A finales de enero las personas que se hicieron pasar como los técnicos de mantenimiento ya se encontraban tras las rejas, pagando una condena por quince años. Por su parte Bruce presento la demanda con los atenuantes que Melody le dio en contra de Denisse, lo que agrando la estadía de esta última en la cárcel.Con apoyo del Club de Toby, lograron conseguir que Denisse estuviera aislada una temporada y que la comida fuera reducida en un 60%. Nadie se metía con ellos sin que pagara las consecuencias. No solo era lo que había pasado en el hotel, si no el daño que causo a las personas que estaban en la cocina, eso sino lo perdonarían.Por su parte Kiya a través de sus habilidades de hacker movió los antecedentes de Denisse, por lo que fue trasladada al área de personas asesinas y peligrosas dentro de la cárcel. Lo que la llevo a tener problemas en la nueva área donde se encon

Más que una oficina parecía el terreno de una batalla campal, donde la lucha era todos contra todos, ninguno de los cuatro quería ceder, ni retirarse de aquel lugar. Los ojos de Daniel se clavaron en “K” retándola a bajar la mirada o salir de la oficina, pero no esperaba que ella fuera igual o peor que él al mirarlo directamente con una sonrisa que lo dejo idiotizado (más de lo que ya estaba).Esa sonrisa que lo atormentaba todos los días dormido o despierto, pero que no lograba relacionarlas por nada del mundo, si alguien le dijera que ambas sonrisas era de la misma persona, seguramente lo internaría en el psiquiatra, sin derecho a visitas.Por su parte Bruce se encontraba molesto mirando a la nada, por desconocer que había sido hackeado durante tanto tiempo, esto podría tener a la cadena hotelera en peligro, miro a Melody que tenía una sonrisa en sus labios al ver la cara que Dan

La primera semana de febrero fue un caos total para Bruce, “K” estuvo trabajando en sus oficinas para verificar todas y cada una de las computadoras que tenían acceso a la red, así como la red de los clientes. Se instalaron nuevos sistemas que funcionaban como máquinas virtuales o servidores que impedía al resto de las personas obtener información privilegiada.“K” logro obtener la dirección IP de la máquina que estaba robando la información del hotel, obtuvo también información de las personas a cargo y de todo aquello que pudiera servir al momento de la demanda. Como viejo lobo de mar en las andadas “K” pudo obtener más que eso en tan solo algunos días. Si iba ayudar a su enemigo, era por ayudar a su amiga. Ya se un poco enredado pero así era eso.Daniel: Dime que la vas a invitar a la reunión de mañana.

-Vaya nunca te había visto tan sonriente Daniel– comento Caleb -¿Qué es lo que tramas?, dinos para salir corriendo con tiempo.-Andrew, ¿Creo que tú hermano no se siente bien?, hay que llevarlo al doctor, no es normal la reacción que está teniendo. Esta como si nada después de perder la carrera de nuevo- dijo Said.Aunque Daniel ya había bajado de su coche, no fue directo a donde estaban sus amigos, si no al coche donde se encontraba “K” y su amiga Melody. Eso no eran buenas noticias, aquellos dos juntos era una bomba de tiempo. Era tiempo de alejarlos antes de que un nuevo problema les alcanzara.El Príncipe y Boni estaban más que felices por los resultados, una vez más “K” había pateado el trasero de un hombre, en este caso Daniel era el enemigo jurado de ellos, eso no podían olvidarlo todavía se las tenían reservadas. E

Quitado de la pena Daniel toma de la mano a “K”, para ayudarla a subir al coche, saliendo sin rumbo fijo. Solo él sabe lo que tiene en mente estos momentos, mientras que el resto no saben que decir o que hacer ante aquel arrebato.-No has dicho una sola palabra desde que salimos de la Plataforma- dijo Daniel con precaución. Tanta sumisión en ella no era normal, era mejor tantear el terreno.-No hablo con la basura- respondió Kiya, quitada de la pena.-Te guste o no lo vas a tener que hacer princesita, te recuerdo que tú vida está en mis manos a partir de ahora, si no quieres que el tío Kurt, mejor dicho mi suegro hermoso se entere de donde está su nena y que hace por las noches- dijo Daniel.-No sabes cómo tiemblo de la emoción, por mi puedes hacer lo que se te pega la regalada gana, si no te alcanza puedes ir al bosque y perderte, pero como eres tan pero tan idiota que no s

Los minutos pasaban, pareciendo indicar que por lo menos, pasarían el fin de semana encerrados en la cabaña, alejados de la ciudad. En este momento tendrían tiempo de hablar y poder arreglar la diferencia del pasado.El único inconveniente era que ella no quería escucharlo, no veía la necesidad de revivir algo que había olvidado desde que paso o por lo menos era lo que ella pensaba. Más bien el miedo la invadía. ¿Y si lo que paso fue producto de su imaginación? Ahora como enfrentaría las cosas con él.Kiya quería estar sola, pero en aquel lugar era imposible. El frío se intensificaba y ninguno de los dos contaba con la vestimenta para soportar. Como parte de la tregua decidieron buscar ropa más abrigada que los protegiera de la nevada, aun dentro de la cabaña.Había sido una noche larga para ellos, ninguno de los dos quería cambiar

Nada estaba escrito, era tiempo de que las cosas marcharan como debió de ser. Aunque el tiempo pase ella era su hermana, no dejaría que se madre la alejara de nuevo, aunque para ello recurriera a los papas de Kiya y Daniel, el bienestar de Melody estaba primero. Mucho menos ahora que gracias a “K” se enteró de que su madre no era la blanca paloma como pensaba.Conto a Melody lo poco que el sabia hasta ese momento, prometió darle lo que le correspondía, pero primero encontraría a la persona que estaba de tras de todo lo que estaba pasando, aunque fuera su propia madre, no se detendría, la haría pagar por espionaje y todo lo que se pudiera, ella nunca más las lastimaría. Su hermana se merecía una vida tranquila, de eso estaba seguro, la ayudaría a que eso pasara.Ambos lograron contar lo poco o mucho que sabían respecto al tema, eran muy pequeños cuando todo suce

Dos días después la nevada calmo, permitiendo llegar a la cabaña sin contratiempo. Como madre la Sra. Elena sabía que su hija no la estaba pasando nada bien, era testaruda y necia al igual que su padre, provocando un caos a su lado porque nunca le gusta aceptar que puede equivocarse, esta vez Kiya lo estaba, solo faltaba ver que lo reconociera ante Daniel, algo que veía muuuuuy difícil.Era tiempo de que ese par se enfrentara a sus padres, sobre todo Daniel que tenía muchas cosas que explicar por lo que hizo. El Sr. Leandro no estaba del todo seguro que su hijo convenciera a Kiya sobre el pasado, no es que no confiara en él, conocía a la perfección la necedad de ella.-Debemos darnos prisa, mi corazón me dice que las cosas no están bien- dijo la Sra. Elena.-Tranquila amor, ella está segura con Danielito. No le va hacer nada malo, es nuestra pequeña y su muñe

En un bar de la Ciudad de México, Daniel estaba ahogando sus penas al pensar en Kiya. Ella llenaba todo lo que necesitaba, de nuevo lo había echado a perder, por su arrogancia, en lugar de hablar con ella desde el inicio, se dejó llevar por ese juego absurdo, cuando descubrió que “K” y Kiya eran la misma persona.Caleb que había dado con su paradero, gracias a unos amigos que hizo en una de las tantas veces que fue a visitarlo. Desde ese día lo había seguido para hacerlo entrar en razón, pero todo era imposible. Del chico carismático ya no quedaba casi nada, se la pasaba borracho en los bares.-¿Dónde está?- pegunto Caleb a su amigo.-Por allá, lleva muchos días de la misma manera, nos hemos acercado pero no quiere estar con nadie- dijo su amigo.-Gracias, te agradezco mucho que me informara- dijo Caleb. –Yo me hare cargo-Camino a do

Tres días después que llegaran a la Ciudad de México, los pleitos entre Daniel y Kiya no paraban. Ella estaba poniendo todo de su parte para no pelear, pero él, no se la ponía nada fácil. Los papeles se habían invertido en tan poco tiempo, ahora era ella la que no estaba dispuesta a dejarlo ir.-En vista de que no se piensan marchar, el que se va soy yo- dijo Daniel. –Espero que cuando regrese ya no estén en mi departamento--No pienso irme, así que puedes decir una misa completa y los rosarios que quieras- respondió Kiya cruzada de brazos. –Tampoco saldrás de la casa sin mí, no dejare que regreses al Bar a ver a tus amiguitas, no creas que no estoy enterada de todo lo que has hecho durante este tiempo y me quitas esos ojos en blanco porque hablo muy en serio--No eres mi mamá para prohibirme nada, ni tampoco mi niñera, así que con permiso se&ntil