—¡ANASTASIA!Arthur la tomó entre sus brazos y el cochero le ayudó a subirla al carruaje, pero antes de partir, le ordenó a uno de sus lacayos que fuera en busca del doctor Johnson y lo llevara a casa de Angus Roche, a lo que el joven asintió y salió corriendo en dirección a la residencia del mencionado médico.Le tocó la frente y negó, estaba ardiendo, su cuerpo temblaba y los labios comenzaban a resecarse.—No…Susurró ella, probablemente estaba al borde de la agonía y esto le preocupó considerablemente y temía por la reacción de su amigo Arlen. Esa noche había quedado en reunirse con ellos para jugar cartas, pero no quería dejar a Teodora sola en compañía de Máximo, a lo que ella le dijo que se fuera con cuidado, así que más tranquilo partió de casa.Estaban reunidos en la sala, Angus Roche, Lady Bernarda, Arlen y la tía Brígida quien había llegado de Cornwall. Estos dos últimos jugaban ajedrez y la anciana iba ganando la partida.—Eres pésimo Arlen — se burló la mujer — Jaque a tu
Leer más