Salimos del lugar apenas amaneciendo. No dormí casi nada, pueda que solo una o dos horas. Me siento muy cansada.Pensé que cuando esto terminará, íbamos a irnos cada uno por su lado, no que me dejara botada allí, sino que saldríamos como si fuéramos unos completos desconocidos, y no fue así. Me tomó de la mano y condujo hasta su auto para que subiera, cosa que se me hizo raro, ya que no hablamos en todo el camino de regreso.No fuimos al apartamento de Samuel, llegamos directo a casa. No espero a que me abra o me diga algo, abro la puerta y bajo en cuanto apaga el motor de su auto.No sé qué hacer en este momento, no es como si le tuviera que decir, “gracias, estuvo bien la noche o el sexo salvaje que tuvimos.” Por Dios, no he sabido qué decirle, por lo tanto, he estado callada hasta ahora. Pero la verdad quisiera decirle muchas cosas, una de ellas es, confesarle que lo que dije en su despacho si es cierto, que lo amo, y que no sé cómo fue que paso todo, ni yo sé por qué estoy enamora
Leer más