La noche por fin terminó, el desayuno llegó hasta la habitación, era una dieta saludable, fruta, jugo, gelatina y un panqueque — Señorita, es hora de comer, te voy a levantar un poco la cama, solo un poco — No tengo apetito, además no sabes cómo me pongo después de comer algo — Debemos intentarlo, querida, si no comes no habrá como vitaminar tu cuerpo, anda, yo mismo te daré los alimentos — ¿Qué...? ¡no, yo puedo hacerlo sola, dame la cuchara! — No, no, no, quedamos en que ibas a ser buena y seguir mis indicaciones — Ahh... está bien, comeré A Aithana, no le quedó más remedio que aceptar comerse todo, Drago, le dió bocado por bocado, mientras lo hacía hablaba con su hijo — El bebé ya se va a portar bien, será bueno y se comerá todo lo que le estamos dando, va a comenzar a crecer más sano y más fuerte, ya no te va a provocar esos fuertes vómitos, ¿cierto, bebé? Mientras tanto, Dariana llegaba a la compañía Ferreira, Larry Brown, ya estaba ahí, ella pidió su hab
Leer más