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Todos los capítulos de Jugando con fuego : Capítulo 121 - Capítulo 130
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121. Es tu problema
Apesar de acusar directamente Alexander de querer a Dayana al final de cuentas sólo era una acusación vacía que había echo con ganas de molestar, nunca se espero que Alexander en verdad quisiera a Dayana, Edgar hizo puños sus manos ante la frustración.— ¿¡Como es que puedes estar tras la novia de tu hijo?! ¡¿No tienes vergüenza?!.- Edgar protestó ante su molestia y celos crecientes — ¡Ahora si soy tu padre!.- Alexander se río con amargura.— Tu no eres nada mío, Tu no supiste cuidar a esa hermosa mujer cuando la tuviste apesar de que muchas veces te dije que no la engañaras, pero gracias por no hacerme caso me dejaste el camino libre.Ahogado entre la rabia y los celos que le provocaba el simple echo de pensar que Alexander pudiera tener a Dayana decidió molestarlo y hacerlo enojar a él también.— Ella no te va a hacer caso, ella piensa que eres mi padre.— Me encargaré de decirle toda la verdad si es necesario, aunque si me hace caso o no, es mi problema no tuyo, no descansaré hasta
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122. Plan B
Amanda no podía creer que Edgar resultara ser un cobarde y poco hombre al dejarla sola en esa situación tan complicada, la tía de Amanda tocó la puerta y entró de repente a su habitación, al igual que Leonel ella no había ido a la Universidad, se le caía la cara de vergüenza de toparse con Leonel al igual que de miedo de cruzarse con Dayana. — ¿Que piensas hacer con tu embarazo Amanda? Estas conciente que no es poca cosa... que les vas a decir a tus padres, me van a matar cuando se enteren, pero a ti también como se te ocurre meterte con el novio de la hermana de tu novio, Dios esto es todo un enrollo difícil de explicar.— Mis padres no tienen que enterarse de todo eso, simplemente les diremos que quede embarazada de mi novio y ya, no seré la primera ni la última chica a la que le pasa esto.– Amanda molesta hizo a un lado el teléfono al darse cuenta que Edgar le había bloqueado las llamadas. — ¿¡Asi?! Pues a lo que sé ese bebé no es de tu novio si no de tu amante, con quién planeas
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123. Mentiras desesperadas
Dayana había arrojado su celular sin cortar la llamada así que Alexander al otro lado de la línea era testigo de todo lo que pasaba, estaba listo para ir a la casa de Dayana cuando al escuchar aquellas palabras de Edgar lo hicieron parar en seco. Ella se empezó a sentir algo nerviosa, no podía creer que Edgar yo hubiera descubierto lo de Alexander y ella, lo que era más impactante para Dayana fue que Edgar estaba muy tranquilo, así que como no estaba segura de que era a lo que se refería Edgar exactamente fingió no saber de que hablaba.— ¿Alexander?... ¿hablas de tu padre? ¿Que tendría que ver él conmigo? Ella más que fingir en realidad no entendía nada, no entendía a que venía todo eso por parte de él en ese momento. — Le gustas... él lo dijo Alexander abrió mucho los ojos y sintió que su corazón se detenía, su cara empezó a ponerse roja además de experimentar un extraño calor, era una suerte que Dayana no estuviera ahí para verlo, por su parte ella simplemente arrugo la frente
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124. Coincidencia
Al día siguiente desde muy temprano tanto Alexander como Dayana empezaron el día un tanto ocupados, era el día del evento de aniversario del grupo Escalante y un día con final triste para Dayana. Alexander ya estaba en el estacionamiento subterráneo al lado del elevador del edificio de Dayana esperando por ella, el vestía un elegante traje completo con chaleco y abrigo negro, debajo una camisa blanca y se había puesto una corbata azul rey, estaba perfectamente peinado ansioso por ver a la mujer que saldría del elevador. — ¿Como me veo? .– Alexander preguntó nervioso, se acercó a su auto al lado de la ventana del conducto donde estaban sus escoltas esperando para llevarlos. — Se mira irresistible señor, casi me enamoro de usted.Alexander le dio un ligero golpe a Scott en la cabeza, Scott y él otro escolta Mark comenzaron a reír divertidos, de repente las puertas del ascensor se escucharon, Alexander se giró rápidamente, para quedar totalmente sorprendido por lo que veían sus ojos..
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125. Última oportunidad
En el sobre de la invitación venía dentro otro sobre con la invitación y atrás de este una tarjeta con el código de vestimenta, cuando Alexander recibió el sobre lo abrió ya que tenía la curiosidad de si en verdad su madre mandó hacer la invitación de Dayana especial mente para ella con su nombre y así fue más sin embrago olvidó darle la otra tarjeta que tenía el código. En ella se especificaba que el tono azul obscuro sería solo de los anfitriones de la fiesta, los principales socios de la empresa y sus parejas, todo mundo sabía que los tonos parecidos a ese estaban prohibidos para todos los demás y para Esmeralda fue una desagradable sorpresa ver que Dayana estaba invitada a esa fiesta además de llevar un vestido azul rey que para aumentar su molestia se le veían fenomenal.— No puedo creer que una completa extraña te hubiera ganado a Alexander a ti que supuestamente tenías ventaja por ser su ex novia...– La voz dura y distante de un hombre hizo a Esmeralda voltear, era su padre qu
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126. Noche de sorpresas
Esmeralda estaba en la entrada en la espera de que Oliver llegara ya que le había dicho que estaba cerca, un bonito auto blanco de lujo se estacionó en la entrada del cuál salió un hombre alto, de cabello rojizo y ojos grisáceos, llevaba un traje completamente negro con corbata roja, Esmeralda se quedó completamente impresionada al ver como con ese traje paso se ser un vándalo a parecer hombre respetable y hasta cierto punto atractivo.— ¿Y bien como me veo? .– Oliver le dio las llaves del auto al Valet y se fue con Esmeralda .— ¿De dónde sacaste ese auto? ¿¡Lo robaste?!A ella lo que le llamaba la atención era como ese hombre le hizo para llegar con un auto ultimo modelo; si lo había robado y lo estaban buscando se crearía todo un alboroto en la fiesta y ahora si sus padres la matarían.— Lo rente cálmate — Bueno, vamos dentro el banquete esta a punto de empezar.Esmeralda tomó la mano de Oliver, él sonrió divertido y se mordió los labios, al llegar dentro se quedó impresionado por
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127. Curiosidad
Dayana no podía creer lo que estaba viendo, su padre estaba en la pantalla de Georgina la madre de Alexander en una video llamada. "¿¡Se conocen?!"— Ohh... ¡¡¡No puedo creerlo Antonio ella es tu hija???!!!Georgina se puso de pie y fue directo a un lado de Dayana para que ambas pudieran salir en la pantalla, Dayana no entendía nada y estaba muy impresionada. — Así es, ella es mi hija mayor Dayana y tengo un hijo más pequeño Leonel... ¿El esta en la fiesta también? — No.. él... tenía planes con su novia... .– Dayana inventó cualquier cosa para despistar, no quería dar razones para que sus padres lo buscaran y se dieran cuenta del mal estado en que se encontraba por culpa de Amanda. — Y ustedes... ¿Como se conocen? .– el padre de Dayana tenía tanta curiosidad por saber.— Dayana es amiga de mi hijo Alexander ¿Te acuerdas de él? — Aa si claro... tenía unos 22 años cuando lo conocí... — Ya es todo un hombre mi muchacho, que rápido pasan los años dentro de poco cumple 36 años...— E
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128. Despedida
Tanto Dayana como Oliver se miraban fijamente de una manera muy seria, Dayana se debatía entre acceder o no, porque al final de cuentas el hombre frente a ella parecía ser un mentiroso profesional, podría tratarse de una trampa solamente. — ¿Porque te tendria que creer?Oliver se puso de pie, bajó la mirada para ver a Dayana fijamente a los ojos, no podía negar que tenían un color precioso e inusual, más sin embrago el temperamento de esa mujer era fuerte y complicado, podría ser toda una belleza pero no era alguien a quien podía tomar a la ligera, engañarla no sería fácil y tratar de enamorarla para fingir tener una relación y cobrar su dinero no era una opción le preocupaban las represalias que esa mujer fuera a tomar en su contra, por que se le notaba que no era una mujer de las que se quedan con los brazos cruzados tras ser utilizadas.Oliver a pesar de estar de espaldas se dio cuenta que alguien se acercaba, al ser un vándalo profesional desarrollo unos sentidos muy agudos que m
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129. "No quiero quemarme"
Dayana no podía más con el pesar que la afligia, su pecho cada vez se sentía más apretado hasta el punto de sentirse asfixiada, se dio la vuelta para marcharse pero Alexander reaccionó rápidamente, la tomó de la muñeca para evitar que ella se marchara. — Espera... ¿Que? ¿Estás hablando en serio Dayana?.– Él no podía creerlo, esperaba que tan solo se trata de una broma... una broma de muy mal gusto; Dayana se giró para quedar frente a él, mentalizandose para lo que se venía y llenándose de una fortaleza que claramente no tenía.— ¿Te parece acaso algo con lo cuál se pueda bromear? Ella estaba completamente seria, con la mirada fría e inexpresiva, su voz neutral y algo baja, Alexander se teletransporto a aquel entonces en donde apenas y se conocían, cuando ella se portaba con el de esa manera tan distante e indiferente, en ese entonces donde no eran más que un par de extraños... el interior de Alexander se llenó de pánico, no quería perderla bajo ningún motivo, no después de recordar
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130. Un duro adiós
Los ojos de Dayana se enrrojecieron al punto de casi sacar lágrimas, ella bajó la cabeza recordando que llevaba maquillaje y el pensar que este se arruinaría si lloraba fue su motivo para evitar hacerlo, se llevó la mano a la frente apenada y sin dar crédito a lo que acababa de hacer. Alexander por su parte le observaba con seriedad y creciente dolor, siempre sospechó que ella se resistía a enamorarse por una razón y esa era porque su corazón estaba herido de una manera tan profunda que temía resultar herida. A lo largo de la vida se lidian con constantes decepciones, a pesar de sufrir uno se aventura a intentarlo de nuevo aunque se tenga miedo e incertidumbre en el interior; mirar a Dayana de esa manera lo hacia sentir devastado por el simple echo de pensar en que tanto debió sufrir por amor para que su miedo llegara hasta ese punto de impedirle intentar nuevamente. Él era consciente que llegó a causar daño a algunas mujeres cuando pidieron tener algo más con él que una simple ave
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