"¡Pfft! ¿Es necesario preguntar? ¡Probablemente está aquí, para conseguir el poco dinero que le queda en su cuenta bancaria! ¡Jajaja! Todos ustedes probablemente no se dieron cuenta, ¡pero ayer él ni siquiera tenía dinero en su billetera!", dijo Douglas mientras se reía.

Leila no dijo nada más. Cuando él todavía era rico, ella no podía negar que sentía algo por él.

Ahora, sin embargo, no sentía nada por él, después de presenciar todo lo que hizo el día anterior.

"¡Así es! ¡Ha venido a retirar dinero, y Cindy ha venido con él!", dijo Leia mientras se reía también.

La cara de Leila se arrugó, ligeramente, cuando escuchó el nombre de Cindy. Inmediatamente apartó a Cindy a un lado y empezó a contarle historias de cómo él estaba pobre, y que tal vez la había jalado para estafarle su dinero.

Una vez que escuchó todo eso, Cindy miró a Gerald con ojos ansiosos. "¿Por qué vendiste el coche, Gerald? Además, ¿por qué lo vendiste por un precio tan bajo?".

Ella estaba sinceramente preoc