre infiel, y mi madre, la mujer que con descaro lo hizo. —No lo sé, solo puedo hablar desde mi perspectiva, antes guardé rencor, pero ahora no lo hago más, Alana y yo cometimos errores, padecí de mis errore
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Capítulo 82: Final
—¡Te llevaré con Liliana! Pero, ¡no me mates! —exclamó Alana Tessa le miró incrédula. —¡No! —gritó Tessa. Alana manejó, sabía que si se detenía ese hombre iba a matarla, tuvo mucho miedo. —¡Usted sabía que Demian mató a mi padre! ¿Lo calló? Tessa le miró asustada, negó. —¡Él no hizo eso! —¡Claro que sí! Ahora lo mataré, y me llevaré a mi Liliana conmigo. Alana no pudo decir nada, tenía pavor. Tessa sollozó, estaban camino a la mansión Vicent. Liliana estaba en la habitación, estaba agotada, Demian estaba ahí, cuidándola. Marina entró y los vio. —Llevaré a las niñas a la fiesta de su amigo, será en un jardín cercano, ¿puedo llevar también a Carlitos? También llevaré a Diego. —Vale, gracias, Marina —dijo Demian. Ella sonrió. Fue con los niños y el chofer, envió un mensaje a Demetrius diciéndole que iría a la fiesta. Demetrius llegó solo unos minutos después, entró en la casa. Cuando llegaron a la mansión no encontraron problemas en entrar. —Si dices una sola palabra, vo
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