Harvey York dijo casualmente: "No me gusta trabajar, me gusta que mi esposa me cuide".

Harvey parecía tranquilo mientras Sean Zimmer y los demás al otro lado del teléfono estaban furiosos.

Nunca habían visto a una persona que fuera tan directa acerca de ser mantenido. Verdaderamente, es un legendario.

“Bien, entonces dime. ¿Qué quieres?".

Sean todavía estaba conteniendo su ira.

Temía que su tono resultara grosero y que Harvey volviera a colgar.

“Las condiciones son simples. ¡Quien la despidió tiene que ir a buscarla por su cuenta!". Dijo Harvey casualmente.

“Bien, yo la despedí. ¡Iré yo mismo!". Sean dijo rápidamente.

Harvey se rió entre dientes.

“Tío, ¿de verdad crees que soy un idiota?”.

“Si tuvieras autoridad en la familia Zimmer, ¿necesitarías llamarme ahora mismo?”.

“Deja que el Amo Zimmer venga solo. Si no es así, no volveremos".

Du... Du... Du...

La actitud de Harvey se había vuelto más inflexible.

Sean miró la hora, ya eran las ocho de la mañana. No se atrevía a d