Capítulo 44 - Salvar (nos)

(Alice Thompson)

Admito que era lindo atenderlo, incluso en uno de nuestros cumplemeses le regalé un portarretrato con nuestras fotos, era como un recuerdo de lo que fuimos como amigos y ahora como pareja, era algo que no le había hecho a nadie. Me hacía querer ser especial.

Por otro lado, en ese tiempo noté que también colaboraba en los quehaceres, cocinaba bien, era bastante servicial, pero empecé a conocer más de sus vicios, y no solo era el alcohol, pues a las 8pm todas las noches recibía llamadas de unos amigos para conectarse y jugar videojuegos en línea, no digo que este mal pero ¿todos los días? Vaya eso resultó un asombro.

A veces llegaba muy exhausta del trabajo y la casa era un completo asco, comida por doquier, latas de atún, snacks, pizzas, era un reguero absoluto. Y ya lo habíamos hablado en muchas ocasiones pero era como si le placiera echar desorden por donde caminaba, ya estaba colmando mi paciencia. No digo que yo no sea desorganizada pe