-Alina-

Ya había entrado a clase no quería este profesor me odia, me senté a lo último como siempre y me acosté sobre mis brazos para descansar mientras todos entran

En este clase estoy sola

Ni Abby mi mejor amiga

Ni Alejandro mi mejor amigo estaban en esta clase

El profesor llegó y no me di cuenta cuando lo escuché decir

-señorita Lancaster mi clase no es un circo quítese las gafas- me dice arrogante

-así estoy bien profe gracias - le dije sin desgano

-si no quiere tener un 0 en mi clase le recomiendo quitarse las gafas- me dice aún más arrogante

Sin más que hacer me las quite y todos comenzaron a murmurar y el muy idiota ahora sí preocupado me preguntó

-señorita está usted bien?-

Asentí y comenzó la clase

No me había percatado que tenía a alguien a mi costado cuando me preguntó

-hola, oye estás bien?- me dice con preocupación en su voz

Cuando lo vi me sorprendí

Oh no es el loco del estacionamiento

Asentí sin mirarlo pues no quería relacionarme con este loco

La clase se sintió demasiado larga y sentía la mirada del loco a mi lado

Sonó la campana y siempre espero que todos salgan para salir yo pero el loco a mi lado no se iba

No dejaba de observarme, me cansé y levantándome le dije

-Ya deja de mirarme, no te me acerques- y sin más me fui

Me puse mis gafas otra vez y fui a buscar a Abby y Alejandro ellos eran novios desde hace 2 años y eran muy lindos

Me sentía orgullosa de que ellos fueran felices

Siempre trate de mantenerlos al margen de mis problemas porque  no quería que mi padrastro les hiciera algo

La encontré en el comedor con Alejandro comiendo muy juntitos así decidí no molestarlos

Hoy las clases eran cortas tenía nada más esa y ya se acababa el día así que ya me podía ir

Cuando iba a la salida un fuerte jalón de cabello me detuvo

Era la famosa Y encantadora Elizabeth Del rey

La niñita de mamá que hace lo que quiere y siempre luce perfecta

E Sido su monigote por 3 años no me deja en paz y no he logrado que me deje

-Hola puerquito, que te paso? Te peleaste con tu papito?- así me dice ella puerquito pues tengo muchos cachetes y mi contextura es gruesa no soy gorda pero tampoco delgada

-déjame Elizabeth no estoy de ganas de aguantarte hoy - le dije soltándome de su agarre

-oh lo siento puerquito, hoy se me antoja jugar contigo, qué tal si me limpias los zapatos?- me dice tomándome más fuerte del cabello y agachándome

La empuje y corrí afuera sin mirar hacia atrás

Quería caminar hasta casa quería despejarme

El trayecto del instituto a casa caminando era bastante largo y caminaba por un en medio del busque que normalmente estaba sola solo pasaban autos y no todo el tiempo

Caminando escuché que venía un auto pero lo ignore como siempre hago

Comenzó a andar junto a mi iba a mi paso y dos hombre dentro de él comenzaron a hablarme

-hola preciosa, que haces solita está calle tan larga- me dice el que iba el copiloto

Solo lo ignore y camine más rápido

Se bajaron y comencé a correr

Me metí en el bosque para perderlos pero para mí suerte está parte del bosque no la conocía y me perdí

Corrí lo más que pude pero estaba muy cansada y me faltaba el aire de tanto correr

Paré y me quedé detrás de uno de los tantos árboles al rededor

Sentí unas manos en mi cintura asustándome al instante

Grite todo lo que pude pataleando para que me soltará pero fue en vano recibí un golpe en mi estómago haciendo que perdiera el poco aire que me quedaba

-mírame cariño, no quiero lastimarte- me dice esa voz que reconocí al instante

Era mi padrastro

-suéltame maldito imbécil- le grite retomando el aire

-te di una oportunidad y no la aprovechaste ahora lo pagarás- me dice metiendo su mano por mi ropa y tocando mi piel

Pataleando trate de soltarme pero no pude

Hasta que lo sentí un fuerte dolor en mi estómago y un frito ahogado en lágrimas

Había enterrado una daga en mi estómago

Me tiró al suelo y lo peor estaba por llegar

No pare de patalear pero me sentía cada vez más débil estaba sangrando mucho

Me di cuenta que no tenía ropa en la parte de abajo

-nonono por favor, no me hagas esto!!!- grite llorando a mares

-te lo advertí cariño, te dije que te castigaría, perdóname hijita- fue lo último que dijo cuando entro en mi sin tener compasión de nada

Me dolía muchísimo, primero él, luego su amigo no podía seguir luchando

Escuché una voz y me quedé estática

Era la voz de mi papá que había muerto hace 11 años

-hija no es tu momento, debes seguir luchando- fue lo último que escuché cuando la obscuridad llegó a mi

Me desmayé

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holiiiii otro cap