Capítulo 97“Dónde siempre hay amor”Entraron corriendo al cuarto de Elizabeth y Lois Vincents tenía su cuerpo abrazado mientras lloraba. –Mamá –Gritó Missie. Y Lois Vincents movió su cabeza negativamente.Missie corrió y se abrazó a su padre, juntos tenían en medio el cuerpo de Elizabeth Leanders, Missie como la madre maravillosa que le tocó tener, Lois Vincents, como la madre de su hija y la mujer que amo como a ninguna otra. Después de mucho rato Juanne levantó a Missie y Loís recostó en la cama el cuerpo sin vida de la bella Elizabeth Leanders. Dos días después sus cenizas fueron esparcidas en medio de las aguas del río Misisipi, afluente que ella defendió siempre y para el cual hizo innumerables campañas de limpieza y purificación de sus aguas para los habitantes de los lugares aledaños. Missie y Juanne junto con los niños regresaron al rancho después de pasar una larga temporada en la Villa de los Vincents en Luisiana. –Naty y Lois, si quieren quedarse en la villa pueden
Leer más