me dejaste

Jane creía que Liam era el hombre perfecto para su vida; era romántico y comprensible, a la medida. Era esa clase de hombre que cualquier mujer desearía para el matrimonio, hasta que una confesión lo cambió todo y él se cayó del pedestal en el que ella lo había sostenido. —Ya no te amo, me enamoré de otra, no quiero estar contigo, ahora la quiero a ella.

—A donde quiera que vaya, iras conmigo, en donde quiera que esté, estarás conmigo, a donde sea que vayas, me llevaras contigo, estarás siempre dispuesta para mí A partir de hoy, eres solo mía... —Entonces podría decir que también eres mío — Dije desafiante —No me retes, sabes perfectamente que soy el que tiene el control —¿El control? Usted solo es mi jefe, uno muy posesivo, por cierto...

Assim que ela se levanta frustrada para ir embora, uma mulher quase enlouquecida com os cabelos desgrenhados entra na sala sem nem mesmo bater. — senhor Alessandro! Eu me demito! — brada mexendo no cabelo tirando alguns bichos estranhos de brinquedo. — senhora Raya, vamos conversar, você disse isso antes, mas acredito que dessa vez você consiga — Suplica ele enquanto Lúcia observa os dois, mas ele a encara duramente e ela entende que deve ir embora. Assim que sai tomba com as duas crianças acompanhadas pela Governanta, aparentemente tem cinco anos, ambas iguais, com os braços cruzados se mantêm emburradas. Quando seus olhares se encontram eles sorriem encantados — A nossa mãe nos sonhos? — perguntou o menino hipnotizado. — sim! — confirma a menina abraçando Lúcia que sentiu como se tivesse levado um choque na cabeça, e piorou quando o menino também a abraçou, seu coração acelerou de uma tal forma que pensou que passaria mal, e todos os funcionários a encarava em alerta indicando que ela saísse dali, mas ela não conseguia se livrar das crianças. Quando Alessandro saiu e viu a cena ficou enfurecido. — Como podem agarrar estranhos por aí? — briga. — não é estranha, é a nossa mãe! — protesta a menina. — kayla! — brada aborrecido, mas os meninos se prendem com força a Lúcia que permanece imóvel olhando as duas crianças. — mamãe, diga a ele que você é nossa mãe… — Resmunga a menina. — Não se preocupe, nosso pai vai entender quando eu negociar — Leandro… — resmunga. — Eu e kay aceitamos ela como nossa mãe, babá, governanta, como você quiser, se contratar ela, nós paramos de fazer birra — disse o menino deixando seu pai pensativo encarando Lúcia, sério, ainda tendo a impressão de já tê-la visto.

- Quem é você? - a voz grossa enche os ouvidos da jovem mulher, assustando-a, e inconscientemente seu corpo inteiro treme de medo, é definitivamente ele, é o assassino. "Ele veio para me matar! - grita a voz interior da jovem garota. Mas sem abrir mão da carne, começa a correr, olha para trás e ele a segue. "Não tenho outra escolha" — pensa e se transforma, Occisor imediatamente para de correr e observa a loba enorme a sua frente. "Ela não é uma ômega, as cicatrizes devem ser de batalhas que ela ganhou, mas essa pelagem, nunca vi antes igual. Que tipo de loba ela deve ser? O que aquelas manchas vermelhas querem dizer?" — se questiona em pensamentos e sorrir, para Occisor, aquela será uma caçada interessante.

Ella siempre fue la niña de mis ojos, la princesa de mis cuentos, el amor de mi vida, pero ella nunca me vió con esos ojos, con el paso de los años se hizo una mujer hermosa, y yo como un al saber que no era correspondido empecé a comportarme como un verdadero desgraciado, sabía que algún día podría quitarme todo el dolor que me había causado y eso sería vengandome, por lo que cuando se dió la oportunidad la aproveché, sería mi esposa y haría de su vida un infierno. UN ACUERDO, UNA VENGANZA, UN AMOR, ¿CUÁL DE TODAS SERÁ EL QUE LLEGUE HASTA EL FINAL?

Acordo com um barulho do lado de fora do meu quarto, arregalo os olhos ao ver meus pais de joelhos no chão e um homem muito alto com a arma na cabeça dele. Meu pai estava com a expressão de dor no rosto, ele vira seu rosto para o topo da escada, onde nossos olhos se encontram. O mesmo dá um sorriso malicioso, engulo seco na hora. ━ Ali!! ━ Meu pai aponta para mim, fazendo o homem me olhar. ━ Ele pode ser o pagamento para o chefe de vocês. E-E-Ele.... O que? Só que nem deu tempo de pensar direito, o homem pegou meu pulso com força e saiu me arrastando. Olho para os meus pais que sorria, logo as lagrimas se formaram em meus olhos. E-E-Eles... Estão me vendendo? Foi vendido para um Homem pelos meus pais???

— Soy algo que nunca debió nacer. — Soy algo que si digo lo que en verdad es, terminaré muerto. — Ningún alfa u omega querrá estar conmigo. — ¿Qué hice mal para ser un beta? — ¿Qué hice mal para convertirme en el objeto sexual de ese despiadado alfa? — ¿Qué hice mal para enamorarme de la persona que más daño me ha hecho? Desde que tiene uso de la razón, fue llevado a una casa, que parecía ser un orfanato, donde sólo estaban los seres sobrenaturales que se presumía que estaban extintos. Hasta que un día, creyó que había encontrado la luz al final del túnel, y sólo encontró más oscuridad.

Três anos de casamento, que não o comoveram, Luana decidiu se poupar, satisfazer a ele e a sua amada, e se dedicar à sua carreira.-Senhor Matheus, por favor, respeite-se, já estamos divorciados. - Olhando para o homem à sua frente, a expressão da mulher estava fria.O homem olhou para a mulher com um olhar ardente, praticamente arrependido.A mulher que ele achava ser medíocre era na verdade a médica genial que fazia as pessoas a respeitarem, a rainha dos hackers que fazia as pessoas falirem em um dia era ela, e a flor com rosto assustador que fazia as pessoas terem medo dela também era ela...-Depois do divórcio, você chamou minha atenção uma e outra vez, não é porque você quer se reaproximar de mim? Serei misericordioso e lhe darei uma chance de me conquistar. - O homem sorriu carinhosamente.

—Lo lamento, señorita, me temo que solo le queda un mes de vida, tiene una enfermedad incurable, una que me temo que no podemos tratar… Esas fueron las palabras que cambiaron mi vida para siempre Me había esforzado en hacer una reputación perfecta en el correr de los años, era amable, tolerante, un ser de luz que todos amaban, era la persona que los hombres amaban, algunas mujeres odiaban y algunas deseaban en su familia. Todo no más que una actuación, una máscara de la chica perfecta que no era, tantos años invertidos en esa mentira, para nada, ahora tengo solo un mes de vida. Ya que estoy por terminar en este mundo, haré lo que desee. Simplemente, todo lo que quiera, iniciando, con terminar mi compromiso con un aquel hombre promiscuo, y luego de ello, conocer al chico malo que logre enamorarme y me rompa el corazón, antes de que acabe mi único mes de vida, pues ¿Qué no ese el sueño de toda mujer? El mío si…

Recibí un video pornográfico. "¿Te gusta esto?" El hombre que habla en el video es mi esposo, Mark, a quien no había visto durante varios meses. Estaba desnudo, con la camisa y los pantalones esparcidos por el suelo, embistiendo con fuerza contra una mujer cuyo rostro no puedo ver, con pechos grandes y redondos rebotan vigorosamente. Puedo escuchar claramente los sonidos de las bofetadas en el video, mezclados con gemidos y gruñidos lujuriosos. "Sí, sí, fóllame fuerte, cariño", grita la mujer extáticamente en respuesta. "¡Niña traviesa!" Mark se levanta y la da vuelta, dándole palmadas en las nalgas mientras habla. "¡Levanta el culo!" La mujer se ríe, se da la vuelta, balancea las nalgas y se arrodilla en la cama. Siento como si alguien hubiera vertido un balde de agua helada sobre mi cabeza. Ya es bastante triste que mi esposo esté teniendo una aventura, pero lo que es peor es que fue con mi propia hermana, Bella. *** “Quiero divorciarme, Mark”, me repetí por si no me había oído la primera vez, aunque sabía que me había oído claramente. Me miró con el ceño fruncido antes de responder con frialdad: “¡No depende de ti! Estoy muy ocupado, no me hagas perder el tiempo con temas tan aburridos ni intentes atraer mi atención”. Lo último que quería hacer era discutir o pelear con él. “Haré que el abogado te envíe el acuerdo de divorcio”, fue todo lo que dije, con toda la calma que pude. Ni siquiera dijo una palabra más después de eso y simplemente cruzó la puerta frente a la que había estado parado, cerrándola de un portazo. Mis ojos se quedaron en el pomo de la puerta un poco distraídamente antes de sacarme el anillo de bodas del dedo y colocarlo sobre la mesa.