Rafael la abrazo y la besaba apasionadamente, ella sabía sus intenciones, así que lo alejó. “Detente Rafael, estoy cansada, además Bertha se sintió mal hoy, deberías ir a examinarla”. Rafael se alejó mirándola a los ojos, asustado camino hacia el despacho y saco su botiquín para salir de la mansión rumbo a la casa de los empleados. Aurora solo respiro profundamente, Rafael estaba incontrolable estos días. Después de revisar a Bertha, regreso a la habitación, Aurora estaba terminando de bañarse, salió con su bata secándose el cabello con una toalla, el olor a su fragancia de baño ocupaba toda la habitación, Rafael se acerco a ella con las plenas intenciones de llevarla a la cama, pero ella se negó. “Vamos a dormir Rafael estoy realmente cansada hoy”. El la dejo para darse una ducha y al salir ella ya estaba dormida de lado en la cama, el seco su cabello y se acostó arrastrándola para abrazarla, necesitaba desesperadamente el contacto con su piel. Al dí
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