Y él había dicho que la amaba, que no merecía su primera vez de esa manera, que se lo compensaría llevándola a un viaje romántico. Sin embargo, el viaje nunca llego, y a decir verdad a Andrea tampoco le importo, lo ama y lo único que quería estar con él. Después de esa primera vez, los encuentros
CAPITULO 2 No se veía bien al conductor, pero le dio la impresión de que era alto y fuerte y de barba tupida. Él le dijo por señas que bajara bien la ventanilla, obviamente Andrea se negó, aterrada. Todo tipo de pensamientos pasaron por la cabeza de Andrea, hasta el punto de pensar que encontraría
CAPÍTULO 3 De cerca y en persona, Andrea era aún más hermosa, y Cameron estaba poniendo todo su esfuerzo por no mirar las torneadas y blancas piernas debajo del corto vestido. Le pareció totalmente distinta a Amara. Andrea era caprichosa, nada sofisticada y muy natural, además de parlanchina, pare
CAPÍTULO 4 ―¡Eres un animal! ―exclamo Andrea frustrada ― ¡Me golpeaste! Cameron sonrió y replico divertido. ―Nada más fueron unas nalgadas y además te las merecías. Ella se cruzó de brazos y giro el rostro para mirar por la ventana. En realidad, estaba avergonzada y si era un poco más sincera, e
Lanzo el celular en su bolso y se cruzó de brazos con una clara expresión defensiva. ―Ella te envió ¿verdad? ―Andrea, no es como piensas. Amara… ―No lo puedo creer, ¡¿Cuándo va a dejar de entrometerse en mi vida?! Es mi hermana, no mi madre. Ella estaba furiosa, le dio una mirada despreciativa a
CAPÍTULO 5 Cameron no pudo evitar apreciar su bonita figura debajo del infantil pijama de corazones. En especial la redondez de sus senos, eran turgentes y del tamaño perfecto. ―¡Oye! ―Andrea chasqueo los dedos y Cameron la miro ―Mi cara está aquí arriba. El alzo una ceja e intento dar un paso ha
―¿Ibas a dejar que te toque? Andrea frunció las cejas y lo miro como si estuviera loco. ―¿Qué? ―Lo que escuchas, si no llego a tiempo, ese idiota ―señalo hacia atrás ―Hubiera puesto sus manos en ti. Su aspecto parecía el de un esposo o novio enojado, Andrea quería reír, ni siquiera Francis se ha
CAPÍTULO 6 Los dos se miraron fijamente y en poco tiempo Andrea se perdió en la intensidad de los ojos verdes que la miraban. Estaban tan cerca que los labios de Cameron rozaron los suyos, su cuerpo se erizó, despertando su carne. Y en el fondo de su ser, pensó. «Quiero más, sea lo que sea esto, q