"¿Qué quieres?" Gerald nunca pensó que se encontraría con Sara por casualidad, por lo tanto, simplemente respondió con frialdad.

"Hehe. Me gustaría preguntarte algo. Después de darme una bofetada esta mañana, ¿qué sientes y cuál es tu estado de ánimo ahora mismo que estás delante de mí en esta calidad de camarero?" preguntó Sara con amargura.

Sara sentía muchos remordimientos y resentimientos en su corazón después de recibir una bofetada en la cara. También se sentía muy avergonzada por cómo Gerald la había superado.

Estas emociones habían preocupado a Sara durante todo el día. No podía esperar a vengarse de él.

Gerald respondió mientras sonreía amargamente: "No siento nada en absoluto. Habla ahora si tienes algo que quieras decir. Estoy ocupado".

"¡Jajaja! ¡Ocupado mi trasero! ¡Gerald, vete! ¡Tráeme una servilleta!" Contestó Sara mientras señalaba un servilletero a un lado.

"Ahora eres camarero, así que debes atender bien a tus clientes. Si no, voy a quejarme de tu actitud a t