Pamela Al llegar a la casa de la manada le ordenó al primer centinela que veo que valla por el médico mientras Alex y yo entramos siendo recibidos por un preocupado Daniel y una inquieta Ana que nos comienzan a interogar.-Que paso.-Por qué el alfa está herido.-Dónde está el señor Brian y la señora Monserrat.-Ya ustedes dos dejen los pasar y en vez de estar asiendo proguntas vallan por batas para que se las coloquen.Gracias a la diosa luna mi madre los calla y los pone hacer algo útil, Daniel se apresura a ir por las batas y nos las ofrece con una sonrisa un poco preocupada, me escondo detrás de Alex para transformarme y colocarme la bata me adelantó a Alex y a mi padre para hablar con ellos.-Estamos bien, Alex solo tiene un raspón y mis suegros están en el bosque arreglando ciertas cosas.-Pamela espérame aquí, iré a ver a mis padres.Alex me habla al oído pero antes de que se valla lo tomo de la mano deteniendo lo y lo miro con molestia para hablarle con firmeza.-Tú no irás a
Álex.Estoy tan feliz de que Pamela ya me allá perdonado pero me preocupe por el pequeño problema que tuve con mi padre, nunca nos emos llevado bien por qu tenemos el mismo carácter aferrado y no nos gusta que nos diga que hacer pero Pamela supo manejar la situación y calmar la irá de mi padre, después del regaño de mi abuela nos dirigimos a nuestra habitación y casi salto de la emoción cuando Pamela entra antes que yo y se recuesta en mi cama con un poco de cansancio, me aserco a ella y me siento a su lado para acariciar su pierna con delicadeza ganando me un dulce sonido por parte de ella de satisfacción.-Hay que rico Alex, últimamente me siento más cansada y a veces me duelen los pies.-Es por el embarazo amor que tal si te preparó la tina con agua caliente.-Eso me encantaría y más si tú me acompañas.-Eso planeaba Pam.Le doy una sonrisa pícara a Pamela que se muerde el labio inferior para verme de pies a cabeza asiendo que mi corazón se aselere, mi lobo se siente tal feliz de q
Alex. Cómo pude ser tan descuidado con mi lengua al decirle esto a Pamela, se que estamos casados y vamos a tener un hijo pero algunas de mis fantasías son algo vergonzosas pero al ver la cara de Pamela con esos grandes ojos supricantes sedo a su petición. -Bueno uno de ellos es poder acariciarte en el bosque y ya sabes a qué me refiero con acariciarte así que no me vengas con inocencia y la última es poder poner crema vatida en tu cuerpo y lamerla toda las otras que tenía ya la e cumplido. -Cuales eran amor. Pamela me sigue viendo como borreguito y ante esos ojos no puedo negar nada siempre han sido mi debilidad desde que éramos pequeños así me convenció de jugar a las muñecas la primera vez que nos vimos. -Esta bien la primera era poder ser tu pareja y poder tocar todo tu cuerpo y la segunda era bañarme contigo y aser cosas de adultos. -Bueno tal vez algún día de estos se cumplan pero hay no amor ya que estoy un poco cansada. Pamela me suelta y sale del baño, tomo una toalla p
Pamela. Después de que Alex me trajo el desayuno y platicáramos un poco al parecer algo en mí ha despertado no sé si son instintos o es un lado oscuro mío pero esa idea de amenazarlos se me ocurrió y me pareció muy bueno a Alex le encantó y creo que se emocionó de más, no debo decir que desayuné dos veces esa mañana pero después de darme una ducha y descansar un poco ya no pude ver a Alex ya que está muy ocupado organizar todo para que varios centinelas puedan infiltrarse en esos lugares y amenazaran ligeramente a las personas y espero que no los lastimen ya que son inocentes y solo están intentando sobrevivir día a día muchos son inmigrantes, ancianos, drogadictos o gente en situación muy precaria que por haces del destino terminan así pero no importa su situación siguen siendo humanos y hay que tratarlos como tal respetar sus derechos y sus opiniones pero tampoco estoy dispuesta a seguir recibiendo amenazas y que algún día se hagan realidad no pienso poner en riesgo la vida de mi c
Alex. En estos días estado muy ocupado por el asunto de buscar a la persona que está amenazando a Pamela pero hoy tengo un poco de tiempo a la hora de la cena así que voy a buscar a Pamela para poder pasar un poco de tiempo juntos pero no la encuentro por ningún lado y me comienzo a impacientar bastante encuentro a mi padre en el comedor junto con el resto muy tranquilos, tal vez ellos sepan dónde está Pamela. -Han visto a Pamela. Al hacer esa pregunta todos se voltean a ver entre sí haciendo que me alarme más. -No estaba contigo. -No señor Rue en todo el día no le he podido ver desde la mañana, he estado bastante ocupado. -Pensábamos que estaba contigo. Me desespero tanto que salgo de la cocina y de la casa lo más rápido que puedo y llamo a los centinelas, a todos les hago la misma pregunta que si nadie ha visto a Pamela pero todos niegan, les doy la orden de buscarla, mi desesperación está llegando a niveles muy altos, tal vez la secuestraron en mi m*****a cara y yo ni en cuen
Pamela.Me despido y me doy cuenta de que estoy sola, Alex ya no está a mi lado de seguro otra vez se despertó temprano para ir a ver a los centinelas y rotarlos en sus lugares, está maldita situación nos está desgastando tanto a los dos, debo de buscar la manera de como poder ayudar a Alex más y resolver esto lo más pronto posible, me siento en la cama y doy un suspiro cansado miro la habitación y se siente más vacía de lo que está y fría, me levanto de la cama y dirijo a la ventana para ver el bosque, los árboles están perdiendo las hojas cada vez más rápido asiendo que el paisaje se vea más triste de lo que es, me dirijo al baño para darme una ducha tibia y despertar bien mi cuerpo, escucho sonidos en la habitación y una sonrisa se dibuja en mi rostro al pensar que es Alex, cierro la regadera y tomo una toalla para envolver mi cuerpo, salgo del baño pero la vergüenza me invade al darme cuenta de que no es Alex sino una de las mujeres de servicio que me ve con mucha sorpresa.-Discu
Pamela.Estoy sentada en una de las lindas sillas de madera en el pórtico trasero rodeada por los tres jóvenes que no dicen absolutamente nada y a mi no se me ocurre nada que decir, esto es peor que estar en un velorio de perdida en un velorio se escuchan murmullos pero ellos no dicen absolutamente nada, hay que alguien me saques de esta situación y creo que veo a la persona que tal vez me pueda ayudar con esta situación tan incomoda aunque no sé si sea de mucha ayuda pero no pierdo nada con intentar, alzo la mano y le hablo a mi hermana Ana.-Ana dónde has estado.Ana me voltea a ver y se acerca con su rostro tan característico de no expresar nada y se recarga en uno de los pilares del pórtico.-Créeme hermanita que no quieres saber a menos que te quieras meterte en problemas o eso es lo que estás buscando.-No ya tuve suficiente con lo de ayer.-Sabes Pamela siempre pensé que eras más lista pero veo que tienes un lado temerario.Me doy cuenta de que los tres jóvenes ven a Ana de pi
Pamela.Miro atentamente lo que pasa frente a mi, la tía Jana los mira con molestia y odió como si no fueran sus hijos, me da un poco de tristeza ver qué su madre los trate de forma tan fría todo lo contrario a como mi madre nos crío con mucho afecto y atenciones.-Ya saben cómo trabajar no vienen a fraternizar y hacer un día de campo.-Cuales son las órdenes señora.-Deberan acudir durante las noches a los lugares frecuentados por la mujer infiltrarse en ellos y pasar desapercibidos, si la llegan a localizar las órdenes son capturarla con vida para sacar información, durante el día regresarán a la manada del Alfa Alex y entregarán la información que recopilen al Alfa para después ser los guardaespaldas de la luna Pamela.- ¡ Que !No puedo evitar mi sorpresa y contener mi boca al escuchar esa última orden llamando la atención de todos asiendo que me sienta apenada de seguro piensan que no quiero sus compañía y no están del todo equivocados, no los conozco y no deseo tener tres sombra