GianniCada vez que trato de ser amable con ella siempre hace algo que me enoje, solo quiero que cuide a las niñas y se preocupe por ellas, ha estado huyendo de ellas como si tuvieran la peste, quizás con las citas al psicólogo y tratar con ellas la hagan ser menos fría y distante.—Bueno vamos que no te van a comer ella son tus hijas también, necesito que me ayudes a cuidarlas ya que aún no he encontrado alguien de confianza que las pueda cuidar mientras yo me dedico al negocio al 100%, tú sabes hay un insecto al cual debo de cazar y desaparecer—Eso hace que ella levante la mirada del suelo y me mire sin entender.— ¿Un insecto dijiste?, creo que no entiendo muy bien a que te refieres o quizás no quiero entender—Ella ahora mira a la enfermera que se está acercando para ayudarla a vestirse para que pueda entrar y ver a las niñas.—No importa quizás cuando te llegue la noticia entiendas, mientras tanto solo preocúpate en ser una madre para ellas hasta que pueda arreglar quien te pued
AlanaEstos meses han sido una completa pesadilla, las niñas no solo lloran cada vez que algo las despierta, cuando trato de vestir a la una la otra se mueve y no me deja terminar con la tarea de vestir a la primera, Carmen me ayuda cuando puede pero debe de seguir con el resto de sus tareas.Enzo mi hermano a veces me ayuda a mecerlas en el coche y que se duerman, lo peor de todo es cuando es la hora de comer, debo darles el pecho, eso es lo más doloroso e incómodo de todo esto, aunque trato de pensar en otras cosas igual siento las ganas de querer sacarlas y que dejen de succionar, pero entiendo que se deben de alimentar.Lo peor de todo es que parece que me gusta la compañía de ellas y mantenerme ocupada, Enzo me ayuda, Carmen también, casi parece que la Alana de antes quiere volver pero es mejor si eso no sucede.— ¿Hermana viste si se durmió la pequeña Cinzia?, ya me duelen los brazos de pasearla—Me inclino un poco cerca del coche y en efecto está dormida.—Sí Enzo, ya puedes des
GianniBote a la basura esa estúpida nota de amenaza y puse un poco más de seguridad en la casa de Alana, en realidad ya es mía pero no le digo eso o me odiará más de lo que ya lo hace.Me estoy bajando del auto y estoy por entrar a la casa cuando recibo una llamada de mi madre.— ¿Qué se te ofrece madre? —Ella jadea con fingida indignación antes de hablar.— ¿Esa es la forma de saludar a la mujer que te dio la vida bebé?, puedes ser un poco más gentil eso no te va a matar—Reprimo responder a eso con mal actitud, pero mi madre se ganó que la trate de esa forma.—Madre dime que es lo que deseas estoy muy ocupado, me dices que quieres o cierro la llamada tú decides cual de las dos será—Ella murmura algo que no logro entender, hasta que se queda un momento en silencio y después me dice que es lo que quiere.Pero dudo que vaya a creer en sus palabras, ellos nos dieron la espalda, bueno mi padre no pero es como si lo hubiera hecho al ponerse de parte de Damiano y de mi madre.—Quiero que v
AlanaNo quiero llegar a la hora de dormir, Gianni me dijo unas cosas que me dejaron sin aliento y algo sonrojada, pero ya me imagino para que lo está haciendo, se acerca la hora de irme y eso me tiene un poco feliz, es por eso que no quiero caer en su trampa. Cinzia deja de comer y es la hora de sacarle los gases, Costanza está tranquila en su cuna jugando con sus manitas, debo reconocer que son hermosas y que si me va a dar algo de pena dejarlas, pero sigo poniendo esa coraza en mi corazón para que no me afecte cuando llegue el momento, no quiero más dolor en mi vida y si sigo con el padre de ellas eso es lo que al final voy a tener, además tengo una venganza que planear pero que no he podido por los diferentes golpes que he venido recibiendo en mi vida.Ellos deben de recibir lo que se merecen eso y mucho más, se merecen todo el dolor y el sufrimiento del mundo, mis planes no salieron como yo esperaba, pasó lo del accidente, el embarazo, todo fue un completo desastre, dejo de mece
GianniLa mande lejos de aquí con las niñas cuando en realidad todo lo que quería era poder ir con ellas, no confío en nadie al 100% pero sé que él no me va a fallar, es de los pocos que aún me son leales y no le informan todo lo que hago a mis padres.— ¡Señor acaban de entrar! Y sí, son ellos, son los hombres de ese sucio Bellomo junto con los de esa chica Costello, no son muchos pero no estaban los chicos de ataque aquí, han caído los vigilantes es por eso que lograron entrar. ¿Qué hacemos señor? — ¿Qué hacemos?, pues lo que mejor se nos da, matar a estas escorias que han tenido el descaro de venir hasta mi casa y amenazar a mi familia.—Ya sabes lo que hay que hacer, tú ve por el lado izquierdo con los mejores hombres que puedas reunir y que Isaías vaya por el derecho, yo me quedare aquí en el centro para arremeter contra los que logren entrar por esa puerta a la casa, ahora vamos pongámonos en marcha—Y así lo hacemos, ellos atacan a la mayoría que entran descuidados pensando que
AlanaLlegamos al lugar que Gianni nos envió para esperarlo, pero he venido observando en el trayecto cada vez que podía por si venía otro auto detrás de nosotros, pero nada, no había nadie.¡Gianni más te vale que cumplas tu palabra!Cuando me baje del auto seguido de Enzo y la señora Carmen que venía cargando a la otra bebé, lo primero que se me vino a la mente es. ¿Qué voy a hacer cuando necesite pañales o ropa para cambiarlas?— ¿Hermana qué es lo que está pasando? ¿Por qué Gianni nos envió lejos de casa? —No sé ni que decirle porque no me dijo que fue lo que estaba pasando exactamente, ni quiénes eran los que habían entrado a la casa por la fuerza estoy igual que él, sin saber mucho.—No lo sé hermoso, no lo sé, pero debemos esperar que él va a venir por nosotros, tiene que hacerlo—El hombre de confianza de él nos hace un gesto de que lo sigamos y así lo hacemos.Entramos a la casa, por fuera no es nada del otro mundo una casa con dos pisos, tiene una decoración muy sencilla per
Gianni¡Malditos nos tendieron una trampa!, todo fue bien planeado por ese par de ratas, quien iba a pensar que después de todo si tenían cerebro.Este tipo nos dio las indicaciones pero en realidad no era en donde se escondían ellos, al llegar allá el lugar estaba solo con unos cuantos hombres armados que en cuestión de minutos los liquidamos.¡Me siento tan enojado y frustrado por esto que acaba de pasar!, los hombres revisaron los alrededores pero no hay nada, solo estaban ellos.— ¡Isaías vámonos de aquí!, tengo un mal presentimiento con respecto a mi familia, pongámonos en marcha—él me indica que sí y se pone en marcha conmigo, he sido un completo tonto por dejarme engañar por este par de novatos, con mucha más razón tengo ganas de torturarlos antes de que dejen de respirar.—Sí señor, entendido—Nos vamos con rumbo a la casa de seguridad en donde envíe a mi esposa con las niñas y su hermano.—Quiero estar cuanto antes allá con ellos y necesito que me consigan la dirección exacta
AlanaEl hombre de confianza de Gianni se ha desplomado en el suelo, el pobre hombre está tratando de respirar pero es en vano, se agarra la garganta con fuerza y está empezando a botar espuma por la boca.Asustada me acerco a él, y este me agarra con fuerza de la mano, se atraganta con su saliva y la espuma que está botando de la boca, pero logra decirme unas pocas palabras con un gran sobreesfuerzo de parte de él.— ¡Corr…Co…corra señ…señora! —Después de eso se desploma en el suelo con los ojos mirando a la nada.¿Está muerto? ¿Pero cómo?, él solo estaba comiendo la comida y bebió todo el jugo que nos acaban de servir la señora…La respuesta llega a mí de golpe, con una mano temblorosa la estiro y le cierro los ojos, pero sé quién fue que lo asesino de la manera más cobarde, estoy muy aterrada en este momento tengo miedo de ponerme de pie y girarme para enfrentarla, no sé qué esperar de ella, puede estar apuntándome con un arma o quién sabe, quizás quiera hacerle algo a mi hermano.