De todos los momentos vergonzosos de mi vida, este era el que más deseaba desaparecer en el acto.Mis manos sudaban, mi cara ardía, el aire no llegaba a mis pulmones....Habrá pasado solo un segundo desde que Nathan abrió los ojos, pero lo sentí eterno. Tenía la sensación de que mis latidos era lo único que se escuchaba en todo el living. Inmediatamente quise alejarme de él, sin embargo, una mano en mi nuca detuvo mi movimiento. Y antes de que entendiera lo que había sucedido, nuestras bocas se unieron nuevamente. Sin ser consciente moví hacia atrás la cabeza y lo que conseguí fue un beso aún más intenso. Nathan al notar que ya no me resistía, pasó su mano de mi nuca hacia mi rostro.Del susto, a la

Ha pasado una semana y tres días sin noticias de Nathan, ni siquiera un mensaje. Había dicho que sólo faltaría la semana anterior, pero no creí que la siguiente también y mucho menos que se iba a desconectar del mundo.-¿Le habrá pasado algo? No...no lo creo, de lo contrario su primo Dylan no actuaría como de costumbre...-me dije.-¡ ¿Entonces me está evitando?!-pasó por mi mente.-¿Qué haces Lexi?-apareció Lana de la nada.-Na...nada.-me asusté.-Solo sentada aquí en el patio.-Y pensando en Nathan.-agregó ella. (͠≖◞≖)-N...no es cierto.-baje la cabeza.-Eres mala mintiendo.-se río ella.-¿Sin noticias de nu

-Yo...yo....-no sabía qué responder.Nathan hacía un esfuerzo por contener sus risas al verme tan colorada.-Duérmete.-evité su mirada.Lo que provocó que finalmente se riera y me abrazó aún más fuerte.-¿Mi novia tiene vergüenza?-apoyó suavemente su frente contra la mía.-N..no..no es cierto.-contesté aún sin levantar la vista.Sin embargo, él continuó riendo. Entonces me alejé de él y tapé sus ojos. Sus pestañas parpadeando cosquillean mi mano y.....mi corazón.-Due...duerme.-repetí.-Solo porque mi novia lo dice.-¿Por qué tenía que ser TAN LINDO?- grit&eacu

Ahora era más tomate que un tomate.Apostaría cualquier cosa que sin importar chico o chica, nadie se resistirá a esa mirada y a aquellas palabras.-Yo...yo...-tengo hambre.-solté.-Ven.-se rió ligeramente y tomó mi mano.Salimos de aquella carpa.El mar de estrellas iluminaba la noche haciendo juego con las flores del jardín.Volteé para ver aquella carpa.-¿Enserio has hecho esto en un día?-volví la mirada hacia él.-Con algo de ayuda.-admitió.-¿

NARRACIÓN EXTRAAl día siguiente, luego de terminar la última clase,Nathan se dirigió al gimnasio, en donde las chicas del último año acababan su entrenamiento.-¿Ese no es Nathan Moon?-preguntó una de las chicas populares.-¿Qué hace aquí?-dice otra del grupo.-¿Soy yo o esta cada vez más sexy?-se mordió los labios.La primera de ellas enseguida camina hacia él, al ver que se aproximaba.-¿Buscas a alguien en especial, guapo?-coqueteó.-¿Dónde está Tania Cooper?-dijo indiferente.Nunca le gustó lidiar con chicas hormonadas.-Quítense perras.-apareció Tania atrás de todo.-Me busca a mí.-con su sonrisa satisfactoria.

-Mírate.-me estalle de risa.-Pareces haber visto un fantasma. ¿Asusto tanto?-seguí bromeando.Me dió mucha gracia la reacción de Nathan.-¿Enserio no estás enojada?-dijo cuidadosamente.-Estaba bromeando contigo.-aseguré.-Te lo mereces por haberlo ocultado todo este tiempo.-justifique.Esto fue lo que había ocurrido: Al desenmascarar su identidad, fingí estar enojada aprovechando que no había nadie en el pasillo. Sin embargo, la actuación solo me duró unos segundos, porque al rato no me aguanté la risa. A pesar de haber confesado que estaba jugando con él, aún seguía con sus dudas, incluso cuando llegamos a mi departamento.Leer más