Bebé Robbie volvió a colocarse frente a Roxie y la miró fijamente a los ojos mientras le preguntaba: “Ella te ha hecho tanto daño, Hermana seis, ¿pero ni siquiera la odias por ello? Parece que las otras hermanas tampoco la odian. ¿No crees que esto no concuerda en absoluto con el principio de la división de inteligencia militar de que todas las malas acciones deben ser castigadas?”.

Roxie dijo en voz baja: “En fin de cuentas, sigue siendo nuestra hermana que creció con nosotras. Las hermanas tienen un profundo vínculo con ella. Aunque haya cometido un error, las hermanas probablemente esperan que pueda arrepentirse”.

Bebé Robbie dijo: “El error que ella cometió te causó una parálisis de la cintura para abajo. Si ustedes pueden perdonarla por este tipo de error, ¡debería alabarlas por su generosidad!”.

Roxie se quedó callada.

Su intuición le hizo darse cuenta de que Bebé Robbie podría haber sentido que algo andaba mal.

“Seis, es hora de que le pongas un fin a tus mentiras”.

Roxie