Dos semanas después….—¡Harry, Harry! Por favor abre la puerta, no puedes seguir así.El príncipe Harry no quiere salir, en realidad no quiere seguir viviendo en un mundo dónde su amada ya no existe. Esta desecho, no sabe cómo seguir con su vida.—¡Dios mío! Porque te la llevaste, cómo se supone que voy a seguir sin ella.La reina toca un par de veces, y al ver que su hijo no responde, le dice a una mucama:—Ve por alguien para que abra la puerta, pero date prisa.Aproximadamente 10 minutos después, llega la mucama, con un hombre para abrir la puerta, no tarda en abrirla. Entra la reina, y ve a su hijo demacrado, con la barba más larga, desarreglado, por lo que ve a estado bebiendo, su recámara está deshecha. La reina nunca se imaginó ver de este modo a su hijo, verlo así le parte el alma.—Harry por favor, escúchame: ¡No puedes seguir de esta manera! Sé que estás sufriendo, pero a Kate no le gustaría verte de esta forma.—Cómo lo sabes madre ¡KATE ESTÁ MUERTA! Y sabes es mi culpa, yo

Camino lo más rápido qué puedo, hasta que perdemos al Vizconde, nos metemos a una botica, y nos quedamos un buen rato allí, estoy demasiado nerviosa.—Kate respira, y trata de tranquilizarte, eso no le hace bien al bebé—me dice Emi.—Emi, me vio y si le dice a Harry, todos estaremos en peligro, y nada de esto habrá valido la pena.—Kate, no está seguro que eres tú, a mí no me vio, así que tranquila.—¿Qué pasa Kate?, ¿Quién era ese hombre?—pregunta Freya, con cara de preocupación.—Freya es una historia muy complicada, te juro que te la contaré algún día.—Ok, no es nada grave, ¿Verdad?—Es complicado. Por favor no le vayas a decir nada a tu madre.—Está bien, guardaré el secreto, pero sabes que puedes contar con nosotros.—Lo sé.La señora de la botica nos pregunta, si vamos a comprar algo, y nos vemos obligadas a comprar un par de cosas. Decidimos salir y mis piernas me siguen temblando, respiro bien hasta que estamos en el carruaje. Llegamos a la casa, y me siento un poco mal.—Ven

4 meses después…Se siente una atmósfera de tristeza, la reina Elizabeth se encuentra inconsolable, ya que el rey ha muerto, nadie entiende cómo paso tal desgracia, sé suponía que el rey había estado mejorando los últimos meses.El doctor dice que: Su corazón fallo, debido a su edad, y a la enfermedad que lo aquejo por muchos años.Están en la ceremonia de velación, todos los presentes están afligidos, y con incertidumbre, porque no saben que pasará con Inglaterra. Se supone que por línea de sucesión el príncipe Harry debería ser el rey, pero todos temen que el rey Francis, reclame el reino de Inglaterra.Todos saben que los franceses, solo apoyaran a Harry, si tiene un heredero con la princesa Francesca.❤️Kate estoy sentada en mi cama, tratando de dormir estoy en mi último mes de embarazo, y mi pequeño ha crecido bastante, estoy en esta posición porque acostada a veces siento que me ahogo, siento que mi hermoso bebé me patea, a decir verdad ha estado muy inquieto.—¡Mi amor! Tranqu

4 años después….Estos últimos cuatro años, han sido de gran aprendizaje, he crecido mucho cómo persona, me gusta en la Kate que me he convertido, aunque sigo amando a Harry, y lo extraño mucho, el recuerdo de su amor, y nuestro pequeño Thomas han sido el motor de mi vida.—¡Mami, Mami! Quiero más chocolate, y tía Emi no me quiere dar más, dile mami, que me da más—dice mi pequeño con lágrimas en los ojos.—¡Amor! Ya es tarde, y sabes muy bien que no puedes comer tanto chocolate.—Pero mami.—Nada mi niño, ven vamos a darte un baño.—Mmm… No quiero, estoy enojado—, me dice con un puchero.—Así—, lo levanto y le doy muchos besos.Mi pequeño es tan parecido a Harry, tiene sus mismos ojos, su cabello cobrizo y esa sonrisa encantadora, y no se diga en el carácter, son iguales de tercos.La bajo, y lo tomo de su pequeña manita. Llegamos a la recámara, lo siento en la cama.—Espérame aquí, voy a arreglar tu baño.—Si mamiTermino de acomodar todo, y voy por mi pequeño.—Todo está listo, anda

Al escuchar lo que dijo el médico, Lady Annie no puedo evitar que la rabia se apodere de ella, ha esperado tantos años, para estar con el ahora rey Harry, y ser su reina. Que no puede permitir que eso pase.—Su majestad, no cree que está exagerando. Debe haber otra opción. Usted no puede irse y dejar a Inglaterra sola.—Lady Annie, no estoy pidiendo su opinión, no voy a dejar que la madre de mi hija muera, sin hacer nada.—Pero…—Nada lady Annie, voy a hacer los preparativos, para salir mañana a primera hora.—Ok… Arreglaré mis casas para irnos.—No, Lady Annie, usted no va.—¡¿Cómo que no voy?! La reina me puede necesitar.—No se preocupe por eso, llevaré un par de sirvientes, que se encarguen de ella, y de mi pequeña.—Su Majestad, sé que llevaran a sus sirvientes, sin embargo, quiero apoyar a la reina, ella es mi amiga.—Lady Annie, sé que es su amiga, pero está ocasión es mejor que permanezca aquí. Me retiro tengo muchas cosas que hacer.El rey Harry se retira, dejando a Lady Anni

Salgo despavorida, jamás en su vida pensé que esto pudiera pasar, esto debe ser: ¡Una broma muy cruel del destino! Es como si la vida se estuviera burlando de mí.Decido irme en un carruaje para la panadería, no quiero que alguien me vea. Corro hasta los carruajes y de inmediato me subo a uno, estando adentro empiezo a sudar frío, siento una corriente por todo mi cuerpo. ¿Por qué me pasan estas cosas a mí? Si se entera de que estoy viva, no quiero ni imaginarme que pasará, lo mejor es que me vaya unos días con Amelia, mientras se marcha. No puedo permitir que se entere de que estoy viva, y que tengo un hijo suyo, no puedo arriesgar a mi pequeño, y a mi familia.—¡Señorita, Señorita! Hemos llegado—dice el conductor sacándome de mis pensamientos.—Gracias—, le pago y me bajo temblando. Entro, y enseguida siento que todo me da vueltas. De inmediato mi hermano corre hasta mí, y me sostiene.—¿Qué pasó Kate?—James, lo vi, está aquí.—¿De quién estás hablando?—De Harry, está aquí. No sé c

El rey Harry se queda paralizado, su cuerpo no le responde, ve cómo Lady Kate, se va en un carruaje, todo pasa lento como en un sueño. Para cuando reacciona el carruaje, ya está demasiado lejos, corre para alcanzarlo, pero sus intentos son inútiles.—¡No puede ser! Tengo que estar seguro de que es ella, y ese niño. ¿Será mío? Si eres tú Kate Hamilton, ¡Juro que nadie te podrá salvar de mí!, ¡Cómo pudiste hacerme eso!—dice con rabia.Trata de calmarse, tiene tantos sentimientos encontrados, no sabe que hacer, nuevamente Lady Kate, ha puesto su mundo de cabeza.Regresa rápidamente al hospital, necesita confirmar, si es Lady Kate, corre desesperadamente, él cree que la mujer de quién le hablo Christopher, es ella. Cuando llega, su hombre de confianza Sr. Vincent lo ve, y le pregunta:—Su Majestad, ¿Qué pasa?—Esta viva Vincent—dice el rey sin aliento.—¿De quién habla su Majestad?—De Kate.—¡Eso es imposible!—La vi, con un pequeño. Pero necesito 100 porciento seguro.Entra al hospital,

Estoy viviendo uno de mis peores sueños, el ver qué el hombre que amo me odia, y creo que no culpo yo estaría igual si fuera al revés, solo espero que me escuche.—¿Podemos hablar en privado? Por favor—digo con hilo de voz, y con la cabeza agachada.—¿Qué me vas a decir? Que viste la cara de imbécil, dile a tu amante, como fingiste tu muerte—dice gritando.Levanto mi rostro, y está rojo del coraje, y si sus ojos matarán, ya estaría muerta.—Su majestad, no sé que está pasando, pero le puedo afirmar que Kate y yo, no somos amantes, solamente somos buenos amigos, por favor cálmense.—Calmarme, si está maldita mujer, es el ser más despreciable que he conocido en toda mi vida.Únicamente escucho lo que me dice, no puede hablar, estoy en shock.—Di algo, no te quedes callada, dime: ¿Por qué lo hiciste?—, se acerca, y retrocedo.En eso bajan todos las escaleras.—¿Qué está pasando aquí?—dice la señora Clarise.Harry se acerca, y me toma de la muñeca.—¡Suelta a mi hermana Harry!—dice James.

Una semana después…Estoy desesperada, no quiero regresar a Inglaterra. Cómo me gustaría que nada de esto fuera realidad.—¡Maldición! Sin tan solo ese maldito arrogante, entendiera el peligro que corre su hijo—, camino de un lado a otro en mi recámara, creo que le voy a hacer un hoyo al piso. Nunca pensé decir esto: —¡Cómo te odio Harry!Tocan a mi puerta.—Adelante—digo, supongo que en mi voz refleja mi desesperación.—¡Hija!, ¿Cómo estás?—Mal señora Clarise, no quiero irme, eso va a ser un caos.—Lo sé, pero quizás cuando estés allá, puedas cerrar, esta etapa de tu vida. Y volver a empezar, sin mentiras.—No lo sé, temo por el bienestar de mi hijo, y de mi familia. Estoy como al principio, no supongo que peor. Ese Malnacido me hará la vida difícil.—Considero que solo es un hombre dolido. Eso no justifica como te ha tratado, pero dale tiempo verás, que cuando todo ese enojo se le baje, verá por qué hiciste todo esto—¡Tiempo! Con ese hombre, siempre he tenido que esperar, y si nun

Subimos al navío, y puedo ver a lo lejos a una mujer, cargando a un bebé, en seguida sé, que trata de un hijo o hija de Harry, quisiera que no me doliera, pero duele, y mucho. Giro mi cara hacia otro lado.—¡¿Su esposa vendrá en este navío?! Espero que no sea tan maldito para ser eso. Pero si el bebé está aquí, posiblemente es así. ¡Eres un ser despreciable Harry!—pienso.Lo miro con odio, y me voy con mi pequeño, y un sirviente que nos guía a nuestro camarote, es muy bonito, y grande, para nada es como el que viaje cuando me vine a América.Acuesto a mi pequeño Thomas, y puedo ver qué hay una canasta de fruta, y una charola, llena de comida, me acerco, y es un mi comida favorita.Se abre la puerta de mi camarote, y es él: Harry—¿Qué hace aquí su Majestad? No debería estar aquí, podrían creer otra cosa.—De cuando acá te importa eso, recuerdo que pocas veces te importaba lo que la gente opinará de ti.—Las personas cambian su Majestad, algunas para bien, ¡Y OTRAS PARA MAL!—, hago énf