Moscú

Anna estaba sentada leyendo, pero observando todo a detalle había notado en los últimos días gente muy sospechosa que entraba y salían de la enorme mansión lo que no le daba buena espina, la cabeza le daba vueltas con la conversación que había escuchado escondida desde la cocina, donde le informaban a Dmitry que su contacto en el FBI le había tenido que disparar a Baltazar, ese nombre la dejó con un fuerte dolor de cabeza, escucharlo la hizo sentir angustia y no supo porque al contrario de Derek que la hacía sentir tranquila hasta dedujo que ese debía ser su esposo y que se había enamorado lo que le daba mucha ilusión.

Luego de esa conversación Anna tuvo un sueño, una pesadilla, donde tenía la boca partida y forcejeaba con alguien, pero no pudo recordar más, comenzaba a sentir frustración y no quería preocuparse más de la cuenta aún seguía en el primer trimestre y corría el riesgo de perder a su bebé.

— ¿Estás muy pensativa? –Espabiló al escuchar a Dmitry, detrás suyo, el hombre