2 años después… La luz blanca golpea mi rostro, es inevitable que el sol no lo haga. Tengo mis ojos aun rojos de tanto recordar. Es algo común últimamente, la vida es esos momentos que te sorprende de una u otra manera y solo te queda vivir aquello que te recuerda eventualmente tu mente.Voy y ordeno un poco mi cabello, cepillo mis dientes y decido que es momento de realmente hacer algo para comer, cuando me desperté estaba sola, algunas veces puede que no, otras veces suele ser así. Te abrazas a la almohada con la esperanzan de que aparezca y te enrolle en sus brazos de una forma que nunca se aparte, que nunca se aleje, que nunca se vaya.Querer besos llenando mi rostro y caricias al despertar. El pasillo se ha vuelto más claro últimamente, quizás un poco de tonalidades oscuras estaría bien, pero no quiero. Me recordarían
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