Noah se quedó helado. No pudo obligarse a acercar la taza.

Noel entrecerró los ojos brevemente hacia Marcel y luego dejó escapar una risa amarga.

"Parece que mi cuarto hermano ya no tiene emociones después de ser el señor durante mucho tiempo...".

"Nunca entendí lo distantes que pueden llegar a ser las familias ricas, pero ahora lo entiendo".

"Habla. No me hagas perder el tiempo”, dijo Marcel con voz helada.

Noah dudó por un momento al ver el comportamiento apático y sin emociones de Marcel.

"Segundo hermano ya debió llamarte", dijo Noah en voz baja.

“Deja ir a mi hijo”.

"¿Por qué?", preguntó Marcel con frialdad.

"Él es mi hijo. Cometió errores, pero no merece la muerte”.

"La agencia de seguridad de los York están a cargo de su caso, pero estoy seguro de que también respetarán tu decisión".

“No tenemos muchos herederos varones en la familia de esta generación. Julian también es considerado un gran talento”.

“No quiero que mi hijo tenga un futuro arruinado solo por algo como